Tras unas cuantas preparaciones, todo estaba listo para el despertar de ambos dragones.
Las Maestras de ambos orbes se encontraban una a cierta distancia de la otra mientras el hombre de la casa atraía al Dragón original hacia ellas, tras haberle explicado lo que iba a pasar.
-Kyurem ya sabe lo que debe hacer, ustedes solo deben quedarse allí donde están y sostener los orbes en sus manos, ya lo demás depende de ellos.
-Entendido Cielo.
-Amigo es tu turno, es hora de que ellos vengan a hacerte compañía, los demás atentos en caso de incendio o una tormenta repentina de relámpagos.
Kyurem se posó entre ambas mujeres y solo lanzo un rugido antes de que su cuerpo comenzara a brillar fuertemente, seguido del como su tamaño aumentaba hasta alcanzar su forma original.
-Aquí vamos.
Los grandes tentáculos del dragón salieron de su espalda para enterrarse en su reactor activándolo lentamente generando un fuerte sonido y una candente luz de este.
Durante ese proceso, los orbes comenzaron a brillar y a manifestar su poder de forma cada vez más vivida, así hasta que en algún momento levitaron sobre las manos de sus Maestras y se alzaron en el cielo donde comenzaron a girar rápidamente.
La energía comenzó a hacerse más y más presente en estos a medida que giraban hasta que en algún momento los orbes dejaron de ser apreciables y en cambio unas grandes figuras los sustituyeron hasta que en algún punto estas abrieron sus ojos y estiraron su cuerpo lanzando unos rugidos al aire que hicieron eco por todo el lugar.
Pesadamente los dragones tocaron el suelo mientras su atención se posa en lo que estaba a su alrededor, hasta finalmente notar a sus Maestras, a quienes miraron con serenidad.
-Que hermosa eres... -Murmuro Arisa mirando el brillante Dragón blanco que estaba frente a ella mientras con su mano acariciaba la tersa mejilla de esta. –Eres realmente hermosa.
Aurora por su parte hizo lo mismo con el intimidante Dragón negro frente a ella, este al verla bien, se agacho a una altura que le permitir a ella poder verlo de frente.
-Es un gusto conocerte Zekrom, gracias por elegirme como tu Maestra, prometo que me esforzare mucho.
Instintivamente Reshiram y Zekrom sintieron la presencia de alguien más cerca de ellos y al girarse se toparon con Kyurem, quien los miraba con tranquilidad mientras el Entrenador de este estaba a su lado. Ambos dragones le rugieron al verlo, y este les respondió con calma, mostrando que no quería tener ningún tipo de enfrentamiento.
-Tranquila Reshiram, aquí estarás a salvo, no hay porque pelear con nadie.
-No pasa nada Zekrom, todo está bien.
Siguiendo las voces de sus Maestras, los dragones se relajaron y miraron como el Ser original asintió.
-Aquí no deben pelear con nadie, ni siquiera entre ustedes. Aquí pueden vivir en paz con todos los demás habitantes de la casa. Zekrom, Reshiram, bienvenidos a la familia Kurokiba.
La puerta de la casa se abrió dejando ver a una muy somnolienta Canosa quien bostezaba mientras se acercaba al campo.
-Porqué hay tanto ruido desde la mañana? qué no puede dejar que una mujer tenga su sueño de belle_ AHHH! –Grito al percatarse de los grandes dragones cerca de ella. –S-Son Reshiram y Zekrom, pero cómo!?
-Parece que no fueron ellos los únicos que despertaron.
-C-Cómo los conseguiste, tanto poder reunido en un solo lugar... solo con ellos alguien podría dominar el mundo sin mucho esfuerzo.
-Por suerte somos nosotros quienes los tienen, precisamente para evitar eso. Kyurem porque no vas y les muestras el lugar a ellos, así los puedes presentar con los demás. –Dijo el Muchacho a su Pokémon mirando como este asintió y les rujío a los otros, quienes después de verse la cara, comenzaron a caminar hacia el para seguirlo. –Eso los mantendrá entretenidos un rato. Mamá, Aurora sienten algo diferente después de que ellos despertaron.
-No mucho Cielo, pero sentí algo cuando me vio a los ojos, sentí como si me hablara.
-Yo también sentí lo mismo.
-Interesante, eso me dice que en verdad hay un vínculo entre el Dragón y su Maestro, como siempre se ha creído. Ellos responden a las voluntades y sentimientos de quienes consideran sus Maestros, en este caso ustedes.
-Y qué debemos hacer?
-Por ahora, solo dejen que se acostumbren a estar aquí, ya luego los estudiaremos más a fondo, y veremos cómo responden a ustedes.
-Perfecto. Cielo creo que ya Nora jugo suficiente. Deberías hacer que descanse un poco, no queremos que se agote demás.
-Lo sé, ya es suficiente para ella, el que corra a cuatro patas me indica que sus piernas ya se cansaron. Nora!
En cuanto escucho su nombre, la pequeña se detuvo y poso su atención en quien la llamaba mostrando alegría al ver de quien se trataba. Sin perder tiempo se encamino hacia él lanzándose a sus brazos y por la fuerza derribarlo a ambos en el pasto.
Lo que paso a continuación fue que la fuerza de la pequeña en sus manos acompañada de sus filosas garras termino cortante larga y profundamente en el brazo izquierdo de Allen lo que hizo brotar la sangre en cantidad manchando la ropa, el brazo y la mano y garras de Nora acompañado del gruñido ahogado de Allen por el repentino dolor.
-¡Oh por Dios Cielo, voy a buscar el botiquín!
La pequeña al ver lo que había hecho, el cómo Allen sangraba en cantidad y su notoria cara de dolor miro su mano encontrándose con ese líquido rojo que se deslizaba por ella. Algo en su subconsciente fue consciente de lo que ocurrió y de lo que ella había hecho y al ver a esa persona que tanto quería y le había demostrado un verdadero cariño y tranquilidad un llanto de miedo y preocupación se hizo presente en ella acompañado de un temblor por las mismas razones.
-No pasa nada. –hablo una voz que la hizo abrir los ojos y ver como Allen le sonría y con su otra mano acariciaba sus cabellos. –Estoy bien, no pasa nada.
Así como a ella le dolía y asustaba verlo lastimado a Allen le generaba un malestar ver a esa pequeña llorar. Nora se lanzo a su pecho a llorar mientras gruñía y se frotaba contra sus ropas, allen solo se limitaba a tratar de calmarla lo que a la final término consiguiendo con algo de tiempo.
-Ya paso Nora, estoy bien. –Calmo mientras limpiaba las lagrimas de la pequeña y ella veia como Arisa atendia la herida de su hijo.
-Fue muy profunda cielo, un poco más y necesitarías sutura.
-Por suerte no fue así.
-Tranquila Nora, tu Papá es muy fuerte y rudo. Estara bien pronto.
-Baba? –balbuceo la pequeña luego de escuchar a la Mujer causando sorpresa en Madre e hijo.
-Nora di Papá. Pa-Pá.
-...Pa... Papa.
-Eso! que mona.
-Papa!
-Tehehehe que mona eres Nora.
-Ahora me va a estar diciendo así todo el rato.
-Y no tiene nada de malo Cielo. Ahora limpiémosle la mano para que la leves adentro.
Tras atenderle a la pequeña con un desvió rápido en la cocina, prontamente ella se encontraba reposando en el sofá de la sala con su cabeza apoyada en la pierna de Allen mientras este miraba las noticias encontrándose con lo que él ya sabía de ante mano, o lo que habían generado.
En la cocina, Arisa, Nirvana y Aurora se encontraban preparando el almuerzo de todos.
-No me puedo acercar a él?
-No muñeca, o al menos no por ahora, en la mañana me lleve un su susto cuando la vi ponerse agresiva por el hecho de que me acerque a mi Cielito sin cuidado, ella nos desconoce aún, debemos dejar que se acostumbre a nuestras presencias, así como hizo con los Pokémon allá afuera.
-Entiendo. –Respondió ella desviando la mirada hasta notar uno de los pequeños retratos que Arisa tenía por el mesón de su cocina, donde salían ella, su difunto esposo y Allen con 2 años de edad. –Mamá... del lugar de donde ustedes vienen, de qué parte eran?
-Hmm?
-Bueno es que me da algo de curiosidad.
-Cómo decirlo, mi esposo era de nacionalidad japonesa, y yo era norteamericana, o una gringa como dirían por allí. Cuando nos conocimos fue en Chicago... allí vivía yo, pero luego de casarnos y que nuestro Angelito naciera, por motivos de su trabajo, nos mudamos a Japón por tres años antes de regresar y mudarnos a San Francisco. Tengo que mostrártelo en un mapa para que lo entiendas, pero el punto es que vivimos en varios lugares, hasta asentarnos en San Francisco, mi retoño es tanto japonés como americano aunque los rasgos de su Padre están más presentes que los míos, creo que solo saco mis ojos, y puede que un poco de mi carácter, solo un poquito.
-Él cómo era?
-Haa... mi esposo era un gran hombre, honesto, trabajador y muy amable, aún tengo vivido el día que conocí a ese hombre, nunca creí que desde ese día mi vida cambiaria tanto, el me mostro lo que era la verdadera felicidad, y jure amarlo a él y solo a él, y así será hasta que me reúna con el nuevamente.
-Eso es un hermoso sentimiento Mamá.
-Arthur fue mi primer y único gran amor, perderlo casi me derrumbo, pero no podía, si yo caía, que sería de mi pequeño, debía cuidar de él por ambos.
-Es verdad que mi Darling sonreía más cuando era un niño?
-Allen presencio la muerte de su Padre en persona. Desde ese momento mi pequeño Ángel no fue el mismo nunca más, y si bien desde que estamos aquí ha recuperado parte de su felicidad y niñez, el daño que le causo perder a su Padre, es algo que nada podrá reparar.
-Se lo que se siente... -Comento la menor mirando a su Madre. –Siento que cuando Allen me encontró, recupere un poco de lo que había perdido, por lo que puedo decir que se perfectamente lo que se siente.
-Pero bueno, ya está bien de esos recuerdos tristes y llenos de melancolía. El futuro es lo que tenemos enfrente, y este está lleno de cosas muy buenas, o eso dijo mi horóscopo... hablando de eso, creo que debería hablar con las chicas, llevo días que no se de ellas, las llamare después del almuerzo. Muñeca ya desde aquí Nirvana y yo podemos solas, porque no vas con Allen, y así dejas que Nora se acostumbre a ti, como su pupila debes estar cerca de él mucho tiempo, y entre más rápido se acostumbre ella a eso será mejor.
-Es cierto Mamá.
La menor salió de la cocina y se encamino hasta los muebles de la sala, donde enseguida noto a su Mentor con la mirada perdida en el infinito mientras su mano derecha acariciaba los cortos cabellos de una durmiente Nora. Allen al sentir a la chica giro su vista hasta ella para sonreírle.
-Ya terminaste en la cocina?
-Así es, Mamá dijo que viniera para que ella se acostumbrar a verme cerca de ti.
-Era buena idea, pero ella ya se durmió, mientras la acomodo para que duerma más cómodamente, podrías ir por mi escudo en mi habitación, está debajo de la cama en una gran caja, junto al sable que me quede de recuerdo.
-Ya lo traigo.
-Gracias.
Mirándola subir, Allen se movió con cuidado de no despertar a su pequeña huésped antes de colocar uno de los cojines en su cabeza para que esta reposara.
-Dormirá un buen rato, dado a todo el ejercicio que hizo, y seguramente despertara con hambre, debo estar pendiente para cuando eso pase y tener cuidado con este brazo hasta que se cure un poco más.
