𝘋𝘦𝘢𝘳 𝘗𝘢𝘵𝘪𝘦𝘯𝘤𝘦 // 𝘕𝘪𝘢𝘭𝘭 𝘏𝘰𝘳𝘢𝘯

𝘛𝘳𝘦𝘪𝘯𝘵𝘢 𝘴𝘪𝘦𝘵𝘦 / 𝘗𝘢𝘴𝘢𝘥𝘰

17 julio 2014

El silencio de la noche ha caído sobre nosotros, no encuentro palabras adecuadas para decir algo, mi cabeza me está gritando que salga corriendo para volver dentro de la discoteca, pero ni mis piernas y mi corazón hacen caso.

Quiero darle la espalda de la misma manera que el hizo conmigo, pero no puedo, no cuando se está sincerando y está esperando a que diga algo, pero la verdad es que no sé qué decir, me encontró aturdida por todas las emociones que siento, estoy abrumada y no sé cómo gestionar todo esto.

-Di algo por favor. -Me pide con urgencia mientras su mirada azul se clava en mí, puedo ver lo nervioso que está. - Sé que he sido un capullo, debería de haber buscado la manera adecuada de hacer esto. -Niega con la cabeza mientras deja caer sus hombros. -Pero me asuste, no quería que te pasara nada por culpa mía, pensé que estarías mejor sin que una persona tan famosa estuviera contigo. -Eleva los hombros mientras deja soltar un largo suspiro.

-Pues si has sido un capullo. -Le suelto sin pensar un poco antes en que decirle, entendía porque lo había hecho, no quería verme envuelta en toda la fama que el llevaba sobre sus espaldas, pero tenía que aceptarlo, era algo que no podía cambiar y menos si quería estar con él, por lo que me digo a mi misma que tengo que dejar mi orgullo a un lado. -Pero no me sirve de nada estar enfadada contigo. -Susurro clavando mi mirada en sus preciosos ojos.

-Las cosas no van a ser fácil Ada. -Agacho la cabeza al escucharle, pero el rápidamente me la vuelve a subir cuando coloca su mano sobre mi barbilla y la levanta. - Soy una persona famosa, todo el mundo nos sigue y no tenemos la vida privada que tienes tú, me quiero mantener al margen y te quiero mantener a ti, quiero gustarte por mí, no por mi dinero o mi fama. - Sus ojos brillan y en silencio me está suplicando que no le traicione, mi corazón se encoge ante esa mirada.

Sé que nos conocemos de muy poco, pero sería incapaz de traicionarle, nunca le vendería de esa manera, se lo haría ver, haría que confiara en mí y no dudara de mi palabra, de la misma forma que el haría que yo confiara en él.

-Lo solucionaremos Niall, nos tenemos que conocer y lo más seguro es que muchas veces nos cueste llevar la relación fuera del ojo público. -Elevo los hombros llevando mi mano hacía la suya. - No te voy a vender, no me interesa tu fama o dinero, me gustas tú. -Mis mejillas se tiñen de rojo al decir aquello.

-Me gusta cuando te pones así, te ves adorable con tus mejillas rojas. -Me asegura sonriendo de lado mientras se inclina hacia delante y roza sus labios con los míos, todo mi cuerpo reacciona al momento cuando sintiendo sus labios carnosos acariciarme de esa manera, doy un pequeño paso hacía el y pego mi boca contra la suya.

Por una vez en mi vida tomo la iniciativa y la verdad es que no se sentía nada mal, jadeo cuando sus manos cae sobre mi cadera y me la aprieta para pegarme más a él, aprovecha para colar su lengua y acariciar la mía con lentitud.

Escucho a mi corazón como bombea contra el pecho, solo espero que Niall no lo escuche porque entonces estaré perdida, sabrá lo que me hace sentir y no quería que en algún momento lo usara contra mí, tenía miedo de dejarle entrar por completo, pero mi cabeza me estaba pidiendo que le dejara de dar tantas vueltas al tema, que él sería el indicado.

Nos separamos segundos después para coger algo de aire, el posa sus labios contra mi frente con algo de timidez, cierro los ojos por ese gesto tan íntimo y cariño por su parte. -No sé cómo lo hacemos, pero siempre acabamos así en las fiestas. -Susurra todavía pegado a mi frente.

Sonrió levemente al escucharle y elevo los hombros. -Supongo que es la única manera de estar los dos solos. -Comento mientras rodeo su cintura con mis brazos, me esconde bajo el abrigo de su abrazo y me siento cómoda y segura a su lado, no quiero que nada, ni nadie estropee esto. -Dudo mucho que alguien nos eche de menos. -Comento con gracia.