∆ Imaginas Marvel ∆ #WhateverItTakes

Imagina/Realidad

Alerta: Desde la perspectiva de la escritora.
Parte (II/II)
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Como siempre me levantaba y hacia mi rutina diaria. ¿Saben? A veces las adolescentes queremos algo de aventura de vez en cuando, pero cuando vives una vida de lo más aburrida y horrible es algo difícil sobrevivir o andar con una sonrisa todo el tiempo.

Me cambié lista, hoy acompañaría a mi madre a hacer sus trabajos. Una abogada que va de arriba para abajo por clientes o por sus clientes, es algo tedioso incluso yo lo veo y eso que no soy yo la que hago eso.

Salimos de la casa, fuimos en el autobús hasta el primer destino. Me quede sentada y aburrida esperando a que terminara unos trámites. ¿Lo peor? No tengo dinero para pagar internet en mi celular, así que... Me toca escuchar música de mi celular, pero sin audífonos, seh, es peor.

Cuando terminó subimos de nuevo al autobús y nos sentamos esperando la parada del siguiente destino. Empezó a hablar conmigo de todo y cuando hablaba yo desearía no haberlo hecho.

-Me estoy aburriendo y me cansan los pies.

La miré directamente, ella iba fijamente viendo las paradas que hacía el autobús.

-Deberías agradecer que te saco a pasear, no andes solo en ese celular, pareces zombie en él.

-¿Sabes? No todas las adolescentes se la viven en las redes sociales.

-Ah si claro, en tu "Guadpad". Ya te dije que eso no te ayudará, deja de leer cosas estúpidas, solo te llenan de fantasías la cabeza, cosas que no pasarán.

Desvíe mi mirada hacia la ventana. Por mucho que ame a mi madre hay momentos que quisiera golpearla con un libro de Harry Potter. O con el álgebra, ese a cualquiera le duele.

Me jaló la mano y bajamos en la parada, un edificio algo desgastado gracias a la poca atención del gobierno. Subimos unas escaleras mientras veía a gente algo mayor descuidada o con caras largas. Llegamos a unas pequeñas oficinas que no tenían puerta, la situación del país esta empeorando. Me ordenó sentarme frente a un escritorio mientras ella hablaba de unos planos con una secretaria. Y yo me puse a pensar, ¿qué pasaría si no leyera las cosas que leo? Tal vez sería de esas chicas que solo se toman fotos con algo de ropa para conseguir novios, es absurdo y estúpido.

Me quedé mirando hacia la ventana como la brisa hacia volar las hojas; cuando un estruendo sonó en la parte de atrás, volteé asustada y todas las cajas de documentos tirados por doquier. Mi mamá y las señoras que estaban ahí gritaron asustadas. No había policías, que raro ¿no?

Me levante de mi asiento lentamente y vi como las cajas se empezaron a mover. Yo solo pensaba "Diosito no me dejes morir ahora, dejame graduarme tan siquiera".

Una persona se levantó de ahí, un tipo en traje negro y con sangre corriendo de su boca, miró a sus lados y fijó su mirada en mí. Me congelé por tan fría mirada. Caminó decidido hacia mi mientras me quedaba quieta y asustada, con su mano tomó mi cuello y me elevó unos centímetros del suelo. Trataba de zafarme pero solo escuchaba los gritos de todos y mi madre suplicando por mi vida. Sólo escuché un sonido metálico y el hombre me soltó por suerte caí parada.

-Esa no es forma de tratar a una dama.

Dijo y el tipo cayó al suelo desmayado. Me miró fijamente y sonrió. Yo solo me quede viéndolo sin creerlo, era una ilusión, ya estaba muerta, estaba alucinando, no lo sé pero él se veía tan real.

-¿Steve?

Susurré aún sin creerlo. El caminó hacia mí sonriendo.

-Hola linda.