Capítulo 18: La primera noche de acampada

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Acampar es una forma especial de alejarse del estresante ritmo de vida y disfrutar de la naturaleza. Acampar en el mundo postapocalíptico es una experiencia muy diferente a la del mundo pre-apocalíptico, sobre todo cuando las personas que quieren acampar pueden elegir su propia ubicación y vivir al aire libre sin tener que preocuparse por el tiempo que van a acampar, y mucho menos preocuparse por ser atacado, gente mirando, señalando e incluso apresurándolos.

La llegada del fin del mundo ha hecho que la mayoría de las plantas se marchiten y no hay hierba densa cerca de la tienda, por lo que no hay que preocuparse por encontrar enjambres de moscas, hormigas y otros insectos. Estos insectos, por no hablar de esta vida, Wei Xuan ni siquiera recordaba haberlos visto en la última vida. Me pregunto si es porque la infección del virus zombi los ha matado a todos por completo. ¿O se han trasladado en masa debido a cambios ambientales de los últimos días?

Wei Xuan comió una cena rápida y sencilla y observó desde su tienda cómo el cielo se oscurecía hasta quedar completamente a oscuras. Sólo hay que ignorar las horribles y espantosas figuras que deambulan por ahí, tropezando con sus pies, y disfrutar en paz de este encuentro cercano con la naturaleza.

Por suerte para Wei Xuan, estaba acostumbrado a estar rodeado de zombis desde su vida anterior, y aunque entonces pasaba al menos la mitad de su tiempo disfrazado con gente normal, seguía teniendo muchas más oportunidades de acercarse a los zombis que la gente normal.

Cuando estaba completamente oscuro, Wei Xuan entró por la pequeña abertura de la carpa con una pequeña antorcha. Esta carpa tiene un piso de tela, por lo que los sacos de dormir y otras cosas se pueden colocar directamente dentro sin tener que poner nada en el suelo. Como el tiempo era cada vez más caluroso, Wei Xuan no trajo un pesado saco de dormir ni ropa de cama, sino sólo dos mantas ligeras y como almohadas se podía usar enrollando la ropa limpia.

El espacio interior es más bien pequeño, pero aun así no hay problema para que uno o dos adultos duerman de forma compacta. Había montones de provisiones y mochilas en un lado de la carpa, y varios montones fuera de ella. Por razones de seguridad, y en caso de que la magnitud del terremoto superará las expectativas previas y dañara las cosas que había traído, Wei Xuan había dispersado deliberadamente algunas de las provisiones en varias direcciones diferentes fuera de la carpa.

Afortunadamente, debido a la llegada del fin de los tiempos y al hecho de que sólo había zombis, Wei Xuan no tuvo que preocuparse de que entraran carteristas a robar cosas por el camino. Por supuesto, si se encontrara con alguien con habilidades iguales o similares a las suyas, entonces Wei Xuan tendría que aceptar su propia mala suerte: si esa escasa posibilidad pudiera ocurrir, entonces tendría que aceptar su destino si perdiera sus cosas...

El espacio de la tienda no era grande, pero apenas suficiente para que Wei Xuan se acostara y diera vueltas en la cama. Colocó una manta en el suelo y enrolló su ropa sobre la almohada, antes de darse la vuelta y acostarse, apagando la linterna que llevaba en la mano; al fin y al cabo, el parque está al aire libre, si alguien pasa cerca y ve la luz aquí, inevitablemente causará problemas.

Justo cuando se recostó, a la luz de la luna, Wei Xuan se dio cuenta de que la puerta de la tienda estaba siendo recorrida por el zombi de afuera.

—¿Du Hang? —Hoy era el primer día que los dos salían de acampada, algo nuevo tanto para Wei Xuan como para Du Hang, así que Wei Xuan no se sorprendió demasiado al verlo entrar: —¿Qué pasa? ¿Quieres quedarte en la tienda también?

Aunque sabía que la otra parte no podía hablar ni responder, Wei Xuan seguía conservando inconscientemente la costumbre de comunicarse con él. Una de las razones es utilizar el lenguaje para estimular su instinto de conversación, otra razón es que Wei Xuan tiene miedo de que si se queda entre los zombis durante mucho tiempo, ¿qué pasa si ni siquiera puede hablar él mismo?

Renacimiento agrícola en el mundo apocalípticoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora