treinta y ocho.

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"Así que al fin el muerto de hambre se largo." No pudo evitar rodar los ojos, despreciaba como su familia había tratado todo este tiempo a Eunwoo, el pobre hombre no les había hecho nada pero ahí estaban ellos hablando mil y un desgracias sobre él.

Eunwoo solo había sido una pobre alma que tuvo la desdicha de toparse en el camino de los Park y el haber amado con todo su corazón al menor de los aristócratas. Su amor fue su condena.

"Sí, Eunwoo se fue." Dijo Jimin.

"Pues deberíamos celebrar, ahora podrás jugar a la mamá y al papá con tu esposo muy a gusto." Rió paseándose por su habitación con una copa de vino en la mano. "Debí suponer que si se había ido cuando vi como tú y Jungkook se habían vuelto inseparables, sabía que la presencia de ese soldaducho impedía a que cumplas tu papel de esposo."

"No era así, yo no podía estar cerca de Jungkook porque estaba enamorado de Eunwoo."

"Estabas." Señaló. "Que alegría me hace sentir esas palabras, al fin te desencantaste de ese."

"¿Por qué lo odias tanto?" Frunció el ceño ofendido.

"Porque arruinó nuestros planes, si se hubiera muerto en el calabozo donde estaba tu no estarías encerrado acá, mis padres tendrían la comodidad del dinero de Jungkook y las cosas serían más sencillas."

"Por el dinero de Jungkook odias a Eunwoo." Señaló asqueado, sabía que su madre también opinaba de la misma forma.

Después de todo, su matrimonio solo había sido un arreglo económico en el que se velo el bienestar de la familia Park. Aunque los sentimientos de Jungkook hayan sido reales desde el primer momento todo había pasado por el peso de las monedas.

Si Jungkook hubiera sido pobre correría la misma suerte que Eunwoo, le entristeció el darse cuenta de que sin importar a quién ame; lo que importaría siempre sería el dinero.

"Algo así." Se encogió de hombros. "Tu marido me propuso trabajar con él hasta que encuentre un nuevo administrador, tu le sugeriste eso ¿por qué?"

"Porque quiero tener paz." Dijo en voz alta. "Tuve suficiente con todos estos meses viviendo del temor de ser descubierto, tuve suficiente con todo lo que ustedes me hicieron pasar y ahora quiero paz, por eso te ofrecí como empleada de Jungkook."

"Pues tendrán que buscar a alguien más." Se encogió de hombros, realmente no le importaba ayudar a su hermano, era una egoísta que solo velaba por sí misma. "Escuché que esa beta, Minhee, también sabe de administración así que ella que se encargue."

"No." Rápidamente dijo, siendo dominado por sus celos e inseguridades.

Por la culpa que se ceñía a su espalda, pensando que Jungkook podría encontrar consuelo entre los brazos de esa mujer; como él lo había hecho en los brazos de Eunwoo. Se reflejó en aquel momento, pensando que su esposo podría hacer lo mismo, lleno de inseguridad, culpa y celos no pudo siquiera imaginar a Minhee trabajando tan cerca de su esposo.

Aunque Eunwoo se haya ido, Jimin nunca viviría en paz por todos los fantasmas que le perseguían.

"¿Por qué? ¿Estas celoso?" Molesto codeando a su hermano. "Tranquilo, Jungkook te adora y jamás se fijaría en una beta, no cuando parece vivir por y para ti."

"No es eso." Trato de escudarse, pero su sonrojo lo delató. "Sino que me lo debes, me pusiste en un infierno cuando trataste de que acepte a Jungkook como mi esposo, ahora acepta trabajar con él."

"¿Me echas en cara lo que hice para que ahora fueras feliz? Sin mi no estarías casado con Jungkook, no estarías tan feliz como ahora. Así que quien le debe algo a alguien eres tú a mí. Además tu esposo no quiere pagarme, yo no trabajaré así."

Llorando se fue ; km omegaverseWhere stories live. Discover now