Capítulo 37

31 9 0
                                    

- Claro.
El se sienta en mi cama y yo cojo un peine y me comienzo a peinar los cabellos mojados y largos. Me los cortaré algún día.
- Siberia, es un avance muy importante para la medicina que hayas despertado de un coma vegetal, así que dime como lo hiciste.
- esto no es ciencia Octavio, es religión.
-¿ qué?- ahora está más confundido.
Me amarré el pelo de cualquier manera y me senté con él.
- es una larga historia hermano y sé que ya debería de haberte dicho lo que estaba pasando, pero tenía miedo así que entiéndeme y no te molestes.
- habla.
Le conté todo, desde cuando papá me regaló el anillo hasta cómo desperté del coma y estuvimos horas hablando. Bueno, solo yo hablé y él escuchó perplejo.
- somos nietos de la musa Diciembre, el dios te ataca por ser su descendiente y ya tuviste contacto con 3 musas de las cuáles viste morir a una de ellas que se hacía llamar " Amelia", aunque evidentemente ese no es su nombre verdadero.
- eso, pero no confío en Diciembre, para nada.
- es mala pero no sabemos lo que está pasando ahora. La guerra fue hace mucho tiempo y puede que haya cambiado..... Eres su nieta.
Nieta... ¡ nieta!, eso significa que no mató a su hijo y ese hijo, cómo varón es Tíbet Winter.
- papá es hijo del dios y Diciembre.
Me miró con la boca abierta y con eso significa que acompaña mis pensamientos.
-¡ por el dios! Eso también puede significar que él mismo hizo el anillo.
- no.... Dijo que era de la familia, de la abuela si no me equivoco, y la abuela es Diciembre.
- hay que buscar en el Libro del Guerrero. Y después hablar con papá.
- ¿ hablar con papá?
- sí, él nos puede contar toda la historia.
- es que.... nos ha mentido todo este tiempo y la verdad es que ya no confío en él.
Me duele decirlo pero es verdad.
- solo confió en ti y en Ami.- digo .
- hay que consultar el Libro.
- sí.
Bajamos sin hacer tanto ruido y tomamos un ejemplar del altar.
Al subir nos metemos en mi habitación y cerramos con llave.
Mi hermano se pone a buscar todo tipo de objetos mágicos y hasta en algunas citas y leyendas, pero no había nada.
- a lo mejor no buscas bien ¡ dame!.
Tomo el libro de sus manos y me pongo a hojearlo.
- con hojearlo así nada más no encontrarás nada.
Sigo buscando y mi dedo, justo el que tiene el anillo, se apoya en la hoja.
De repente paso por una frase y siento una descarga.
Quito mi mano al instante.
-¿ qué? ¿ te has cortado con el papel?
- no tonto, encontré algo.

SiberiaМесто, где живут истории. Откройте их для себя