Acosadora- III

1.8K 220 14
                                    


(Emily)

Emily caminaba por el salón observando a los estudiantes dibujar. Sonrió, su hermano siempre se había quejado de que sus alumnos tenían poco interés en su clase. "Hermanito, si buscas algo que no les llame la atención jamás prestaran atención. No es difícil de entenderlos, después de todo, solo les llevo dos años a estos niño" pensó Emily. La rubia llegó junto a Alexander y admiró el trabajo del chico. El dibujo de Alexander representaba la tristeza.

―Tienes mucho talento ―dijo Emily al de ojos color marrón―. No sé si preocuparme ―Emily al ver la clara alarma en la expresión de Alexander sonrió con cariño y agregó―. Guardare mis preocupaciones solo para mí.

Alexander miró a Emily y sonrió tenuemente.

―Gracias. Lo que nos has pedido realmente me sorprendió un poco ―dijo Alexander antes de regresar su mirada al dibujo.

Emily sonrió y siguió con su recorrido terminando detrás de Alexander junto a Rodrigo. Emily notó que el talento del Rodrigo no era el dibujo, no lo hacía mal pero no era perfecto. Emily sonrió al notar la mirada extrañada que le dedicaba Rodrigo desde que la vio entrar al aula.

―Hola extraño ―saludó Emily.

Rodrigo sonrió un poco por el significado de aquellas palabras. Emily observó detalladamente el dibujo de Rodrigo, era de un caballero y su "damisela", pero la escena era algo peculiar.

―Podrías explicarme un poco el dibujo, Rodrigo ―pidió amablemente Emily.

Rodrigo se sonrojó levemente, miró intensamente la nuca de Alexander y luego regresó la atención a Emily.

―Bueno, extraña, has pedido que dibujásemos algo que de cierta forma representara nuestra situación actual, fuese la que fuese. Bueno, yo soy el caballero y... ya sabes quién es el chico al que trato de rescatar. Y sí, es un dibujo de un príncipe gay y su caballero. ―dijo Rodrigo.

Emily miró a Rodrigo y sonrió. Rodrigo mostraba desesperadamente sus buenas intenciones con Alexander. La rubia se sentía conmovida y le enternecía la leve vergüenza que mostraba Rodrigo. Sonrió, aun mas, podía decirle a James y a Thomas que no tenían por qué preocuparse por su hermano. "No necesito investigar más, este chico es bueno para Alexander. Se notan sus buenas intenciones y sus ganas de ayudarlo".

―Sí, ya sé quién, Voldemort. No sabía que se había operado la nariz y que fuera gay. Pero te diré algo, no me desagrada, es hasta lindo. ―dijo con un movimiento de cejas sugerente Emily mirando a Alexander.

Rodrigo se sonrojó pero no pudo evitar reír por la forma de "disimular" de Emily.

Cuando la clase termino Emily despidió a los chico. La rubia buscó su teléfono entre sus cosas y marco el número de Thomas.

¿Qué quieres? ―preguntó cortante el moreno del otro lado de la línea.

Emily ignoró el dolor que sintió por el trato frio del chico del que estaba enamorada y procedió a hablar.

―Tsk, solo te llamaba porque James no contestaba... ―"Mentiras, solo mentiras dices Emily Roth" pensó la chica pero trato de que sus pensamientos no la afectasen―. He determinado que ya no es necesario investigar a Rodrigo. Es un buen chico, su interés por Alex es muy puro. Es realmente lindo la forma en que Rodrigo se interesa por Alexander... ―Emily rio de forma amarga―. Envidio a Alexander, tiene a alguien que se preocupa por él. Bueno, eso es todo. ¿Cuándo nos veremos? ―preguntó finalmente Emily un poco más entusiasmada.

Que fastidio. Bueno, me alegra escuchar eso. Con respecto a la salida no estoy seguro ―dijo sin ganas Thomas.

Emily apretó los labios y una expresión triste se posó en su rostro. La rubia ignoró el temblor de sus labios cuando los relajo y sin ser consciente de la tristeza reflejada en su mirada dijo.

―sabes qué, Thomas, no te preocupes por lo de la salida. Creo que ya va siendo hora de entender que solo soy un estorbo para ti. No te preocupes dejare de molestarte. Gracias por las migajas que me has dado. ―Emily colgó el teléfono sin esperar respuesta.

Emily sonrió triste sintiendo un vacío en su pecho. "Al menos tengo el consuelo de que Alexander está destinado a alguien que lo ama" pensó con amargura.


Diario de un SuicidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora