CONTRA EL TIEMPO (Caché)

CAPITULO 2

POV Poché

Desperté con el sonido de mi teléfono sonando insistentemente, quien mierda podría estar llamando tan temprano, miro el reloj de mi habitación, las 4:20 am, debe ser una jodida broma, quien quiera que sea debe tener una excusa muy buena para que no quiera patearle el trasero tan pronto como le vea.

-¿Diga?- dije con la voz dejada y ronca, dios, hasta mis cuerdas vocales tenían sueño.

-Señora, habla Kika- Dijo con un poco de preocupación en la voz.

-Si Kika, lo sé, vi el identificador de llamadas- mentí - Espero que sea algo importante, de lo contrario puedes considerarte desempleada- dije de forma amenazante.

-Señora, Thompson fue asesinado en la madrugada- hubo un silencio del otro lado de la línea, sé que estaba esperando a que respondiese, pero no lo hice- ¿Señora Garzón? - insistió.

-¿Cómo sucedió?- pregunte ofuscada, joder y ¿cómo no?, John Thompsom era un hombre de un metro noventa, musculoso y con entrenamiento militar, para matar a una persona así de grande se necesitaban dos cosas, agilidad y un grupo de hombres.

-Aún no está claro como lo dominaron, pero parece ser que fue una sola persona, solo hay rastros de un solo tipo de calzado, pero hay otra cosa señora- susurro con más preocupación que antes.

-¿Que se llevaron Kika?- Atine

-Se llevaron la caja fuerte, varios planos de los siguientes proyectos y...- hubo titubeo en la voz de la mujer.

-¿Qué más se han llevado Kika?- a estas alturas ya lo imaginaba, pero quería confirmarlo.

-Se han llevado el ordenador principal, señora- Soltó y sentí un balde de agua fría cayendo en mi espalda.

-MALDITA SEA- grite, joder, ese ordenador contenía toda la información de la compañía, quien quiera que pueda desbloquear las claves de acceso podrá poner su pie en mi cuello y eso significaría que estoy arruinada- ¿Quién sabe lo que está pasando aparte de ti?- Pregunte.

-Nadie señora, Raymond me llamo y desde entonces estoy tratando de contactarla, su línea fija no conectaba- respondió nerviosa, Raymond es el encargado de las cámaras, pero ¿cómo mierda no vio que estaban asesinando a mi jefe de seguridad en sus narices?- Estoy esperando sus órdenes señora- Hablo la mujer.

-No hagan nada, dile a Raymond que avise a los otros de seguridad y que acordonen la entrada de la empresa, voy en camino- Colgué la llamada mientras pasaba una mano por mi cabello- Joder, será un largo día- entre al cuarto de baño para asearme y prepararme para todo lo que me esperaba.

Estaba de pie frente al closet pensando aun en la avalancha de periodistas que tendría que enfrentar tan pronto como la noticia saliese a la luz, escogí una falda de tubo, camisa blanca y blazer gris, zapatos de tacón negros que combinaban a la perfección con mi bolsa de mano y mi sombrero plano superior de ala ancha, me vestí y aplique un maquillaje sencillo, pintalabios color crema mate, polvo y rubor.

Salí de la mansión ordenándole a mi escolta que se quedara para estar al pendiente de cualquier cosa que se presentase con mi madre o con mi hermana, abrí el garaje, escogí el auto que usaría, un Aston Martin rapide, di un vistazo rápido al hermoso coche negro frente a mí, entre y lo encendí saliendo a toda velocidad.

Mis pensamientos estaban matándome, ¿Quién tendría la osadía para hacer algo así? Definitivamente quien haya sido debe pagar, John era mi hombre de confianza, uno de los mejores con los que he trabajado, su muerte deja un agujero enorme en el cinturón de seguridad de la empresa, mi padre había trabajado muy duro para terminar de levantar el imperio que mi abuelo había forjado, años de trabajo y de estudios nos había posicionado en el escalafón más alto de la industria de la programación informática, el ordenador ubicado en la casa matriz que fue robado ayer contenía demasiada información y un virus muy letal capaz de atravesar cualquier sistema de seguridad bancario, además de esto tenia almacenada nuestra última creación, muy importante para el siguiente paso en la internacionalización de Industrias Garzón, quien quiera que sea que esté detrás de esto sabe muy bien lo que hace.