Not The Right One (fanfic n.h)

49

En cuanto llegaron los demás, se dispusieron a entrar al club, no sin gritar entusiasmados y hacer tonterías. Un poco de lo de siempre. 

Al entrar, Nick necesitó dejar de caminar, al verse admirada por tanta producción frente a ella. Había luces moviéndose por todos lados, la música era justamente la música con la que ella amaba bailar, y lo mejor: Una barra larguísima, con muchos chicos y chicas atendiendo y sirviendo toda clase de tragos. El estilo rústico de Fabric era lo que caracterizaba al club, donde todo era de madera, incluyendo el mesón de la barra y las enormes escaleras que dirigían a la pista, que se encontraba un nivel más abajo, la cual se podía ver desde donde estaban, gracias a un gran balcón que cruzaba todo el lugar. En realidad, el primer nivel consistía sólo en el gran balcón, donde la mitad estaba ocupada por la barra y un pequeño sector de sillones a un costado. 

—¿Estás bien? —Preguntó Niall, apareciendo tras ella y sonriendo con gracia. 

—¡Sí! —Exclamó, por sobre el volumen de la música —¡Esta fiesta será épica! 

Niall soltó una carcajada al verla tan emocionada. Estaba recuperando su actitud y la ansiedad se estaba alejando. Era el momento de disfrutar. 

Los golpes bajos de la música se sentían rebotar en su corazón y caja torácica, mientras su estómago se volvía loco de entusiasmo, aún no bebía nada y ya se sentía alucinando, y ensimismada con la música. 

—¿Y los chicos? —preguntó, al darse cuenta de que ya no se encontraban por ahí. Niall se encogió de hombros e inclinó la cabeza, indicando a la barra. Caminaron juntos hasta ahí y pidieron dos vasos de vodka-naranja. 

Nick se apoyó con los codos sobre la baranda del balcón, tenía su vaso de vodka en la mano y a su mejor amigo a la derecha. Tomaron un sorbo al mismo tiempo y se sonrieron el uno al otro. Miró hacia abajo, donde una gran masa de gente se movía al ritmo de la música. Distinguió un par de rostros conocidos, pero no a los chicos. 

Su vaso no era muy grande y la parte de zumo de naranja era casi igual a la de vodka, por lo que no tardó mucho en beber hasta dejarlo a la mitad. Sintió la mirada de Niall sobre ella y, al verlo lo confirmó. Él no se inmutó, por el contrario, siguió viéndola y sonrió. 

—¿Qué? —preguntó Nick, risueña. 

—Nada—Respondió Niall, riéndose también. 

Miró su vaso un segundo y decidió beber el contenido que le quedaba de una vez. Lo dejó sobre la baranda y tomó la mano del chico. —¡Vamos a bailar! —. Bajó corriendo por las escaleras con Niall detrás suyo, enganchado de su mano. Al llegar a la pista se dio cuenta de que sus dedos estaban entrelazados, pero ella no lo había hecho. 

Sin detenerse a pensar, se metió entremedio de la masa de gente, haciéndose espacio para caminar dentro. De vez en cuanto tenía que tirar de la mano de Niall para que no se quedase atrás, puesto que ella era bastante rápida y no tenía problemas haciéndose paso. 

Se detuvo. Giró sobre sí misma en busca de algún rostro, pero nada. Tenía la luz azul sobre su cara y, de vez en cuando, rayos de colores flúor pasaban por encima de sus ojos y desaparecían en un instante. Niall la miraba confuso, como preguntándose qué diablos estaba haciendo, pero ella sólo sonreía y miraba hacia todos lados. Aún no soltaban sus manos. 

—¡Ahí está Harry! —Exclamó y corrió hacia él, sin importar quién estuviera al paso.

Avicii estaba sonando a todo volumen. Nick tocó el hombro de su amigo y él se volteó. 

—¡Aquí estaban! —Se hizo a un lado y Zayn y Liam aparecieron tras él. —Ven, Nick. Vamos a bailar —Dijo, y tomó de su mano libre para tirar de ella y avanzar unos pasos más allá, donde había espacio suficiente para ellos. Nick se volteó en el instante en que Niall soltó su mano. No quería separarse de él, pero no podía llevarlo de la mano toda la noche. Niall le lanzó una sonrisa tímida y ella volvió con Harry, que la miraba con picardía. 

—¿Quéee? —Preguntó, riéndose, mientras la música se metía dentro de ella. Harry dijo algo, pero no logró escucharlo, —¡¿Cómo?!

—¡Que si tienes algo en mente! 

