Fix You

14.

La mañana del 24 de Diciembre yo ya tenía todo preparado para marcharme a Tenerife, desde mi habitación escuchaba a Miriam corriendo de un lado a otro de la casa terminando de preparar sus maletas, ella se iría a Galicia a celebrar la Navidad con su familia y nos reencontraríamos el 31 para la fiesta de año nuevo.

- ¿Ana has visto mi secador?- La escuché gritar desde el baño.

- ¿Has mirado dentro de tu maleta? – Le respondí riéndome. Miriam era tan maniática que tenía que colocar todo mínimo tres veces y ya ni se acordaba de lo que tenía en la maleta.

- Joder – La escuché protestar, seguro que estaba dentro de la maleta.

En ese momento un mensaje en mi teléfono llamó mi atención, sonreí al ver quien me lo enviaba.

Mimi:

Canaria, sólo quiero recordarte que a mi abuela le flipan las chocolatinas Tirma de tu tierra y espero que vuelvas con varias cajas el 31 ;)

Tuve que responderle

Ana:

¿Significa eso que vas a echarme de menos?

Mimi:

Estoy deseando librarme de ti esta semana.

Será capulla. En mi interior quería pensar que si me echaría de menos. Desde que nos conocimos Mimi ya no era esa rubia borde, antipática, descarada y maleducada que me había encontrado el primer día, y no es que hubiera cambiado, si no que me había dejado conocer a la Mimi divertida, dulce y a veces incluso cariñosa que en verdad era, todavía parecía que había un muro a su alrededor, pero poco a poco se iba derribando, y yo iba a estar ahí para derribarlo del todo.

Al medio día antes de coger el vuelo decidí pasar por casa de la señora Doblas, quería desearle una feliz Navidad y para que mentir, quería ver a Mimi antes de marcharme. Después de despedirme de Noelia y de la señora Doblas, pasé por la habitación de Mimi, sabía que no estaba allí ya que escuchaba la música en el piso de arriba, pero quería aprovechar para dejarle su regalo de Navidad bajo la almohada. Subí al piso de arriba, me apoye en el marco de la puerta y la observé mientras bailaba frente a sus espejos, con sus movimientos desprendía una magia que te atrapaba y que te hacía incapaz de no mirarla. Estaba preciosa con un pantalón corto de deporte y un top rosa que resaltaba sobre su piel, llevaba en pelo recogido, y me dejaba ver la cicatriz que tenía en la espalda, me pregunté una vez más que pudo hacerle tanto daño como para dejarle era marca. Estaba hipnotizada mirándola cuando me di cuenta de que me había visto a través del espejo y me sonreía, su sonrisa...estaba segura de que no podía ser de este mundo porque no podía existir algo tan perfecto.

Cuando acabó la coreografía se secó el sudor con una toalla y se dirigió hacia mí diciéndome:

- ¿Qué pasa Canaria? ¿No podías estar ni un minuto sin mí?

Si ella supiera...

- Ja ja ja – Me reí falsamente – Vine a despedirme de tu abuela y a desearle una Feliz Navidad antes de irme, no como a ti que eres como el Grinch, pero me pillabas de paso y no quise ser maleducada.

- Ya ya... ¿a qué hora te marchas?

- Pues ya, en realidad, o si no se me va a hacer tarde – Vi en su cara una mueca de decepción, o eso me pareció ver a mí.

- Bueno venga, te acompaño abajo más que sea.

Me acompañó hasta la puerta y en el momento de despedirme no sabía qué hacer, me hubiera gustado abrazarla, poner mi rostro en su cuello y perderme en su perfume una vez más antes de marcharme, ya la estaba echando de menos y todavía no me había ido... Vi en su cara que estaba incómoda, como si ella tampoco supiera que hacer, así que sin hacer nada, salí por la puerta diciéndole:

- Bueno señorita, cene usted bien esta noche.

- No me eches demasiado de menos Canaria – Mierda...

- Tú a mí tampoco, borde.

Y con esas palabras y una sonrisa me despedí de ella sin impregnarme de su olor.

Esa noche, después de cenar, mi abuelo contaba anécdotas de cuando mi hermano y yo éramos pequeños, todos reíamos y veía como mi madre se emocionaba de vez en cuando, estaba feliz por tenernos a todos en casa esos días. El sonido de mi móvil me distrajo y salí a la terraza a coger la llamada, sabía quién era, estaba esperándola, cuando descolgué el teléfono escuché la voz de Mimi:

- Ana... - Notaba cómo estaba emocionada, seguramente ya había encontrado mi regalo bajo su almohada.

- Dime borde – Quise que se relajara un poco.

- No tenías que...joder Ana es que no tenías... - Sabía que no le salían las palabras

- Sólo dime si te ha gustado.

- Joder Ana, me encanta.

- Pues nada más que decir 

- Pero Ana es que yo no... - Me imaginé lo que quería decirme, así que la corté antes de que dijera nada.

- Mimi, tú me regalaste aquel encendido navideño, aunque no querías ir, fuiste a verlo por mí, ese ha sido mi mejor regalo, y me fijé en lo mucho que te gustó ese colgante y decidí regalártelo, además, esa Luna es muy tú, ya lo sabes.

Pude notar su sonrisa a través del teléfono, cómo también podía notar como se retiraba las lágrimas que había derramado por la emoción.

- Me encanta la nota, hoy hay luna llena – Me dijo quitándole importancia

- Lo sé, aquí brilla bastante.

Escuché su respiración, me apoyé en la barandilla de la terraza y miré hacia la luna, sin querer acabar esa conversación

- Para ti ya son más de las 12 ¿no? – La escuché interrumpir nuestro silencio

- Si bueno, lo que todavía no tengo sueño.

- No era por eso...

- ¿Entonces?

- Nada, que Feliz Navidad y esas cosas. – Sonreí

- Feliz Navidad Mimi

- Oye Ana... - Parecía dubitativa

- Dime.

- ¿Me llamarás estos días? – No puedo explicar la velocidad a la que latió mi corazón y no pude entender cómo no lo estaba escuchando desde Madrid.

- Cuando vea a la Luna brillar Mimi

La escuché sonreír, y me imaginé su sonrisa, con esas palabras nos dimos las buenas noches y muy a mi pesar cortamos la llamada. Me quedé un rato más en la terraza, mirando la luna, y me imaginé a Mimi en su habitación, con el colgante y la nota que le había escrito en sus manos:

Dicen que en la noche, no son las estrellas las protagonistas, sino La Luna, esa Luna que tan única como es, consigue hacer que brille la oscuridad. Tú no eres la oscuridad Mimi...sino esa Luna que brilla en ella.

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A los que estáis ahí leyendo ésta locura que me ha dado, GRACIAS, de verdad espero que os guste. Gracias por los comentarios y por los ánimos!! Esta noche....a lo mejor aparece el 15...