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—Drossi, ¿Por qué diablos estamos frente a una iglesia?

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—Drossi, ¿Por qué diablos estamos frente a una iglesia?

El rostro de Satoru es un poema de incredulidad, caminó ciegamente siguiéndome hasta aquí y quedó completamente sorprendido cuando llegamos a la iglesia, pero lo cierto es que yo quería venir aquí porque en las fotos me pareció uno de los lugares con mejores vistas.

Estábamos frente al Duomo di Montalcino, Concattedrale di San Salvatore, la catedral de Montalcino, con esa arquitectura neoclásica que la hace hermosa.

—Ven, es bonita vamos —le dije tomando su brazo y jalándolo hacia la entrada, mientras él me miraba reacio —tiene una fuente de los deseos dentro y una vista hermosa al pueblo atrás.

—Androssi, ¿Estás segura de que puedes entrar allí?

—¿Por qué lo preguntas?

—Digo, porque — señaló con su dedo índice al lado derecho de su cabeza —eres un demonio y tienes un cuerno.

—¡Satoru!

—No lo digo por joder, es que siento que si te acercas la magia divina te expulsará o algo. — soltó completamente serio. — tu tátara abuelo es como anticristo en esta religión y...

—¡Cállate!

—Solo intento protegerte.

—Ya veremos si diosito me expulsa, además no es la primera vez que entro a una — le dije mientras seguía jalándolo hacia la catedral.

—¿A no? — soltó aún más incrédulo.

—No, mi abuelita Mari Carmen me obligaba a ir y a veces uso agua bendita y no me ha pasado nada.

—¿Para qué usas agua bendita? — frunció fuertemente el entrecejo.

Para bajarme la calentura, mis deseos impuros y las cosas diabólicas que surgían en mi cabeza producto de mi lado demoniaco.

—Pooooorquee a veces es bueno hacerse la cruz — contesté inmediatamente.

—¿Segura que no te derretirás o algo? — me miro frunciendo aún más el ceño.

—¡Basta Gojō! —lo mire sería esperando su rosto de burla, pero me estaba mirando serio. — no me derretiré ni nada.

—Bien, entremos — dijo tomándome del brazo y entramos.

—¿Ves?

—Ufff — suspiro aliviado y yo iba a protestar cuando el padre de la iglesia apareció frente a nosotros con una sonrisa —¡No la exorcice ella es buena!

—Eres un idiota —le pegué a Satoru en el hombro, luego me acordé del padre e hice una reverencia — disculpé mi vocabulario padre.

—Auch— Satoru se sobó el hombro.

El Chico de la Venda en los ojos I & II (Satoru Gojo x OC)Where stories live. Discover now