HOTD OS

Lucerys Velaryon

Lucerys sonrió al ver el carruaje llegar hasta el castillo, primero su abuelo el rey Viserys se había bajado, después su esposa la reina Alicent, seguido de Aegon y Helaena, junto a sus hijos.

—Disimula un poco, Luke, yo también estoy feliz de ver a mi hija, pero lo disimulo. —dijo Daemon provocando una risa en su madre.

—Déjalo Daemon, mi dulce niño está feliz de ver a su antiguo amor. ¿No es cierto, Luke?

—Bastante diría. —está vez, rió Jacaerys.

Su sonrisa se ensanchó al ver como más persona bajaban del carruaje, su tío, el príncipe Aemond había bajado con un niño peliblanco en brazos, para después dejarlo en el suelo y tender su mano en dirección al carruaje nuevamente.

—¿Y Alyssa? —cuestionó Jacaerys. —¿No vino con ellos?

—Espero que no sea lo que estoy pensando. —dijo Daemon poniendo su mano en su espada.

Su prima Alyssa había bajado del carruaje sin aceptar la mano de su tío, con ella un vientre hinchado de unas nueve lunas.

—¡Daemon, hermano! —Viserys sonrió abriendo sus brazos en dirección a su hermano.

—Viserys. ¿Qué es esto?

—¿Qué? —volteó asustado. —oh, Alyssa y Aemond me hicieron otra vez tío y abuelo. —sonrió pero al ver la expresión de su hermano cambió. —¿Qué sucede?

—¿Por qué mi hija es madre de los hijos del tuerto, Viserys? ¿Quién le dio permiso a ese imbécil para poner sus manos sobre mi hija?

—Yo... creí que lo sabías.

—¿Y de saberlo crees qué lo permitiría? ¿En dónde estaba el té de luna?

—Alicent me dijo que envió un cuervo, que diste tu permiso.

—¿Cómo voy a darle mi permiso a ese tuerto para ponerle un dedo encima a mi hija? Le lleva cinco años.

—¿Y cuántos le llevas tú a mi hija?

—Es diferente padre, yo siempre accedí, Alyssa se ve obligada.

—¿Por qué no me avisaron personalmente? ¿Sí Alyssa hubiese muerto en el parto cómo Laena? ¿Cómo mamá? ¿Cómo Aemma?

—Creí que lo sabías hermano.

—Evidentemente no. —dijo dando por terminada la conversación.

Viserys sonrió y le dio un abrazo a su hermano para después abrazar a su hija, quienes apesar de sentir la sangre de dragón en sus venas haciendo efecto lo aceptaron, Viserys se alejó y nuevamente fue hacía Alicent.

—Creo que uno de nosotros tendrá que acercarse. —murmuró Rhaena. —no parece que Aemond la dejé alejarse.

Rhaenyra dio un paso al frente junto a Daemon, fueron directamente hacía Alyssa, quien al verlos sonrió.

—Padre. —dijo soltándose del agarre del peliblanco menor.

—Mi niña. —Daemon abrazó a la menor de sus hijas. —¿Qué sucedió?

—Yo...

—Príncipe Daemon. ¿Desea conocer a su nieto? —Alicent cargaba al pequeño peliblanco, quien la miraba con enojo e intentaba safarse.

Daemon aceptó al pequeño, esté lo miraba con curiosidad.

—Es un lindo pequeño. ¿Cuál es su nombre?

—Baelon. —dijo Alyssa bajando la mirada. —sé que es el nombre de...

—Descuida, es un hermoso nombre para un hermoso niño. —dijo Rhaenyra jugando con las mejillas del bebé. —¿Hace cuánto nació?