HOTD OS

Alicent Hightower

-Hmm. -dijo mirando el camisón de la pelirroja, completamente en el suelo, no había notado la desnudez de su ahora esposa. -tal vez quieras cubrirte, vendré después.

-Yo, está bien. -dijo, había crecido con Rhaegor, siendo el hermano mayor de Rhaenyra siempre lo había visto, deseando que él fuese el padre de sus herederos y ella su esposa.

Y ahora lo eran, sin embargo, Rhaegor no estaba a su lado, probablemente había marchado a los aposentos del rey a informarle la consumación.

[***]

-Rhaenyra, el rey desea que todos estemos juntos para la caza en honor a Aegon.

-¿El rey o mi hermano lo solicita?

-Tu hermano pero...

-Entonces no hagamos esperar a mi amado hermano mayor. -Rhaenyra gruñó.

-Rhaenyra... -intentó decir, sin embargo su amiga no la escuchó, caminando lejos, ella con su enorme e hinchado vientre caminó detrás de ella.

[***]

-Algún día tendrás hijos, y me harás un abuelo orgulloso. -Viserys sonrió.

-No deseo niños.

-Rhaegor tampoco y ahora tendrá dos. -dijo Viserys, sin embargo Aegon jugaba en el regazo de su padre, con su dragón de madera mientras Viserys le daba de tomar.

Alicent se quejó cuando el carruaje pasó bruscamente sobre una roca.

-¿Es recomendable qué viajes en tu condición?

-El Maestre dice que un poco de aire fresco me hará bien. -dijo la pelirroja, su esposo la miró, no estaba de acuerdo con el viaje, y menos con la condición de su esposa, pero tampoco podía sacrificar la celebración de su primer hijo.

El viaje siguió notablemente tenso, Rhaegor y Rhaenyra se miraban conforme el tiempo pasaba, Viserys no sabía hacia dónde mirar y Alicent acariciaba su estómago, las nodrizas que los acompañaban se miraban la una a la otra, sin saber que decir o hacer.

-El rey Viserys Targaryen de la Casa Targaryen. -avisó uno de los hombres.

La puerta del carruaje fue abierta, Viserys salió primero, ayudando a Rhaenyra a salir, seguido de Rhaegor quien ayudó a salir a Alicent.

-¡Señores! ¡Mi nieto el príncipe Aegon el Joven! -Viserys sonrió mostrando al menor, alzándolo mientras los demás vociferaban.

Rhaegor sostuvo la mano de su hermana y la de su esposa mientras Viserys mostraba con orgullo a su primer nieto.

-Hermano, iré a conocer un poco.

-No te alejes mucho Nyra, por favor.

-Descuida. -Rhaenyra sonrió. -vendré antes de que celebren a Aegon.

-Hmm. -murmuró.

Rhaenyra era una copia de su madre, la difunta reina Aemma, mientras que Rhaegor era una copia de su tío Daemon, su cabello lacio le llegaba más abajo de los hombros, su barbilla y cara estaban perfectamente perfiladas, con unos penetrantes ojos azules, siempre vistiendo cuero negro y con sus manos cuidadosamente detrás de su espalda.

-¿Vamos con los demás mi amor?

-Hmm. -murmuró, tomando la mano de Alicent, caminando hacía las carpas.

-Oh, princesa Alicent, príncipe Rhaegor. -saludó una mujer. -¿Y la princesa Rhaenyra?

-Conoce el lugar.

-¿Y el príncipe Daemon?

-Descansando. ¿Por qué la pregunta mi lady?

-Oh, sólo quiero saber, ya sabe mi príncipe.

-La vida de mi hermana y de mi tío es privada, espero sepa entender eso.

-Y lo hago, mi príncipe. -murmuró la mujer.

Marido y mujer se sentaron en los sillones rojizos, Alicent tenía un vestido rojo que cubría su hinchado vientre y su cabello cuidadosamente recogido y cuidado.
Mientras que Rhaegor vestía un traje negro, con un dragón en su pecho, su espada y su daga, junto a sus zapatos negros, con dos extremos del cabello ligeramente atados por una cinta negra.

Rhaegor tenía su mano en el vientre de su esposa, sintiendo las patadas del infante golpear cada vez más.

-Es un bebé muy fuerte, mi amor.

-Lo sé, es mi hijo. -murmuró el peliblanco. -¿Alguien ha visto a la princesa Rhaenyra?

-No mi príncipe.

-¿Alguien puede decirme en dónde siete infiernos se encuentra la princesa Rhaenyra?

[***]

Ambos esposos estaban en el almuerzo en honor a Aegon, Alicent cargaba a Aegon mientras Rhaegor escuchaba a su padre, hasta que fueron interrumpidos por Rhaenyra, y un jabalí que aparentemente ella misma había cazado, su cabello lacio y perfectamente peinado estaba rizado, su cara y cuello estaban llenos de sangre seca, mientras caminaba hacía las carpas.

-Disculpa. -murmuró levantándose.

-Príncipe Rhaegor, no puede moverse, es el cumpleaños de su hijo.

-Rhaenyra es mi hermana. -gruñó.

-Príncipe Rhaegor, siéntese.

-Usted es el padre de Alicent, no mío. -dijo quitando al hombre de su camino.

-Rhaenyra siempre será su prioridad, no tú ni todos los bebés que vayan a tener.

Y ahí Alicent lo supo, cuando vio a Rhaegor abrazar a Rhaenyra de una manera tan protectora, supo que jamás podría lograr lo que Rhaenyra hacía en él.

Tal vez un niño a imagen suya sí.