Amber se dio un baño primero, ya que el baño era pequeño y no cabían los dos, después se cambió y fue a la cocina, la señora que estaba preparando la comida, le dio una taza de té y le dijo.
_ Si no quieres quedar embarazada bebe eso.
_ ¿Qué es?
_ Es un té para que las mujeres no queden embarazadas a menos que ellas quieran.
Amber acababa de casarse, ella aún quería disfrutar de su matrimonio así que se bebió el té en y dijo.
_ Muchas gracias.
_ No hay de que, aquí todas las mujeres beben este té durante al menos un año, es bueno disfrutar de tu pareja durante algún tiempo; hay más té en la tetera, por si lo necesitas.
Cailed salió de la habitación, la rodeó por la cintura y preguntó.
_ De qué hablaban.
_ De cosas de mujeres, dijo Amber.
Aquélla señora les sirvió la comida y después se fue, dejándolos solos, Amber se levantó, se sentó a horcajadas en el regazo de Cailed y le dijo.
_ Volvemos a la habitación y continuamos con lo de ayer.
_ Estás segura que quieres que lo hagamos, ¿No te duele?
_ Tengo un físico parecido al de mi padre, sano rápido, estoy perfectamente bien.
Cailed la besó, se levantó de la silla con Amber sujeta a su cintura con sus piernas y se fueron nuevamente a la habitación, ese día hicieron el amor repetidas veces hasta que quedaron tan casados que terminaron quedándose dormidos.
Después de un mes Amber y Cailed volvieron a la ciudad, primero fueron a la mansión Forest ya que Amber quería explicarle a sus padres porque había decidido escaparse el día de la boda.
Cuando ellos entraron a la casa se toparon con Leonard, quién al parecer iba de salida, Amber le iba a dar un abrazo a su padre, pero él la ignoró y fue directamente a Cailed, lo tomó del cuello levantándolo del suelo y dijo.
_ Te voy a matar maldito sinvergüenza por haberte robado a mi hija.
_ Papá, gritó Amber, suéltalo.
Leonard apretó un poco más el cuello de Cailed, él se estaba poniendo rojo por la falta de aire.
_ Dame una razón para no matarlo.
_ Porque es mi esposo.
Leonard se sorprendió mucho, soltó a Cailed y le dijo.
_ ¿Qué has dicho?
_ Cailed y yo nos casamos.
_ ¿Pero, cuando?
_ Cuando nos escapamos, así que no le mates o me dejarás viuda.
Olivia estaba en el comedor, al escuchar todo el alboroto salió a que ver estaba pasando, cuando vio a Amber ella corrió a su lado y la abrazó, tomó su rostro entre sus manos y le dijo.
_ ¿Estás bien?, ¿Dónde has estado?, ¿Por qué te fuiste sin decirnos nada?
_ Estoy bien mamá.
Oliva fulminó con la mirada a Cailed, él solo deseó irse rápidamente de ahí ya que sentía que moriría en cualquier momento.
_ ¿Dónde estabas?
_ Cailed y yo estábamos en una pequeña aldea, es preciosa, deberías ir algún día, estoy segura que te encantará.
_ ¿Qué hacías ahí?
Amber sonrió ampliamente y dijo.
_ Cailed y yo nos casamos ahí.
_ ¡¿QUÉ?!, ¿Cómo que te casaste?, Pero si escapaste el día de tu boda.
_ Si, lo siento por eso, cuando llegó el día de mi boda me sentí abrumada, no me sentía feliz, no quería esa boda.
_ ¿Por qué no me dijiste nada?
_ Lo siento mamá, ese día solo quise escapar, pero igual me casé, mi boda fue hermosa, alegre y divertida.
Leonard seguía queriendo matar a Cailed, Amber tomó las manos de sus padres y los arrastró con ellos al recibidor, ella les contó cómo había sido la boda, Cailed intentó mantenerse alejado para no morir.
Cuando Amber terminó de contarles cómo había sido su boda, Olivia dijo.
_ Me hubiera gustado estar contigo ese día.
_ Lo siento mamá, pero aunque mi boda fue un tanto rara, me encantó y me dieran a elegir entre la boda que tuve y de la que me escapé, volvería a elegir la que tuve.
Olivia la abrazó y le dijo.
_ Mi niña, si tú eres feliz, lo demás no importa.
_ Gracias, mamá.
_ ¿Te quedarás aquí, hoy?
_ No, aún debemos ir a hablar con los padres de Arun.
_ Deja que vaya él solo, dijo Leonard.
_ Papá, ahora ellos también son mi familia, debemos ir a disculparnos por todos los problemas que causamos al escaparnos.
Olivia suspiró y dijo.
_ Está bien, pero vuelve a visitarnos, te extrañamos.
_ Vendremos otro día, lo prometo.
Olivia la abrazó y dijo.
_ Mis pequeños se han hecho grandes, todos me han dejado.
_ No te hemos dejado mamá, volveremos a visitarte cada vez que quieras, ¿o acaso Arun no viene?
_ Claro que viene, dijo Leonard, es como si no se hubiera ido.
Olivia le pegó en el brazo y le dijo.
_ Cállate, para mí nunca será lo mismo, extraño estar con mi ruidosa familia todo el tiempo.
Amber abrazó a su mamá y le dijo.
_ Yo también extrañare estar todos juntos.
Amber se quedó un rato siendo mimada por Olivia mientras los sirvientes preparaban sus cosas, después se despidieron y se fueron al palacio.
Cuando ellos llegaron, la reina le dio un fuerte golpe a Cailed en el brazo y le dijo.
_ Hijo ingrato, como pudiste escaparte el día de tu boda.
El rey estaba de mal humor, él le tiró un jarrón a la cabeza, Cailed lo esquivó y le dijo.
_ Papá, ¿Acaso quieres matarme?
_ Esa es la idea, sabes todos los problemas que me has causado, era tu oportunidad para casarte y te escapaste.
_ Igual me casé, así que aplaca tu ira.
Los padres de Cailed abrieron mucho los ojos y dijeron.
_ ¿Qué?, ¿Cómo que te casaste?
_ Nos casamos en una pequeña aldea, dijo Amber, perdón por todos los problemas causados, la boda me abrumó, yo le pedí a Cailed escaparnos, no le echen la culpa.
La reina suspiró y dijo.
_ Tu no tienes la culpa de nada Amber, entiendo cómo te sentiste, yo me sentí igual el día de mi boda, todo el estúpido protocolo que hay para casarse es un maldito dolor de cabeza, si no fuera porque mi matrimonio era una alianza entre dos países yo también me abría escapado.
_ ¡Cariño!, dijo el Rey.
_ Es la verdad, deberías cambiar eso, o todas las novias escaparán.
_ Han dicho que se casaron, es verdad o lo están diciendo para calmarnos.
_ Es verdad, dijo Amber, nuestra boda fue maravillosa, me encantó.
_ Bueno, supongo que no se puede hacer nada si ya se han casado.
La reina la abrazó y le dijo.
_ Bienvenida a nuestra familia Amber.