Capitulo 14

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Harry, Draco y Ginny se encontraban corriendo hacia el despacho de Lockhart para darle la información sobre la Cámara de los Secretos y así poder rescatar a Ron. Ya no les importaba demasiado el monstruo que allí habitaba, sólo querían encontrar a su amigo y hermano con vida. Sabían que lo más sensato habría sido haber buscado a otro profesor y no pensar en ir sólo con ese inepto, pero en ese momento no podían pensar en otra cosa que no fuese el pelirrojo en la Cámara, a punto de ser devorado por el basilisco o asesinado por el heredero de Slytherin si es que también se encontraba allí.

Ginny, que iba detrás de ellos, apenas podía pensar con claridad. Ni bien había oído que la bestia se había llevado a uno de sus hermanos, rápidamente le habían dejado de importar los petrificados y el tema del heredero. Lo único que quería era recuperar a su hermano sano y salvo y luego, poder ver a sus padres a la cara y contarles la verdad, pero concluyendo con que sí había habido un final bueno, donde todos volvieron y nadie fue asesinado, menos un miembro de la familia.

Apenas llegaron al aula de DCAO, el señor Lupin estaba ahí, terminando de guardar sus cosas. Pero ni bien abrieron la puerta bruscamente, giró la cabeza hacia ellos y se puso delante, preguntándoles qué les ocurría.

- ¡Tenemos que hablar con Lockhart! ¿Sigue aquí?-preguntó Draco.

-Está en su despacho. Niños, ¿qué ocurrió? ¿Vieron algo?-preguntó Remus, casi asustado.

-Tenemos información sobre el monstruo y si va a la Cámara de los Secretos, debe saber a qué se enfrentará-contestó Harry, pasando por al lado suyo, seguido de sus dos amigos. Dejaron a Lupin ahí, atónito, y subieron las escaleras para ir a ver a Gilderoy.

Apenas entraron en el despacho de Lockhart, Harry comenzó a decirle que habían descubierto cosas sobre el monstruo de la Cámara, pero se calló abruptamente cuando vio que el sujeto estaba preparando sus maletas de forma frenética, aunque quedó estático cuando se dio cuenta de que los niños lo estaban mirando, desconcertados. Harry le preguntó sarcásticamente si es que pensaba irse a algún lado, a lo que él comenzó a excusarse y decir que le habían enviado una carta sobre una supuesta urgencia, mucho más importante que lo que estaba pasando en Hogwarts, y no podía posponerlo.

- ¡¿Pero y mi hermano?!-chilló Ginny, desesperada.

-Oh, pequeña, eso es lo más lamentable de esta historia, y te aseguro que nadie lo sentirá más que yo-contestó, cínicamente-. Pero debo irme.

-Oiga, es profesor Contra las Artes Oscuras, no puede irse por qué sí-espetó Draco-. ¡Debe ayudar a la escuela!

- ¿Saben? Cuando acepté el empleo, no leí en ninguna parte del contrato que debía enfrentarme a monstruos y hallar lugares ocultos. Que otros se ocupen de eso.

- ¿Va a escapar?-preguntó Harry, consternado-. Sus libros dicen tantas cosas y...

-Justamente, los libros pueden mentir. No deben creer todo lo que leen-contestó Gilderoy.

- ¡Pero usted los escribió!

Lockhart dejó bruscamente sus cosas sobre el escritorio y se acercó a Harry para mirarlo con clara desesperación, como si el niño hubiese soltado una bomba.

- ¡Usa un poco el sentido común, Harry! Mis libros sólo serían más del montón si las personas no creyesen que haya hecho todas esas cosas. Sólo sería un escritor más que relata cuentos para niños. ¿Crees que recibir crédito es demasiado complicado?

-Es fraude total-siseó Ginny, con la cara descompuesta-. Se atrevió a robarles el crédito a escritores que realmente se arriesgaron en la vida... Usted sólo es más del montón de ineptos que se aprovechan de los demás.

Siempre contigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora