My Exboyfriend » hs (en edición)

XIX. "Reconquista"

Llegue a mi casa a las cuatro de la madrugada. Una sensación extraña viajo por toda mi espalda dorsal. La culpa. Me sentía sucia. ¿La razón de ello? Había follado con ese chico. Y mi mente solo ocupaba el nombre de Harry, porque folle con aquel chico para olvidarme de todos mis problemas, de Harry, de todos. Y me sentía como la reverenda mierda, porque no importaba lo que hiciese, todo me salía mal. Supe el nombre del chico. Su nombre era Connor. Connor Duff. Me lo dijo en susurros y ni siquiera sé si así era su nombre. Y bueno... después de que me dijera que pronto lo sabría, me beso, descontando el hecho de que me llevo a su cama y nos acostamos. Dolía recordarlo. Pero me daba igual, no me importaba. Porque me había dispuesto a no verle nunca más. Se suponía que me vería en su cama aquella mañana. Pero en cuanto se durmió, yo no logre conceder el sueño, así que me vestí y salí de allí. Simplemente porque ya no podía seguir. Sintiéndome sucia. Destruida. Usada. Monstruo. Yo amaba a mi Harry, y no tuve que hacer lo que hice. Ni siquiera tuve que acercarme a aquel chico. Tenía novio en ese entonces. Y le amaba. Le amaba tanto que ni siquiera tenía ganas de amar a alguien más que no fuese él. Pero lo perdí. Y probablemente para siempre.

—¡Jay! ¡Ven aquí, joder! —grito en modo de protesta en cuanto veo a mi hermano tomando mi sujetador de encaje negro.

Que gilipollas.

—No te lo daré. Quiero que me expliques que mierda paso ayer y porque has llegado tan tarde.

Balbuceé.

—No te importa, ¡ahora devuélvelo!

—No.

—¡Jay!

—¿Qué?

—No te hagas el idiota, ¡devuelve!

En cuanto vi que no haría caso, bufe y me encamine a mi habitación. Por un nuevo sujetador. No le diría a Jay lo que hice a noche. No me arriesgaría a que se lo dijera a Harry, estaba segura de que él le había mandado a averiguarlo.

—¿Qué estás haciendo?

—Me pongo otro sujetador.

—Pero este sostén es tu favorito—me dijo, reí.

—Lo sé. Pero como el imbécil de mi hermano no me lo devuelve, me pondré otro.

—¿No te importa este hermoso encaje negro, eh?

Le dije confundida ante su comentario, terminando de ponerme el sujetador.

Acto seguido de él, tiro la prenda por la ventana.

—¿Qué mierda hiciste, maldito gilipollas?—grite abriendo mis ojos exageradamente encaminándome a la ventana, viendo como una tira de mi sostén colgaba en una rama del árbol al frente de mi jardín.

—Eres un imbécil, Jay, de los peores – le dije en cuanto supe que no recuperaría mi sujetador hiciese lo que hiciese.

—No exageres.

—Fuera de aquí.

—Pero...

—¡Pero nada, Jay! ¡Fuera!

Jay bufo y salió de mi habitación. Centre mi vista nuevamente a la ventana, y al árbol. Me encontraba aun en ropa interior y las personas que pasaban por allí me miraban confundidas, lo cual no me importo ya que mi vista estaba enfocada en otra persona. Harry. Sonreí sin que notara mi presencia y me puse a saltar, histérica. Estaciono su moto debajo del árbol donde se encontraba mi sujetador y subió la mirada. Me escondí antes de que me viera y mire de reojo por la ventana. Vi como fruncía el ceño al ver mi sujetador colgando por la rama. Reí entre dientes y quise dar una carcajada más grande pero sin embargo no lo hice. La rama se encontraba más cerca del suelo que de mi ventana, así que a Harry no le basto más que un salto para alcanzar el encaje de color negro. Se rio y negó con la cabeza divertido. Haciendo que yo también lo haga. Luego de que se guardara el sujetador en el bolsillo, entro a casa.