Diario de un Suicida

Desanimado

Rodrigo llevaba una semana de novio con Alexander. No iba a mentir, estaba en una especie de nube rosa rodeado de pajaritos y todas esas cosas que Disney pinta cuando se está enamorado. Pero había un problema, Alexander parecía no muy feliz. Rodrigo quería atribuir eso a que su novio era poco expresivo pero su orgullo pedía a gritos que Alexander demostrase que estaba feliz tanto como él.

Rodrigo decidió enviarle una nota a Alexander. Arrancó una hoja sin que hiciese ruido la doblo y escribió:

"¿Qué pasa por tu cabeza?".

Rodrigo tamborileaba una y otra vez sus dedos contra la mesa, Alexander se estaba tardando mucho en responderle. Un toque en su espalda lo sacó de su ensoñación. Rodrigo sonrió cuando sintió la nota.

"Pienso que mis hermanos son ramas de un árbol".

Rodrigo frunció el ceño. No esperaba eso. Se sentía desilusionado, en realidad. "Ni que fuera a escribirte un poema. Idiota" se recrimino Rodrigo. Leyó nuevamente la nota y no entendió el significado "sus hermanos ramas" pensó confuso. Más debajo de la respuesta de Alexander, Rodrigo escribió.

"¿Qué pasa por tu cabeza cuando hablas conmigo?"

Esta vez Alexander se tardó mucho más en responder. Disimuladamente, Rodrigo giró el rostro y vio a Alexander mordiéndose el labio inferior mientras su rostro estaba completamente rojo. Sin saber por qué Rodrigo sintió sus mejillas arder y un pequeño tirón en cierta parte de su anatomía "Se ve tan malditamente tierno así. Quiero comérmelo... Rodrigo compostura, compostura" pensó el de ojos verdes conteniéndose. Rodrigo sonrió cuando sintió nuevamente a Alexander llamar su atención para que recibiera la respuesta.

"Últimamente una frase se repite en mi mente cuando hablo contigo o cuando pienso en ti: Te va a destruir de la manera más bella. Y cuando se vaya finalmente entenderás, por qué las tormentas tienen nombres de personas".

Rodrigo sintió como su respiración se pausaba, el tené dolor en su pecho lo hizo salir de su ensoñación.

"¿Por qué dices eso?"

Envió esta vez Rodrigo.

"No es algo que quiera pensar solo aparece en mi mente y ya".

Rodrigo sonrió tristemente. Alexander sin ser consiente hería al de ojos verdes. "Siempre pensare en ti como una estrella, distante, fría y rodeada de oscuridad" pensó Rodrigo mientras veía que responder a Alexander.

Repentinamente Rodrigo se sintió desanimado.

"Te quiero mucho, estrellita".

Fue lo que escribió Rodrigo antes de salir del salón cuando el profesor dio por terminada la clase. Alexander miró la puerta por donde había salido Rodrigo al terminar de leer las cuatro palabras que habían conseguido que su corazón se acelerase.

N/A: Sé que he estado muy ausente pero he estado lidiando con las inscripciones del nuevo semestre en la universidad. X.x es tan problemático.

Gracias por comentar, Leer, votar y seguirme.

Especialmente gracias por su paciencia.

Se despide MidoriUP