41. No molestes.

7.8K 460 22
                                    

Mientras paseaban por el jardín Amber entrelazó su brazo con el de Cailed y le preguntó. 

_ ¿Ya se lo has dicho a tus padres?

_ ¿El qué?

_ Sobre nosotros.

_ Aún no se los he dicho.

_ ¿Por qué?

_ Ayer no me sentía muy bien, le mintió Cailed, y hoy no he podido encontrar la oportunidad de decirles.

_ Si quieres podemos ir a decirles ahora.

_ ¡¿Ahora?! 

_ Si ahora, tienes algún problema con eso. 

_ No solo que mis padres deben de estar muy ocupados en estos momentos y no quiero molestarlos. 

Amber se detuvo y se quedó mirando a Cailed y le dijo. 

_ ¿Por qué siento que no quieres decirle a tus padres sobre nosotros? 

_ No es que no quiera decirles es solo que, ya sabe como es mi padre si se entera que estamos en una relación querrá preparar nuestro matrimonio en seguida. 

_ No te preocupes por eso, papá nunca dejará que lo haga, ¿O acaso te avergüenzas de mí? 

_ ¡Claro que no!, yo de verdad te amo. 

_ Entonces vamos y le decimos a tus padres, ahora. 

Cailed al ver a Amber que parecía que lo golpearía si se negaba no le quedó más opción que asentir y llevar a Amber con sus padres. 

_ Falta poco para la comida ellos deben de estar apunto de llegar al comedor, así que se lo diremos mientras comemos, ¿te parece bien? 

_ Sí me parece bien, le contestó Amber con una gran sonrisa. 

Cuándo ambos llegaron al comedor los padres de Cailed se les quedaron mirando con la boca abierta ya que ambos iban cogidos de la mano y Cailed le dijo a uno de los sirvientes que preparan un lugar para Amber en la mesa. 

_ Hola, les dijo Amber.

_ Hola Amber, le contestó la reina, ¿ y ustedes desde cuando son tan cercanos?

_ Desde hace unos días, estamos saliendo, les soltó Amber sin previo aviso.

_ ¡¿Ha...?!, dijo la reina. 

El rey se levantó de su silla, se acercó a Amber y le preguntó.

 _ ¿Lo dices enserio? 

_ Si. 

_ ¿Estás segura? 

_ Si. 

El rey le dio un abrazo a Amber y le dijo. 

_ Pensé que nunca escucharía esas palabras, estoy tan contento. El rey soltó a Amber y le dio unas palmaditas a Cailed en la espalda y le dijo. 

_ ¿Por qué no nos habías dicho nada? 

_ Porque quería daros una sorpresa. 

_ Y vaya que nos la has dado, pero ahora habrá que anunciar vuestro compromiso y comenzar a planear vuestra boda....

_ Su majestad le interrumpió Amber, mi madre ha dicho que debemos esperar mínimamente dos años para casarnos, así que cálmese un poco. 

_ ¡Dos años!, ¿Por qué? 

Amber se encogió de hombros y le dijo. 

_ Ni idea. 

_ Entonces tendré que hablar con Leonardo para arreglar esto. 

_ Le aconsejó que no lo haga, papá hace lo que mi madre dice y si la hace enfadar puede que alargue el tiempo. 

_ Tu madre es un cielo cariño, estoy seguro que si hablo con ella todo se resolverá. 

_ Usted no conoce a mi madre ella no cederá con eso y el insistir solo empeorara las cosas así que deje las cosas como están. 

_ Pero... 

La reina golpeó la mesa con las manos y toda la atención se centró en ella y dijo con una sonrisa un poco escalofriante. 

_ Cariño, deja de molestar, ¿Quieres? 

Un escalofrío recorrió la espalda del rey, él se fue a sentar al lado de ella y le dijo. 

_ No te enfades cariño. 

_ Si dejas de ser pesado, lo haré, Amber siéntate por favor. 

Amber se sentó y la reina le preguntó. 

_ Y dime cariño, ¿Qué piensan tus padres de vuestra relación? 

_ Hum... No lo sé, no puedo decir que estén en contra, pero tampoco puedo decir que estén contentos, creó que simplemente lo aceptaron. 

_ Jaja, ya veo. 

Tiberius fue el último en llegar al comedor y cuando él vio a Amber se sorprendió y le dijo. 

_ Hola Amber, ¿comerás con nosotros? 

_ Si. 

_ ¡Oh! Que bien ya hay algunas cosas que me gustaría preguntarte. 

_ Claro puedes preguntar lo que quieras. 

Tiberius tomó su asiento y los sirvientes les sirvieron la comida. 

_ ¿Qué tipo de cosas le gustan a Any? 
Le preguntó Tiberius. 

_ Hum... La verdad es que no lo sé. 

Tiberius puso una expresión triste en su rostro y le dijo. 

_ Qué lástima creí que tú lo sabrías. 

_ ¿Tiberius aún sigues con eso?, le preguntó la reina. 

_ Claro que sí, Any es mi prometida y debo saber que tipo de cosas le gustan.

_ Ya te dije que no están comprometidos. 

_ Si lo estamos, yo se lo prometí y no pienso retractarme.

la hija del DuqueWhere stories live. Discover now