-Aquí está tu escudo, pero para qué lo necesitas? los trajes nos protegen de casi todo.
-Tiene una pieza de tecnología que quiero trabajar mejor. Estuve pensando en unas cosas, y creo que nos podrá ser sumamente útiles para todos.
-Qué es?
-Vayamos al laboratorio, allá te explicare con calma, no quiero dejar mucho tiempo a Albedo sola con mis cosas. –Hablo el Muchacho con calma, dándole un último vistazo a su pequeña inquilina.
Con el aviso a su Madre de que ella dormía bajaron a las instalaciones bajo tierra, donde la Canosa se encontraba sentada mientras jugaba con una de las tabletas del Muchacho.
-Qué estás haciendo?
-Paso el rato, como dijiste que no debía tener cuidado con tus cosas, preferí no tocar nada hasta que estuvieras presente.
-Bien, Siila facilítale a la señorita los análisis que conseguimos de Nora.
-Enseguida Sr. –Respondió la computadora generando los hologramas.
-Quiero que los revises muy bien Albedo.
-De acuerdo, a ver que tenemos aquí.
-Mientras nosotros trabajaremos en esto.
Allen junto a su Padawan se sentaron en una de las mesas más desocupada y mientras el desarmaba los componente del escudo, ella miraba atentamente.
-Sabes qué es esto? –Pregunto el tomando lo que buscaba con una pinza.
-No.
-Esta cosita que vez aquí es lo que permite trasportar las PokéBalls de un punto a otro. Por supuesto yo tome esa tecnología y la mejore para que pudiera usarse en algo más grande, como es el caso del escudo, pero con la llegada de los trajes, creo que podemos usar esa misma cualidad con ellos.
-Ósea qué podemos trasportarnos usando los trajes sin Pokémon?
-Así es, el problema es que el trasporte es muy rígido.
-Rígido?
-Te daré un ejemplo. Esta mesa es el punto A, y la mesa donde esta Albedo es el punto B. El tele-transporte solo funciona de esa manera, de A á B o de B á A. se necesitan coordenada ya establecidas para poder moverse de un punto a otro, con los Pokémon es similar, pero ellos tienen más libertad. Por ejemplo, si yo le muestro una imagen lo suficientemente clara y nítida de un lugar a Kanna o Hela ellas podrían llevarnos, en este caso no es así, obligatoriamente debemos tener un curso ya preestablecido para poder movernos.
-Cómo los centros Pokémon y la granja.
-Exacto. Usando esta misma tecnología creo que puedo crear algo que nos sea útil para diversas cosas.
-Y qué debemos hacer?
-Primero que todo es aumentar la fuerza de esto, de lo contrario todo esfuerzo será inútil, debemos asimilar esta tecnología con la de los trajes.
-Pero cómo haremos que no solo sean los trajes lo que se trasporten, si no, también nosotros.
-Veo que ya estas empezando a pensar como científica, por eso es que estudie a fondo la tecnología de las PokéBalls. El que pasa con los Pokémon cuando son atrapados, es una de las cosas que más curiosidad me daba, por eso estuve estudiando eso a fondo hasta dar con la repuesta. La luz que los atrapa descompone su cuerpo al nivel atómico y lo condensa y comprime dentro de la esfera, el Pokémon es consiente y descansa, y cuando son liberados, solo se reverte lo que paso, regresando su materia al tamaño original que tenía dejándolo como si nada hubiese ocurrido.
-Eso no lo sabía...
-Pocos se detienen a pensar sobre ello, es lo que te hace un investigador, el querer saber cómo funcionan las cosas. Ahora bien, para los trajes y nosotros, se debe repetir el mismo proceso con la diferencia, que nuestro cuerpo se volverán partículas que se moverán a la velocidad de la luz de un punto a otro, donde volverán a fusionarse a la misma velocidad, lo que debemos investigar, es el cómo hacerlo sin que eso nos mate, por suerte Siila se infiltro en varios registros de corporaciones Æther con este proyecto en mente, y me dieron todo lo que necesitaba para que funcionara, ahora solo debemos recrearlo. Me sorprende lo adelantados que están en Alola a pesar de ser unas cuantas islas, incluso tienen un tipo diferente de PokéBalls para atrapar a esos llamados Ultra-entes.