—¡¿A qué te refieres?! —El chico indicó a Niall con el mentón, se encontraba a un par de metros más allá y conversaba con Liam y Zayn. 

Nick sonrió y desvió la mirada. No planeaba nada, pero se sentía preparada para lo que fuera, tenía una pequeña ilusión guardada para sí misma, en el fondo de su alma. No tenía expectativas para esa noche, pero si algo sucedía, pues que fuera lo que fuera. 

Harry soltó una carcajada y negó con la cabeza. Comenzaron a bailar y a disfrutar de la fiesta. Harry la hacía girar y le cantaba, haciendo muecas y sacándole miles de risas, pero el ambiente en la pista estaba demasiado húmedo y caluroso como para estar bailando por más de una hora sin parar. 

Por lo que, pasado un rato, ella, Harry y Niall subieron las escaleras para beber otro refrescante y embriagador vaso de vodka. Se apoyaron, uno al lado de otro, sobre el pasamanos y miraron hacia abajo, mientras lanzaban comentarios y bebían de sus tragos. Lo estaban pasando de maravillas. 

Harry bajó su vaso en dos minutos y pidió otro idéntico. Le tomó poco más de tres minutos beberlo completo también y volvió a la pista, con la excusa de que la noche era demasiado corta como para detenerse. Eran apenas las 12.30 am. 

Nick volvió también a la pista en cuanto Niall se alejó para ir al baño. Estando sola en medio de la gente, un chico se acercó a ella rápidamente para bailar. Ella accedió. Se veía simpático, aunque sólo lo había visto un par de veces en los pasillos de la escuela. 

—¿Eres amiga de Liam, no? —Preguntó en cuanto ella le dijo su nombre. Nick asintió con la cabeza y le sacó un sorbo a su vaso de vodka. —¡Claro! Te he visto con ellos un par de veces, yo estoy en la misma sección que él. —En realidad a Nick no le importaba demasiado, por lo que asentía y se dedicaba a bailar, más que nada. 

Durante el transcurso de la noche, subió por vodka y bajó por música unas cuántas veces. Bailó con algunos chicos, pero se aburría con facilidad, entonces se largaba con la excusa de ir al baño o beber algo. —Tengo mucho calor, saldré un momento —decía. Suerte que eran chicos simpáticos y no parecían ir en busca de algo más que un rato de baile. 

Hacía un buen rato que no veía a ninguno de sus amigos, pero estaba pasándolo bien de todos modos. En cuanto comenzó a sentirse algo mareada decidió dejar de beber hasta que se le pasara un poco. Quería recordarlo todo cuando despertara por la mañana. 

Ya eran las 4.15 cuando volvió a encontrarse con Louis en medio de la pista. —¡Vamos por algo de beber! —Exclamó y la guió por entre la gente hasta las escaleras. Una vez más se encontraba en la barra, pero solo pidió un poco de Coca Cola. 

—Niall estaba buscándote —Comentó en un momento. 

—¿Dónde está ahora? —Preguntó Nick, ansiosa por volver a estar junto a él. Louis se asomó por el balcón y apuntó hacia abajo. Tardó un poco en divisarlo, pero lo vio. Tenía un vaso en la mano y con la otra hacía girar y bailar a una chica. Era linda, tenía que aceptarlo, pero tenía suficiente alcohol en el cuerpo como para no querer disimular sus celos. —¡Es mío, perra! —Exclamó, haciéndose la graciosa. En ese punto, Nick sabía que los chicos se daban cuenta de todo hace un tiempo. 

Louis soltó una gran carcajada y la alentó a ir por él. Bajó las escaleras y miró hacia arriba, mientras Louis, desde el balcón, le hacía algunas señas para guiarla hacia Niall. Había demasiada gente y ella estaba ebria, por lo que hubiese sido imposible hallarlo sin indicaciones. 

Cuando al fin lo vio, se hizo paso entre la gente y le dio unos toques en el brazo. Niall se volteó e hizo una mueca graciosa al verla. Ella le hizo una seña con la mano, para que se acercara, por lo que Niall no vaciló un instante y le hablo a la chica que lo acompañaba en el oído. Ella asintió, y muy sonriente, se despidió con un beso en la mejilla. 

Se acercó a Nick, sin dejar de bailar y tomó de su mano. 

—¿Estás reemplazándome, Horan? —Exclamó, sin una pizca de vergüenza. Seguramente iba a arrepentirse de todo eso por la mañana, pero en ese momento las palabras se le escapaban sin filtro que las pudiera seleccionar. 

Niall la miró, enarcando sus cejas con exageración, abrió la boca y exclamó: —¿Yo reemplazarte? ¡Nunca!