El Pijo De Al Lado #1

002

- ¡Noa! - escuché que alguien me gritaba y miré para todos lados hasta encontrar a Brayan.

- ¿Cómo está la chica más preciosa del instituto? - me dijo Brayan dándome un beso en la mejilla, a lo cual yo respondí igual.

-Pues la verdad es que estoy muy bien- le dije seria, sin mostrar ningún tipo de emoción.

- ¿Espera creías que estaba hablando contigo? - me dijo Brayan haciendo sus típicas bromas.

- ¡Brayan! - le dije riendo.

Brayan era el "chico malo" del instituto, lo típico tenía moto, bebía, era mayor que yo dos años, era muy popular y los buenos dieciocho años no se los quita nadie. Y que ¿Cómo le hablaba a una chica como yo? Pues es fácil, porque básicamente se quería enrollar conmigo, pero vamos que le había dado más plantón que a Joan y Dylan juntos. Aunque pareciese mentira y Brayan me picase, sabía que no era de los chicos que tendría una relación seria con una chica, lo más parecido que había tenido a una relación era la que tenía con su perro.

- ¿Y el pijo este que hace aquí? - dijo Brayan mirando a Dylan con una sonrisa de superioridad.

-Esta es su taquilla- dijo Mia defendiéndolo.

- ¿Enserio Mia? ¿Le defiendes? ¿Es que ahora los pijos ya no saben defenderse? - contestó Brayan riéndose de qué Mia defendiese a Dylan antes de que el pudiese decir algo.

-Bueno te puedes relajar, tira por ahí a enrollarte con algunas de primero- le dije señalando la puerta del patio. Y si, acababa de defender al chico de al lado, porque solo yo, le podía decir que era un pijo.

-Uy como los defiendes, me gusta esa parte de ti- me dijo enrollando un mechón de mi pelo y acercándose a mi oído- ¿esta tarde que haces? - me dijo susurrándome al oído.

-Tengo muchas cosas que hacer y ninguna es estar contigo- le dije apartándolo de mi oído y él simplemente me dedicó una sonrisa de superioridad.

-Bueno ¿Te puedes ir? Ninguno te queremos aquí- dijo Owen de manera tranquila y de brazos cruzados.

- ¡Tu cállate maricón! - le grita Brayan a Owen señalándole con su dedo índice.

- ¿Tú de qué vas? Vete si no quieres que te rompa la cara- defendió Dylan a Owen.

- ¡Vete de aquí ahora mismo imbécil! - gritó Zoe enfadada y con desprecio al malote.

-Vete y ni te me acerques ¿Has escuchado? - le dije seria señalándole la puerta.

Brayan se fue, he de decir que por estas razones son por las que le doy plantón, con mi mejor amigo no se mete nadie, y si, ahora os preguntaréis "¿Por qué le ha dicho maricón?" Y bueno la razón es simple, Owen le atraen los chicos. Cuando nos lo confesó nada cambió entre nosotros, de hecho, nos volvimos más amigos de lo que éramos por aquel entonces. Un amigo gay al que no le da asco que hables de la regla, sepa maquillarte, te escucha cuando tienes problemas y se preocupa por ti, nunca viene mal. Y Owen es exactamente ese amigo, de hecho, es el mejor que se puede tener.

-Gracias chicas, gracias, Dylan- nos dijo acercándose más a nosotros Owen, regalándonos una sonrisa.

-No es nada Owen, no soporto a esa gente- dijo Dylan serio, se veía molesto con lo poco que lo conocía sabía que no le gusta que nadie se meta con otras personas. Me miró y al segundo quitó su mirada como diciéndome que no sabía porque no le había mandado a Brayan a la mierda todavía. Habían sido varias veces las que Dylan me había dicho que le dejara las cosas claras a Brayan, pero sinceramente no sabía ni lo que quería.

- ¿Deberíamos seguir con esto no? - dijo Kayla señalando las taquillas y yo le di una sonrisa indicando que había sido la mejor idea.

[...]