-De verdad?
-Sí, creo que pronto deberé contactar a la Sra. Lusamine para darle las noticias sobre lo que conseguí, aunque no creo que le gusten los resultados.
-Son malos?
-La atmosfera del mundo de los ultra entes es toxica para los humanos pero no por algún veneno, hay algo en el ambiente que poco a poco va distorsionando la química de su cerebro. La composición de los entes les permite sobrevivir a ella, y parecen tolerar muy bien esta, pero nosotros no, un ser humano iría perdiendo la cordura hasta morir en ese lugar y creo que es lo que le paso a su Esposo, es solo un cascaron vacío de lo que una vez fue.
-Esas son malas noticias.
-Lo sé, ahora debo saber cómo decírselo, no creo que lo tome muy bien.
-También lo creo.
-Sera tema para otro día, empecemos con esto.
Con todo el equipo necesario a la mano, el proceso de fabricación comenzó, y durante un buen rato ambos jóvenes estuvieron trabajando y registrando sus avances en la computadora.
-Siila cuanto subió?
-Cinco puntos Sr.
-Bien, guárdalo. Creo que ya estamos cerca de lo que necesitamos.
-Entendido.
-Avanzamos bastante, creo que ya es momento de almorzar, qué opinas Hatterene, quieres comer algo?
Preguntándole a la Pokémon que estaba detrás de él, Aurora se giró para verla a que no se había percatado que estaba allí.
-Pero ella cuándo!?
-Lleva allí como diez minutos. Creo que dio curiosidad lo que estábamos haciendo, debes estar más atenta a tus alrededores Aurora, no parecen cosas tuyas estar tan distraída.
-Lo sé, pero qué es ella?
-La conocí anoche en Galar, y hoy vino a quejarse del bullicio que hice en su bosque. Desde hace rato anda por aquí curioseando, creo que ya no se va a ir de aquí.
-Yo tampoco lo creo, pero vaya, sí que es bastante elegante.
-Sí, su apariencia va perfectamente con el apodo que se le ha dado desde la antigüedad, la Bruja del Bosque.
-Ya lo creo.
-Cielo, Muñeca aquí les traje su almuerzo! –Anuncio Arisa mientras sostenía una gran charola en sus manos. –Es hora de comer.
-Gracias Mamá.
-Supuse que estaban ocupados por eso se las... -Pauso notando a la Pokémon cerca de sus hijos. –Cielo y está Pokémon?
-Lleva rato merodeando por la casa, se llama Hatterene, la conocí anoche en Galar.
-Vaya... solo mírenla. –Comento colocando la charola en la mesa. –Qué cuerpo tan curvilíneo.
-Es su pelo.
-Eh? –Quejo Aurora.
-Pelo? –Pregunto Arisa.
-Así es. –Aclaro el poniéndose de pie para acercarse a la Pokémon. –Todo lo que pueden ver es el Pelo de Hatterene, parece ser muy grande y voluptuosa, pero en realidad es su cabello el que toma esa forma, Hatterene si me das permiso. –Hablo a la Pokémon con calma haciendo que esta sintiera, dejando que el muchacho abriera un poco su supuesto escote, dejando apreciar que su verdadero cuerpo estaba dentro de todo ese cabello. –Ese es el verdadero cuerpo de Hatterene.
-Wow...
-Vaya...
-Las apariencias engañan. Ella tiene esa apariencia para poder asustar o intimidar a sus rivales, mientras su verdadero cuerpo está seguro en el interior de su pelo, y por lo que puedo ver es una Hatterene adulta.
-Adulta? Cielo cómo lo sabes.
