Thor Odinson

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Título: Lo que hubiera querido hacer la doctora Cho pero lo vas a hacer tú alv.
Alerta: Smut (contenido sexual)
Nota: Best title ever Bv
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Te encontrabas  arreglando un poco las cosas y equipamiento de tu consultorio en el complejo de los Vengadores, tras haber sido escogida por el mismo Tony Stark para que seas la doctora que curara y revisara a todos los Vengadores, te era imposible negarte, más por cierto rubio que te traía muerta a sus pies.

Desde ya hace unos meses ha habido cierta tensión con el asgardiano, no una tensión mala sino sexual. Cuando lo curabas, ya que éste siempre venía con golpes de pelea, no podías apartar tus ojos de sus músculos o incluso de su abdomen bien marcado que te hacía babear. Obviamente que él sentía lo mismo, tu escote para nada ayudaba a que el Dios del trueno tuviera pensamientos puros y sanos contigo. Pero eso iba a cambiar hoy.

Terminaste tu turno, ya era muy noche y según Tony no tenían misiones cerca para que te quedaras en turno. Además de que era viernes todos se iban a fiestas o bares para celebrar el fin de la semana.

Así que con mucha pereza y cansancio tomaste tu bolso y expedientes médicos para salir de tu oficina. Cuando abriste la puerta solo pudiste ver el rostro de el dueño de tus más profundas fantasías con sangre en su mano.

-¡Oh por Dios! ¿qué te pasó?

Thor sonrió de lado apoyándose en el marco de la puerta.

-Me lastimé al agarrar mal una espada, quería ver si podrías curarme pero veo que vas de salida.

Observó tu maletín y expedientes y negaste sorprendida.

-¿Pero qué dices?, pasa, no puedo dejar que eso se infecte.

Fuiste a tu escritorio a dejar todas tus cosas y a sacar agua oxigenada para limpiarle la sangre. Mientras Thor entraba y cerraba con seguro la puerta sin que te dieras cuenta, se sentó en la camilla de tu consultorio y no dejó de verte mientras sacabas todos tus instrumentos. Te acercaste a él y empezaste a limpiar su herida y sangre, con algunos quejidos por parte del rubio pero nada que un "lo siento" tuyo no pueda arreglar.

Cuando terminaste le vendiste la herida a Thor hasta dejarla bien sellada, te alejaste y guardaste todo en el pequeño botiquín que tenías. Mientras Thor te veía, estaba dispuesto a hacer lo que tenía planeado contigo, así que sin más empezó su plan en marcha.

-Oye ehm... Tengo una pequeña herida que quisiera que vieras, para ver si es grave o no.

Lo volteaste a ver y quitando un mechón de tu cabello asentiste.

-Claro, déjame verla.

Thor se levantó de la camilla y se quitó la camisa casual que andaba para entrenar dejando ver su pecho y abdomen bien marcado y sudado frente a ti. Jadeaste bajo al verlo así y sin quitar tu vista de ahí él se acercó hasta tomar tu mano y pasarla por los músculos de ahí.

No podías dejar de verlos pero tocarlos te estaba llevando a otro mundo, hasta que volviste en sí y lo miraste algo sonrojada.

-Y-yo no veo ninguna herida...

Susurraste algo temblorosa viendo como sus ojos estaban más dilatados y deseando más contacto contigo.

-¿Ah no?, entonces creo que no era ahí.

Soltó tu mano y las puso en el broche de su pantalón, lo miraste algo excitada pero te sorprendiste más al ver que cuando se bajó el pantalón no traía nada más.

∆ Imaginas Marvel ∆  #WhateverItTakesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora