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Capítulo 101 - La misma voz

La misma voz
He Jin siguió a Qin Yang arriba, mientras que los dos niños los siguieron como cachorros, pero mantuvieron una distancia de unos dos o tres metros. Cuando He Jin se dio la vuelta, uno de ellos se volvió y otro estaba arrodillado para jugar con los dedos ... He Jin no pudo evitar estallar en carcajadas. Cuando Qin Yang lo vio, les ordenó: “¡Jueguen con ustedes! ¡No nos sigas! "

El hermano menor le hizo una mueca a Qin Yang, "¡quién te está siguiendo!"

Su hermana hizo un puchero y dijo con voz suave: "No te estoy siguiendo, estoy revisando mis dedos ..."

He Jin, "..."

Qin Yang llevó a He Jin a la habitación. Estaba impecable y ordenado. Había una cama, un escritorio, un televisor, un baño separado, como en un hotel de 5 estrellas.

He Jin dejó su maleta y preguntó: "¿Dónde está tu papá?"

"Supongo que está ocupado en su habitación". Qin Yang bajó las cortinas, encendió la calefacción y sacó una nueva ropa de cama, una funda de edredón y una toalla de baño del armario.

He Jin preguntó: "¿Tenemos que decírselo a tu papá?"

Qin Yang, “podemos esperar hasta mañana. Quédese aquí a gusto; nunca me pregunta por si traje a mis amigos ".

He Jin asintió y se sentó en su cama. Qin Yang también se sentó en la silla frente a él, "por cierto, ¿no dijiste que tu madre rompió tu casco de juego?"

He Jin recordó esa escena y una vez más se sintió miserable.

"Sácalo y déjame ver". Qin Yang hizo un gesto.

"¿Mmm?" He Jin pensó que, dado que Qin Yang no estaba en el juego, se sentía un poco confundido acerca de por qué querría revisar el casco. De todos modos, lo tomó, se lo entregó a Qin Yang y preguntó: "¿Qué pasa con eso?"

Qin Yang le dio la vuelta y dijo: “Conozco a un profesional que sabe cómo reparar brazaletes y es un experto en computadoras. Se lo llevaré mañana ”.

He Jin se sorprendió, "¿en serio?"

"Si." Qin Yang no conocía a nadie así, ya que este tipo de cascos de juego están fabricados con una tecnología líder en China, y nadie ha logrado hacer uno similar, y mucho menos una reparación. Hizo lo mismo que He Jin, comprobó en línea y sabía que todas las tiendas abrirían al día siguiente e iba a traer el casco para conseguir uno nuevo con descuento. Sin embargo, no quería que He Jin supiera su plan ya que podría rechazarlo nuevamente, y tenía que buscar una excusa.

Qin Yang se sintió bastante triste, pero no tenía otras formas. No pudo evitar enamorarse de un chico heterosexual, y tuvo que pensar en formas inteligentes de tratarlo bien. De lo contrario, He Jin solo lo percibiría como un lunático.

Mientras hablaban, alguien llamó suavemente a la puerta. Era la voz de una mujer gentil, "Yang Yang, ¿estás dentro?"

Qin Yang abrió la puerta y la mujer le entregó la bandeja. Ella también saludó a He Jin y le sonrió, “ve y come algo. Llámame si necesitas algo."

Había dos cabezas pequeñas detrás de la mujer, y parecían curiosas.

Qin Yang cerró la puerta, tomó la bandeja de madera y la colocó sobre la cama blanca. Había dos batidos de color verde claro encima, una pila de delicados bizcochos y pasteles y un plato de naranjas frescas.

He Jin dijo: "tu hermano y tu hermana también son adorables ..."

Qin Yang, "dos acosadores".

He Jin, "pero no se parecen a ti".

Esperando Por Ti En Línea (BL)Where stories live. Discover now