-Una Hatterene recién evolucionada no pesa más de cinco kilos en total, y su verdadero cuerpo no pasaría de los sesenta centímetros contando su sombrero el cual es parte de ella. Pero esta pasa del metro y medio, su cuerpo sigue creciendo dentro de su pelo, y debería pesar más de veinte kilos.
-Que impresionante, lo que esperaba de mi lindo investigador.
-Si se es Entrenador y no se sabe sobre tus propios Pokémon, cual es el significado de cuidarlos y entrenarlos. Aurora descansemos un poco mientras almorzamos. Hatterene si no es has ido a estas altura es porque has decidido quedarte aquí verdad?
La Pokémon respondió a eso con un asentimiento al muchacho mientras sonreía y le asentía con gracia.
-Bien, creo que no hace daño tener mi primer Pokémon de Galar.
-Además una que tiene forma Gigamax.
-Gigamax?
-Sí, qué nunca has visto una pelea de Galar?
-No.
-Hmm en esa Región son famosas las formas Gigamax, imagínate a tu Hatterene pero de unos 30 metros de alto.
-Es eso posible?
-Me sorprende mucho que no lo sepas, en serio.
-Ya lo investigare después.
-Tu comida esta allá arriba Albedo.
-Voy subiendo, me muero de hambre.
Allen tomo una de las PokéBalls regada sobre su mesa y la extendió hasta su nueva integrante, la cual al verla, solo la toco con una de sus garras siendo atrapada por esta vibrando la esfera varias veces antes de brillar.
-Bienvenida a la familia Serene.
-Cielo a comer, se te va a enfriar.
-Ya voy.
Para la tarde de ese día, luego de un gran almuerzo para todos, y de reposar la comida. Arisa y Aurora es encontraban en el patio trasero, interactuando con sus nuevos Pokémon reforzando el vínculo entre ellos, Nirvana terminaba de tener la ropa lavada mientras tarareaba una canción y Allen y Albedo trabajaban en el laboratorio.
-Aun no puedo creer que estemos creando un ojo artificial completamente funcional.
-Te sorprendería las cosas que se podrían crear si tuviera los componentes y elementos adecuados. Siila cuanto tiempo.
-El proceso de fabricación tomara seis horas aproximadamente Sr.
-No se puede apresurar la perfección, dejemos que la maquina haga su trabajo, es algo muy delicado después de todo.
-Cómo lo sabias?
-Qué cosa?
-Lo del metal, cómo sabias que podría usarse de esa manera?
-Digamos que tenía conocimiento previo.
-Pero cómo? este metal no tiene origen en este mundo, fue descubierto hace unos años, ni quienes lo descubrieron saben tanto de su composición como tú.
-Ya te lo dije, conocimiento previo, y creo que es lo único que me interesa que sepas.
-Huugg... a veces puedes ser bastante frívolo.
-Lo sé. Ahora yo que tú me alejo un poco de mi persona y muy despacio.
-Por qué?
-Mira hacia la puerta.
Al hacerlo, ella se topó con que cierta criaturita la miraba con algo de enojo mientras su cola se movía de un lado otro.
-Siila abre la puerta.
Dicho eso, la puerta se abrió dándola paso libre a la pequeña quien solo avanzo hasta Allen sin dejar de ver a la canosa de manera amenazante.
-Papa!
-Tranquila Nora. –Calmo él posando su mano sobre la cabeza de la pequeña acariciándola con cariño. –No pasa nada, todo está bien.
Con las palabras del Muchacho se calmó regresando su atención a él.
-Dormiste un buen rato, debes tener hambre verdad?
Ante la pregunta la pequeña solo lo vio y giro un poco la cabeza mientras su cola se movía un poco.
-Lo tomare como un sí. Esperemos un poco a que estés bien despierta he iremos a prepararte algo a la cocina.
-Ella es fascinante... hay tanto por saber de ella que el solo pensarlo es demasiado.
-Nadie aquí le hará nada mientras yo esté presente. Si quieres saber de ella, usa los datos que yo investigue.
-Acaso eres su Papá?
