Siberia

Capítulo 46

Decido dormir ya que pensar solo me pondrá nerviosa.
Siempre me ha gustado dormir en el auto, el movimiento me calma( soy toda una bebé).
Al rato me quedo dormida.
* - ¡ Siberia! ¿ qué te pasa?
-¿ qué?
Estoy de nuevo en ese castillo pero Diciembre está de pie y yo estoy sentada.
Se ve furiosa.
- ¿vas a dejar que tu amiga muera por culpa tuya?
- claro que no pero tengo que entrenarme.
- llegarás aquí y ella ya estará muerta.
Ya lo tenía pensado, pero no tenía opción.Lo único que me quedaba era esperanza.
-¿ y qué quieres que haga?
- te puedo ayudar.
-¿ sí? ¿ cómo?
- con uno de mis maravillosos conjuros.
-¡ yo los creo!- grita otra voz.
- cierra el pico Octubre.
Eso fue una pelea de hermanas. Qué gracioso. Algo normal.
A continuación Diciembre me explica la solución al problema del tiempo que no tengo.*
- Siberia, Siberia.- es mi hermano.
- ¿ mmm?
- hablabas dormida. Decías cosas sin sentido.
- Dios, esa chica tiene problemas.- Amargada vuelve a quejarse.
- cállate Amargada.
-¿ qué me has dicho?
- he pronunciado tu nombre.
- ¿ sabes qué? No vale la pena pelearse contigo. Mejor me duermo y cómo soy normal no hablaré dormida.
Esa mujer es ridícula. Me harta.
- Siberia, ¿ qué soñaste?- por fin habla Laelia.
- Diciembre me habló de un conjuro para hacer que lleguemos más rápido a la Montaña Escarlata.
-¿ qué vas a hacer?- dice Octavio.
- a la una de la madrugada vamos a crear un portal y vamos a salir en frente a la montaña.
- ¿ vamos? - dice papá.
- sí.
Bueno parece que había dormido bastante tiempo y ya eran las 4:30.
Ellos ya habían almorzado cosas que teníamos en la mochila.
Yo no tenía hambre. Es poco probable  salvar a Amanda. He pasado de un " muy poco probable " a un " poco probable "......... Bueno, está mejor.
Cojo mi celular y con los audífonos comienzo a escuchar música. No me gusta usar audífonos y no creo que sea bueno ya que le tengo que prestar atención a las cosas pero Amargada no quiere prender la radio. Los usaré en cuanto está dormida.
No sé por qué pero al mirarle la cara a Amargada me dieron ganas de dibujarle un bigote con marcador permanente. Fuerza del hábito. Soy toda una niña.
El clima estaba feo y se avecinaba una tormenta de nieve.
Rayos.
Eso nos complicaría el viaje y mucho.
Estoy escuchando " How deep is your love" y probablemente la tarareo.
Mi hermano me jala del polo como un niño pequeño y me pregunta:
-¿ puedo escuchar contigo?
- 1 dólar por canción.
- no jodas.
- 1 dólar por canción .
Mi hermano, la persona más testaruda que conozco ( después de mí, claro), no quiere descargar canciones en su celular y siempre me pide para escuchar conmigo. Yo, con mi " gran" paciencia, me cansé ya a los 13 años y decidí cobrarle.
Lo peor es que el más tonto me pagaba.
Jaja.
Se acercó a su mochila y sacó 1 dólar de su billetera.
Tonto.
Me pagó.
En esos momentos es cuando uno se siente Genial ( sí, con G mayúscula).
Escuchamos música hasta la cena improvisada.