CONTRA EL TIEMPO (Caché)

CAPITULO 27

POV DANIELA CALLE

Una leve vibración me saco del trance en el que me encontraba, la mujer que descansaba a mi lado me tenía con la concentración por los suelos, aun tengo su sabor en mi boca y juro que es lo mas delicioso que he probado en todos mis años de vida, no hay nada como María José Garzón, sentí nuevamente aquella vibración así que busqué en uno de los bolsillos de mi pantalón, era mi teléfono. Me levante suavemente para no perturbar a la diosa que estaba a mi costado.

Leí el mensaje y Salí al balcón de aquella habitación, marqué un número que me había tocado aprender anoche, todo estaba siendo una completa locura en este momento.

- Dime- hable después de que la persona al otro lado de la línea descolgara.

- Era tal y como lo sospechabas, Ruiz no mentía, hay una cuenta a tu nombre en un banco de suiza, tienes abonado mas de veinte millones de dólares- no puede ser- se lo que estás pensando y también me hice cargo de eso, no proviene de nada ilegal, son el producto de rentas anuales a nombre de una empresa- estaba sudando frío en este momento.

- ¿Conoces el nombre de la empresa? - desde hace varios años a mi cuenta personal se transfería cierta cantidad de dinero que con el tiempo fue haciéndose cada vez mas grande, pero nada en comparación con todo ese dinero que aquella persona estaba diciendo que tenía, además, esas cantidades de dinero provenían del despacho de Paula, del que se supone soy socia, únicamente porque le deje usar la herencia que me dejo mi padre que para ese entonces no sumaba mas de diez mil dólares para abrir el despacho.

- Primero debes prometerme que esperarás a que vuelva a contactarte por este medio, no harás preguntas y no sabes nada de lo que estoy a punto de decir- le dije que estaba bien para que continuase.

- Industrias Garzón, ese es el nombre de la empresa y al parecer esa es solo la punta del iceberg, esa cuenta existe desde que eras una niña y fue abierta por Germán Calle- en este momento las piernas me temblaban, esto no podía estar sucediendo- ¿sigues ahí? - me había quedado sin habla.

- Si, continua...

- Hay algo que no se si sea importante, en ese mismo banco hay una cuenta a nombre de Paula Galindo y su despacho, la diferencia es que esta cuenta si ha tenido muchos movimientos recientes por lo que solo conserva quince millones de dólares, no quiero insinuar nada porque se que lo estas pensando, necesito un poco de tiempo para indagar más, por el amor a dios Calle, no digas absolutamente nada o todo el plan se ira a la mierda, nadie puede saber que estoy ayudándote, mi vida corre peligro y lo sabes, me comunicaré dentro de los cinco días siguientes, si no es así... debes proceder con el plan b.

- Cuídate, estamos en contacto- dije para luego cortar y ver como mi teléfono parpadeaba y se quedaba en blanco indicando que el bloqueo de señal había sido levantado, no quedaba ningún rastro de aquella llamada, lo único que quedaba era mi desesperación y un millón de dudas.

- ¿Con quien ibas a estar en contacto? - sentí una voz rasposa a mis espaldas mientras rodeaban mi cintura.

- Con Villalobos, lo he dejado a cargo en mi ausencia- mentí, no sabia si hacerle caso a las advertencias que había recibido recién o si bombardear a Pochée acerca de todo ese dinero que su empresa ha estado girando a una cuenta a mi nombre en un banco del extranjero, lo que no encajaba es que el dinero ha estado llegando desde que somos niñas, eso tuvo que ser coordinado por el mismo Juan Carlos en vida y quizá ella no tuviese ni idea de esos movimientos, pero me calaba la mente.

- ¿Me estas poniendo atención? - pregunto la mujer.

- Lo siento, solo sigo distraída con tu sabor en mi boca- dije mientras me volteaba y la abrazaba dejando un beso en la coronilla de su cabeza, amaba que Poché hiciera pucheros y con esa voz consentida que en el pasado usaba para someterme.

Asentí y con cuidado la levanté del suelo mientras ella envolvía sus brazos alrededor de mi cuello, la pose con ternura sobre el colchón mientras besaba suavemente sus labios, ella suspiro en medio del beso y deje tres picos antes de separarme.

- Necesitas descansar, iré a reunirme con Villa y tu jefecita de seguridad para cuadrar algunas cosas, desde hoy estoy asignada para tu protección en lo que concluye la investigación, no puedes hacer nada al respecto porque es una decisión tomada- dije mientras tomaba la pistolera y el shoulder houster que antes había dejado en la mesilla de noche.

- No alegare, me someteré a todos tus deseos, agente Calle- dijo mientras se mordía el labio.

- De hecho, señora Garzón, ahora soy Comandante y si resuelvo este caso, seré Comandante en jefe- dije con una sonrisa ladeada, nadie sabia de mi ascenso, en realidad no había tenido tiempo de contárselo ni siquiera a mis subalternos y fue una ceremonia demasiado privada con los comisionados que actúan en pro de que el caso Garzón sea resuelto antes de que el sistema bancario resulte comprometido, eso sí, si fracasaba tendría que pasar toda mi vida como vigilante o guarda espalda porque mi cabeza y la de todo mi equipo rodaría.

- Espero pronto darte las felicitaciones que mereces, comandante - dijo la peli azul mientras me guiñaba.

- Ya tendremos tiempo, ahora descansa, mi amor- solté guiñando mientras salía de la habitación.

Camine hacia la sala de estar dejándome caer en el cómodo sillón que allí se encontraba, Cabello estaba de pie frente al mini bar leyendo lo que parecen ser unos documentos.

- Entonces, comandante de campo- escuche y voltee a ver a la mujer detrás de mí, era villa con una gran sonrisa.

- Bueno, no me gusta alardear, ya celebrare cuando sea un completo hecho y no este en riesgo mi carrera- dije para soltar un bufido.

- No me gusta ser aguafiestas, pero sabes que debemos hablar del asunto que dejamos pendiente- dijo mirando a Cabello para después devolverme la mirada.

- Lo sé, lo resolveremos pronto, no podemos hablarlo aquí y mucho menos ahora- respondí poniéndome de pie para llegar encontrarme con Cabello en la mitad del camino recibiendo un vaso de whisky, aun manteníamos el pacto de tregua temporal y así seria hasta no concluir con aquella situación, situación que empieza con M y termina en Ruiz.

- Villa, necesito que me cubras, Garzón no debe saber que me voy a ausentar, solo serán un par de horas, cuando vuelva decidiremos si es útil mantenerlo con vida.

- Lo que tenga que hacer, comandante- dijo para saludarme oficialmente.

- Gracias- dije mirándolas a ambas, Cabello solo asintió, deje mi teléfono y placa sobre el mesón del bar y me dispuse a hacer mi camino hacia aquel siniestro lugar en el que yacía el cobarde de Ruiz.