CONTRA EL TIEMPO (Caché)

CAPITULO 18

POV POCHÉ

La ceremonia para condecorar a los oficiales que frustraron el atentado en contra de mi persona había sido hermosa, me sentía como una mierda, esos hombres murieron por mí y yo no pude revelar la verdad de la causa de sus muertes.

- Casi llegamos a su destino, Señora Garzón- esa era la voz de mi nueva guarda espaldas, la agente Villa recibió toda la información en la mañana tan pronto como salió del hospital, se haría cargo de su deber hoy en la noche, la dejaría descansar lo que resta del día pero necesito a mi esquema de seguridad completo, viajaría a Canadá para arreglar unos asuntos que Paula me había encargado y las dos me acompañarían.

- Gracias, Cabello- la mujer que conducía el auto era Camila Cabello, ex miembro del grupo elite de los Marines de los estados unidos y por un tiempo agente del servicio secreto, no sé de donde la saco Paula ni porque confía tanto en ella como para ponerla al tanto de algunas cosas que hasta hace pocos días yo desconocía.

Tan pronto como estacionamos, baje del auto seguida de mí ahora cuidadora hasta pasar por la puerta principal de la mansión, necesitaba hacer algunas llamadas y dejar todo en orden para irme tranquila.

- Esta es mi oficina, aquí estarás la mayor parte del tiempo que estemos en la mansión, el contacto que tendrás con mis otros agentes de seguridad se limitara a los saludos, no hablaras de nuestra ubicación ni de los planes establecidos- le daba las órdenes a la mujer que Paula me había enviado en un audio hace un rato- tu casa será esta, tu habitación es la contigua a la mía, tu reloj tiene un sensor de pánico que se activa al instante en el que mi pulso se acelere o mi cuerpo perciba el peligro, iras a mi rescate sin importar la situación cuando la pantalla del reloj se ponga de color rojo.

- Entendido- dijo la mujer con expresión seria mientras analizaba el reloj.

- Las demás indicaciones las tendrás por audio, asegúrate de nunca quitarte el audífono, es aprueba de agua y si por alguna razón no lo tienes puesto, el reloj te avisara cuando tengas un mensaje entrante, eso es todo, puedes ir a explorar la casa.

La mujer asintió y salió, siempre era tan callada y seria, la primera vez que la vi, me pareció hermosa, con un cuerpo notablemente trabajado pero sin llegar a lo masculino, ella era procedente de México, su cabellera negra y ondulada eran prueba de ello, tenía un inglés perfecto, por lo que asumí que llevaba aquí muchos años, quede sin aliento al verla.

*Flashback*

- Señora, la busca una mujer en la entrada, me dio un número, dice que usted sabe, es el 7.

- Gracias Juana, yo me encargo de recibirla, que abran el portón- Salí rápidamente de la oficina para abrir la puerta de la mansión y ver a la mujer que se encargaría de mi seguridad de ahora en adelante.

Me ubique al pie de las escaleras de mármol apoyada en uno de los leones que dan inicio a las barandillas, alcance a ver por el sendero una motocicleta Kawasaki ninja negra con algunos detalles en dorado, la mujer a bordo de ella tenía un casco con la forma de depredador, una chaqueta azul de cuero, no pude ver más hasta que estaciono delante de la gran fuente y bajo de la moto, quito los guantes de sus manos y acto seguido el casco, su rostro parecía ser tallado por los dioses, su nariz perfilada, pómulos prominentes y unos labios… de los cuales no hablare, cabello largo, negro y ondulado, su cuerpo era otra cosa, tenía aproximadamente un metro con setenta y cinco, lo sé porque obtuve su archivo, su complexión era atlética sus piernas se veían apetecibles con ese pantalón apretado que traía, una camiseta negra pegada que dejaba entre ver un abdomen plano mejor dicho, esa mujer era un ángel escupido del cielo, su mirada era fuego, me miro con descaro mordiéndose el labio, esto iba a ser un inconveniente.