El Pijo De Al Lado #1

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-Lo bueno es que si Nico se emborracha puede venir andando a casa- dijo Joan riéndose mientras Nico estaba toqueteando una pulsera que me había puesto.

-Claro y lo dejas solo- contestó Zoe sería de brazos cruzados.

-Vamos Zoe que es una broma- le contesto Joan riéndose.

¿Qué dónde estabamos? Exactamente en casa de Joan, los chicos habían quedado aquí y ellos serían los que nos llevarían a la fiesta. Al parecer no eran tan irritantes, pero el problema llegaría esa noche. No es la primera vez que salía por la noche con ellos y las cosas nunca acababan bien.

-¿Y hacia donde está la casa de Josh?- preguntó Kayla mirando a todos lados.

-Exactamente hacia allí- dijo Dylan dejando el vaso de agua en la mesa y señalando la dirección donde se encontraba la casa.

-¿Ya has bebido agua para toda la noche?-le dije girando con ojos y recibí un codazo de Mia.

-Que graciosa, espérate a que me veas con un gyn tonic, que te vas a comer tus palabras- me contestó Dylan desafiándome y mirándome fijamente a los ojos.

[...]

Llegamos a casa de Josh, todo se veía tranquilo, no parecia que hubiera una fiesta allí adentro, en cambio cuando Josh nos abrió la puerta para entrar, todas mis expectativas cambiaron. Se veían luces de colores y demasiada gente. Era entendible, era uno de los chicos populares y sus padres de los más ricos de barrio, asique todo encajaba; una casa grande para una cartera llena.

-¡Hombre chicos! ¡Ya estabais tardando! Pasar la fiesta es vuestra y la casa también- nos dijo Josh invitándonos a entrar- No sabía que ibais a traer a las chicas- dijo con una sonrisa.

-Nosotros tampoco, pero son buenas, no te van a destrozar la casa tranquilo- dijo Joan mirándonos de reojo.

-Soy consciente de que son buenas chicas- respondió Josh dándole un golpe de colega a Joan en la espalda.

Entramos y había mucha gente, comparada con otras fiestas, en las que puedes andar. Reconocí algunas caras de las personas que formaban parte de la multitud.

-¡Oye Noa!- escuché que me decía Josh acercándose a mí para que yo pudiera escucharle.

-Dime- le contesté acercándome a él también, de hecho él era uno de los chicos que vivía en este barrio. O eso pensabamos.

-¿Tienes algo con Brayan?- me preguntó y yo me sorprendí.

-Eh, no. ¿Quién te ha dicho eso?- le dije nerviosa, porque sabía quién podría habérselo inventado.

-No nadie, simplemente era por saber, bueno voy a vigilar la barra- me dijo y se fue.

Espera... ¿A Josh le interesaba si yo tenía algo con alguien? No me jodas... No me quiero pensar nada pero ¿Puede que le guste a Josh... ?

O puede que...

Oh no...

-Tía ¿ese de ahí no es Brayan?- me dijo Mia y me di cuenta que era única que estaba conmigo, las demás ya no estaban.

-Eso parece, pero no me quiero acercar a el- dije observando a Brayan desde la distancia, hoy no quería toparme con él o por lo menos no era mi prioridad.

-Bueno tú no te acercaras pero él no va a tardar en hacerlo- me dijo Mia, y tenía toda la razón del mundo, si Brayan me ve no me dejara en paz en toda la noche- ¿vienes a por algo de beber?- me dijo Mia señalando el jardín.

-Si vamos- Le dije y empezamos a abrirnos paso entre la multitud de gente, hasta llegar al jardín, donde está la barra. Aquí hay bastante gente pero no más que allí dentro en la casa. Asique creo que aquí voy a estar la mayoría de tiempo, me agobio con tanta gente... Digamos que tengo... claustrofobia, aunque no es exagerada.