Mío

1.6K 202 20
                                    


(Sebastián)

Sebastián había notado que Rodrigo y Alexander estaban un poco distantes y desde que Alexander había regresado a la azotea después de encontrase con Michelle estaba extraño. Sebastián miró a Anthony quien hablaba por teléfono en ruso, chasqueó la lengua, detestaba no entender que decía el pelirrojo. Sin pensar mucho se levantó y se acercó a Alexander.

―Hey... ―Se hizo notar el más alto.

―Hola, Sebas ―dijo Alexander con una sonrisa triste.

­―¿Sucede algo? ―pregunto Sebastián.

―Nada de otro mundo, solo pienso cómo acercarme a Rodrigo.

Sebastián pestañeo varias veces confuso.

―¿Qué?

―Sí, ya sabes. Acercarme.

―Sí, se a lo que te refieres pero, ¿Por qué? ¿No se supone que son novios? ―preguntó Sebastián sin comprender por qué esas palabras no le dolían al salir de su boca.

Alexander estudió el rostro de Sebastián, sonrió y asintió.

―Pensé que te molestaría ese hecho ―dijo sincero Alexander.

―Yo también pensé eso ―dijo Sebastián sin notar que Alexander miraba a su primo y este le miraba en forma de advertencia.

―Quien sabe... ―dijo Alexander con una sonrisa. 

―Si quieres acercarte al idiota, solo empujalo contra una pared y besalo ―dijo con una sonrisa pícara Sebastián.

Alexander se sonrojó furiosamente y antes de poder decir algo Anthony llegó junto a ellos, tomó a Sebastián del cuello de su camisa, tiró de él y lo besó furiosamente.

Prekratit' dvizheniye khvost pered drugim , ty moya* ―gritó Anthony a Sebastián después de besarlo.

Sebastián miró hacia abajo y detalló que Anthony estaba realmente furioso. Apretaba los dientes y la mirada del ruso brillaba en rabia.

―¿Qué... qué dijiste? ―preguntó Sebastián aun sorprendido.

Alexander rio bajito.

―Solo debes entender que acaba de ponerse celoso ―dijo Alexander con una leve sonrisa.

―Sí, serás idiota, estúpido mafioso ―dijo desviando la vista Sebastián pero sin ocultar la sonrisa que se asomaba en sus labios.

―Creo que entiendo tu consejo ―dijo Alexander mirando a Sebastián, quien se sonrojo aun más.

―No sabes lo que me molesta que hables con moya printssesa ―dijo Anthony.

―Y no sabes lo mucho que me molesta que me trates como si fuese de tu propiedad, hablo con quien se me pegue la gana.

―No lo entiendes, Ty moy , poka ya ne primut inogo resheniya* ―siseó el ruso.

―Y luego dices que yo soy el idiota. Como quieres que entienda si me lo dices en ruso.

―Dije que, eres mío hasta que yo decida lo contrario ―dijo esta vez de una forma que entendiese Sebastián.

Sebastián apretó los puños, se inclinó y besó a Anthony.

―Cuando decidas que ya no soy tuyo, yo decidiré en ese momento que tú me perteneces ―dijo Sebastián con el ceño fruncido.

―¿Es eso una declaración? ―preguntó sarcástico el pelirrojo.

―Tomalo como quieras, estúpido mafioso.

―Pues es una declaración entonces ―dijo con una sonrisa Anthony antes de ponerse de puntitas y volver a besar a Sebastián.

Alexander miraba la escena de lejos y sonrió, al parecer estampar un beso de la nada si conseguía que dos personas se acercaran.

...

* Prekratit' dvizheniye khvost pered drugim , ty moya: deja de mover la cola en frente de otro, eres mio.

* Ty moy , poka ya ne primut inogo resheniya: eres mío hasta que yo decida lo contrario. 

N/A: No iba a actualizar más hoy pero no pude resistirlo este capítulo ha estado en mi cabeza desde hace días, sinceramente me encantan todas las parejas, cada una es única a su manera. Ahora si me despido. 

  MidoriUP

Diario de un SuicidaTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon