Capitulo LXVIII: Librografía (Un Cuento de Navidad)

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Ustedes conocen la historia: tres fantasmas visitan a un hijo de puta avaro, y le enseñan cuán equivocado está en sus ideas y comportamiento. Al final, tiene una epifanía, y cambia, y pasa de ser miserable y cruel a ser generoso con todos.

En lineas muy generales, acabó de describir la trama básica de Un Cuento de Navidad de Charles Dicentes, y realmente pude hacerlo porque me sorprendería en enormidad si alguna o alguno de ustedes no conociera esa historia; estamos hablando aquí después de todo de uno de los textos más famosos de la literatura universal, con cientos, sino es que miles versiones en distintos medios como la televisión, el cine y el teatro. Hemos visto a las aventuras de Scrooge interpretada por actores de carácter hasta por los Muppets.

Como toda obra clásica, estamos ante una que seguimos recurriendo a ella en el grado en que todos conocemos porque en muchas medidas, han pasado los años y muchos de sus temas y mensajes aún encuentran lugar para ser discutidos en el mundo contemporáneo: la importancia de la caridad y el preocuparnos por otros, más aún en una fecha en la que deberían de ser los valores a resaltar más que el comercialismo desenfrenado.

Pero supongo que es una de esas cosas que son tan grandes, obvias y omnipresentes que podemos pasarlas por alto; obviarlas, y procesarlas en nuestra mente sin detenernos a realmente meditar en lo que hemos leído o visto. Por supuesto, eso no es crimen alguno, y todos lo hemos hecho una vez, o muchas. Es fácil dar por sentado, por ejemplo, la salud: un simple acto como el caminar que para otras personas menos afortunadas significaría un deseo hecho realidad. A nuestras familias, las cuáles pueden ser un fastidio ocasional pero dejarían un corazón herido y sangrante si partieran en materias de geografía o mortalidad.

Y es que no culpo a nadie si es que ve a la obra de Dicentes como una excesivamente moralista y casi redundante: no ser un idiota tacaño, no explotar a los demás, parecen lecciones que todo niño debió haber aprendido vía Plaza Sésamo.

Pero quiero pedirles que me acompañen a un recorrido más adentro del contexto histórico de ésta obra.

¿Dónde se desarrolla? Inglaterra en algún punto de mediados del siglo XIX, y tratemos de entender la verdadera situación de esa nación en aquel momento: se trataba de un súper poder imperial con colonias en todos los continentes al grado que se acuñó la frase "En el Imperio el Sol nunca se oculta".

Otras transformaciones incluían además, el desarrollo del capitalismo moderno, la revolución industrial así como la migración de millones de personas alrededor del globo de sus hogares ancestrales a nuevas naciones, casi siempre en áreas urbanas dónde se encontraban las oportunidades de empleo.

Scrooge es un empresario, y ha logrado amasar una fortuna considerable, pero eso no lo protege de todo de afrontar la realidad: la verdad es que, él forma parte de la élite acomodada mientras que la gran mayoría es una con pocos recursos y pocas oportunidades. Claro, se estaba desarrollando lentamente lo que llegaríamos a conocer como la clase media pero a pesar de eso, seguía siendo una vida dura.

No había tal cosa como jornada laboral máxima; trabajabas lo que te pedían, te gustaba o no. No había leyes contra el trabajo infantil. No existía seguridad social, salario mínimo, días de descanso, o cualquier otra protección de de nuevo, hoy por hoy damos por hecho al grado de olvidarnos de ellas y realmente pensar en lo que se tuvo que luchar para obtenerlas.

Tampoco ayudaban algunas ideas del momento. Por ejemplo, Scrooge en algún punto habla de lo favorable que sería que muriera más gente pobre porque con eso "ayudaría a bajar la población". Tan descorazonador como nos pueda parecer hoy en día, no se trataba de todo de una exageración: puede que haya sido inspirado por las ideas del clérigo y economista contemporáneo Thomas Malthus.

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