El Chico de la Venda en los ojos I & II (Satoru Gojo x OC)

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꧁ᴛᴏᴅᴀ ᴀᴠᴇɴᴛᴜʀᴀ ᴄᴏᴍɪᴇɴᴢᴀ ᴄᴏɴ ᴜɴ ꜱí꧂

❅[A]❅

—Ese parece buena persona

Yuji quien está a mi lado sentado en la banca de un parque, le dice rápidamente a mi padre antes de que mate a un hechicero.

—Guaf

—Paco piensa igual— suelta papi Baam que esta sentado a mi otro lado con un su nuevo perro Paco sobre sus piernas.

—Argg... con ustedes dos no se puede — protesta papi Khun noqueando al hechicero y lanzándolo a un lado.

—Esto no era lo que tenía en mente con lo de matanza de compromiso — bufa molesto la mejilla de Itadori.

—Oh, así que ¿Tú eres lo que posee al prometido de mi hija? — suelta curioso papi Bamm observando la boca en la mejilla de Itadori.

—Ella será mi puta, no de él.

Silencio...

Papi Khun mira preocupado a papi Bamm quien observa la mejilla de Itadori en completo silencio, no tiene una expresión concreta, pero el ambiente se torno denso.

Puedo ver como Itadori tiembla un poco y por mi espalda recorre un escalofrío, la chica recostada en mi regazo se remueve como si tuviese una pesadilla.

—¿Qué pasó mocoso, te enojaste? — suelta Sukuna a mi padre como si eso no fuese un gran error y el ambiente se tensa aún más.

Papi Bamm puede tener la amabilidad de un niño inocente, pero es un mercenario altamente entrenado que puede ser cruel y descarado si se meten con sus seres queridos. Sukuna Ryōmen puede ser el rey de las maldiciones, pero papi Bamm es el rey de la torre y un dios que no todo el tiempo es benevolente.

—La próxima vez que te escuche decirle puta a mi hija, buscaré la forma de sacarte de este niño y despedazarte para esparcirte dentro de la torre de Dios y nunca puedas regenerarte.

—No te tengo...

Mi padre empezó a brillar, su poder relucía tanto que hasta a mí me mataban los ojos y entonces Sukuna desapareció.

—Ah, ya se fue esa molesta mosca — suelta tranquilo acariciando a Paco.

Itadori y yo lo miramos desconcertados.

—¿Qué lo hiciste?

—Ya no lo escucho en mi cabeza.

—Solo lo puse a dormir, era algo molesto, ¿Verdad Paco? ¿Verdad?

—Creo que ya sé porque usted puede ponerlo nerviosa — suelta Itadori en voz baja.

—Créeme él me pone nerviosa hasta a mí cuando se enoja — suelto mirando como mi padre de parecer un feroz destrozador de mundos volvía a ser ese pancito de dios recogedor de perros.

—Bueno mataré a este — dice Khun algo aliviado tal vez preocupado antes porque mi padre se enojará tanto que matara a Itadori o destrozara todo el lugar, pero todo salió mejor de lo esperado — parece malo.

—No ese no es chamán.

—Pero tiene pinta de delincuente.

—Dijimos que no mataríamos a no chamanes.

—A este paso jamás llegaremos a nada — digo mientras acaricio la cabellera chocolate oscura de la chica recostada en mi regazo y sonrió porque localizarla fue más rápido de lo que pensé y mucho más porque papi Bamm fue por ella— lo siento Tsukimi, esperemos pronto sacarte de aquí.