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Noa Pov

Esto era una mierda.

Dylan llegó a la quedada de casa de Nico con Mia agarrada de la cintura. ¿Enserio Dylan? Por una parte quería pensar que no se daba cuenta de que estaba mal por él, si lo he confesado, es una de las razones por las que la Noa Evans de hace años no es la misma que la de ahora. Pensé que después de haber pasado con él una noche en su casa, se había cuestionado las cosas, pero como no, el seguía con su vida como si no hubiese pasado nada.

Después estaba Mia, por un tiempo fuimos muy buenas amigas, hasta que hubo un momento en el que me empezó a dejar de hablar, pensé que sería por una temporada, pero hace alrededor de un año que no he vuelto a contarle nada privado y ella al igual conmigo.

Así como me copiaba en muchos aspectos, en varias ocasiones se ha comprado la misma ropa con la que yo había aparecido en alguna quedada o había enseñado por el grupo que tenía con mis amigas, además de que con todas las personas con las que yo tenía un trato especial, ella también tenía que tenerlo y por si no es poco, ella siempre me ha halagado por el color de mis ojos y hace unos meses se compró unas lentillas azules.

Me encontraba sentada en el sofá del salón de Nico con Danna y Owen, que hablaban de la próxima broma para Mia, la anterior había sido la del cubo y el papel higiénico, y habían dejado el listón muy alto.

María estaba en otro sofá hablando con Matteo, sonreí al verlos tan bien a los dos, ella no había dejado de hablarme de él desde que lo conoció y estoy segura de que él también le había hablado de ella a los chicos. Eran tan obvio, se veía en sus miradas, que gustaban, y lo podía ver cualquier persona que los viese en ese instante. Los ojos les brillaban cuando se veían o cuando a hablaban del otro.

Dios, que sentimental Noa.

Joan entonces interrumpió mis pensamientos- ¿alguien quiere un cigarro?- empezó a reír.

-Va, pero uno solo-contestó Josh, y los dos salieron a la calle.

Zoe empezó a darnos una charla de todas las sustancias que contiene un cigarro y las consecuencias que tenían.

Cada día Zoe me sorprende más.

Nico salió de la cocina con bebida de naranja, limón y cola. Por las tardes éramos sanos, bueno descartando al porreta de Joan, que no podía ser sano ni por tan solo una hora.

Yo seguía hundida en mis pensamientos, me molestaba ver a Dylan con alguien más, ¿Cuándo me había vuelto tan tóxica?

Entonces Mia se detuvo enfrente de mi- hola Noewis- soltó la pelinegra. Las ganas de gritarle que tuve en el momento que pronunció Noewis creo que fueron visibles, así que, fingí una sonrisa y se sentó a mi lado.

-Sabes, he dejado los rolletes con universitarios, ahora tengo novio- yo solo asentí mientras ella continuaba- estuve a punto de hablarle a uno guapísimo, es crush de casi toda la universidad, pero entonces Dylan me empezó a hablar, ¿quieres que te pase su Instagram y hablas tú con él? Es muy guapo- me preguntó.

-No te preocupes, no quiero hablar con ningún universitario, estoy bien gracias- le conteste todavía con la falsa sonrisa.

Durante más de media hora tuve que escuchar a Mia hablar de sus rollos con universitarios y con chicos de último curso, claramente lo había para restregarme en la cara que supuestamente había ligado con más gente que yo, aunque no era la única que se lo cuestionaba.

Durante toda la tarde estuvimos haciendo juegos, hablando e intentar no pelearnos, aunque los comentarios de Owen no faltaron esa tarde.

Volví a mi casa relativamente pronto, cene junto con mis padres, me duche y me dormí. Desde que llegue a casa me habían bajado los ánimos y al parecer eso Luna lo noto, porque no se separó de mí ni para dormir, de hecho cuando me estaba quedando dormida, salto a la cama y se posiciono justo a mi lado.

El Pijo De Al Lado #1حيث تعيش القصص. اكتشف الآن