-Lo soy y de igual manera ella no necesita que la cuide mucho. Sola podría matarte si quisiera, por más alterada que este tu genoma, no creo que puedas resistir una puñalada directa al corazón o que te rompan el cuello.
-Cuando lo dices con tanta calma me llenas de miedo, porque sé que podrías hacerlo si quisieras, después de todo gracias a ti, tengo esta cosa en mi cuello, ya no puedo usar bikinis gracias a eso y toda ropa interior que me pongo me queda rara gracias a esa marca.
-Es cierto, se te verían horrible.
-Todo lo que use debe ser de cuello de tortuga o debo colocarme siempre alguna bufanda o pañuelo.
-Tú te lo buscaste, y agradece que fue solo eso y que no te busque después para terminar el trabajo.
-Ya lo sé, Ya lo sé.
-Sr. Tiene una llamada, es la señorita Brega.
-Brega? dame un momento. Nora, quiero que te quedes quieta unos minutos ok? Ya pronto iremos a comer algo, solo espera a que atienda esta llamada.
En respuesta a eso la pequeña solo se sentó en el suelo junto a sus piernas para verlo mientras sujetaba una de sus manos.
-Parece que si entendió, Siila pasa la llamada.
-De inmediato.
Instantáneamente una imagen holografía apareció, mostrando a la Entrenadora marcial quien sonrió al ver al muchacho.
-Hola Allen, espero no molestarte.
-No estaba haciendo mucho justo ahora, sucede algo?
-Quería llamar para ver como estabas. La temporada de Entrenadores está a nada de empezar, y me gustaría saber si puedes venir un día a ver que tanto he mejorado tanto yo como mis Pokémon. Quiero que esta vez los Entrenadores no la tengan nada fácil.
-Entiendo.
-Estaré aquí lo que queda de la semana, así que puedes venir cualquier día.
-Perfecto, estaré pasándome por allá en cuanto tengo tiempo libre.
-Gracias, ahora viene lo otro.
-Lo otro?
-Bueno... recueras la última vez que fuimos a tu casa.
-Sí, no fue hace mucho, en realidad, hace casi nada.
-Es cierto, entonces recordaras lo que paso esa tarde.
-Qué paso con ella?
-Se fue.
-... A dónde?
-No le dijo a nadie, Cynthia desapareció del mapa, no contesta las llamadas, y no tenemos manera de saber dónde está, solo sabemos que agarro a todos sus Pokémon y se fue.
-Estará bien.
-Cómo estás tan seguro de eso?
-Cynthia no es el tipo de persona que se quitaría la vida. Solo hizo caso a lo que le dije y se tomó un tiempo lejos y desconectada de todo, créeme estará bien, en algún tiempo sabrán de ella. Brega voy a contarte algo a ti, pero no quiero que le digas a nadie.
-De qué se trata?
-En algún momento próximo renunciare al cargo de Co-Campeón de Sinnoh, ya no lo necesito, conseguir todo lo que quería de eso y ya no me es útil para nada.
-Pero...
-Eso no va a cambiar nada Brega, y lo sabes muy bien. Mi atención ahora mismo está en otras cosas, y ahora tengo más responsabilidades, no tengo tiempo para estar lidiando con cosas de la Liga, en cuanto me desocupe de algunas cosas hare todo oficial.
-Entiendo. Respeto tu decisión Allen.
-Gracias Brega, no te preocupes más por lo de Cynthia, todo con ella estará bien, y creo que es mejor que si se llega a comunicar con alguno de ustedes, no le digan nada de mi ok?
-Claro. Lo entiendo.
-Perfecto.
-La líder de Galar, Bea, dijo que vendría pronto, la verdad me gustaría conocerla, dicen que es sumamente poderosa.
-Eso también me gustaría comprobarlo.
-En cuanto me lo confirme te lo diré.
-Bien.
-Creo que eso era todo, me alegra saber que estas bien y muy centrado en tus cosas.
-Igual, nos vemos pronto.
Actualizado el 25/04/22.