CONTRA EL TIEMPO (Caché)

CAPITULO 37

POV POCHE

Abrí mis ojos tratando de acostumbrarlos a la luz del sol que atravesaba el ventanal a un costado de la cama, mi cintura rodeada fuertemente por los brazos de la mujer con la que había estado enojada días atrás, aún quedaban rastros de rabia pero de eso hablaría con ella después, ahora pretendo disfrutarla mucho más hasta saciar todas las ganas que tengo de ella.

Me acerqué lentamente al cuello de la castaña dejando un par de besos sobre algunos chupetones de mi autoría.

- Mhhmm- Calle gruño subiendo sus manos por mi espalda aun manteniendo su fuerte agarre- Buenos días, insaciable- Su voz ronca me hizo sonreír en su clavícula.

- Buenos días, comandante- subí a sus labios dejando un pico; me recosté en su pecho mientras acariciaba su cabello.

- ¿Quieres hablar?- preguntó y yo sabía de qué tema quería conversar.

- ¿Vale la pena dañar el momento con tus explicaciones?- pregunté tratando de levantarme pero ella me lo impidió con su agarre.

- No pienso darte explicaciones, quiero contarte lo que paso- me miró directo a los ojos con una expresión sombría.

Asentí mientras me acomodaba nuevamente esta vez evitando el contacto de mi parte.

- ¿No me vas a abrazar?- preguntó con voz consentida mientras acariciaba mi abdomen, encogí mis hombros en respuesta- está bien, yo te abrazaré a ti- se acercó más a mí y subió su pierna hasta mi cintura.

- Sé que tienes muchas dudas Poché y estoy dispuesta a aclararlas, puedes preguntar cualquier cosa que desees, yo contestaré con total sinceridad- apreté las sábanas mientras una avalancha de cuestionamientos venían a mi cabeza pero en este momento, me importaba solo uno.

- ¿Por qué te fuiste con ella? ¿Por qué no me llamaste para usar mi Jet? Y más importante, ¿Por qué aceptaste tomar la oferta de irte de gira con ella a cuidarla?- solté tan rápido que no estaba segura de que ella me hubiese entendido; la castaña resopló mientras cerraba sus ojos y posteriormente abrirlos dejándome una espectacular vista de sus ojos avellanas iluminados por la luz natural del sol.

- No quería ni quiero que te involucren en todo lo que sucederá, Halsey era la salida perfecta y aunque no lo creas no estuve con ella más que el día que llegamos y el día que volvimos, nada pasó entre esa mujer y yo, no hubo ningún tipo de contacto, tampoco me acosté con ella como piensas, estaba resolviendo asuntos personales de los que te contaré más adelante si logras confiar en mí.

- Te creo- dije sinceramente acariciando su mejilla con suavidad- ¿Por qué no te contactaste?

- Como te he dicho, no quiero que te involucren conmigo, necesitaba aclarar toda esa situación y te juro que si hablábamos me ibas a terminar convenciendo de volver- aclaró sonriendo de esa forma prepotente, amaba esa sonrisa.

- ¿Por qué no quieres que te involucren conmigo? digo, aparte de lo obvio- dije refiriéndome a la investigación en curso.

- Es una historia muy larga María José, pero debes prometerme que al salir de aquí y pase lo que pase vas a creer en mí y en lo que yo diga- dijo acercándose a mi boca, su cercanía me ponía nerviosa aun después de tantos años, asentí lentamente, ella dejó un suave beso en mis labios.

- Yo confío en ti, Calle, también te contare todo- mis palabras fueron interrumpidas por el tono de su celular- la castaña se levantó de la cama haciéndome una seña para que esperase, sin pudor alguno retiró la sábana mientras se agachaba a recoger su chaqueta del suelo, esta mujer quiere matarme.