YouTube Girl |Louis Tomlinson|

Capítulo 28. "Viaje a Londres, paparazzi":

P.O.V. ______:

La semana había pasado volando.

Eran las 7:50 y estaba rumbo al instituto, de allí cogeríamos un autocar para ir a Londres, un poco medieval, pero para mí estaba bien.

Lo últimos días, aunque cueste un poco de creerlo, había salido en unas cuantas revistas como “la futura chica de uno de los miembros de One Direction”, ¿loco, verdad?

Todo esto había empezado en una entrevista que hicieron, les comentaron algo de su nuevo disco y ellos dijeron que estaban mirando videos en YouTube para inspirarse. No sé cómo les inspiré yo, solo canto canciones de diferentes artistas a mi manera… pero, en definitiva, le preguntaron a Harry Styles si “pensaba empezar una relación” conmigo.

Mi pregunta es: ¿yo no tengo algo que ver en esa decisión? No  sé, es que nunca he hablado con él, no le pueden preguntar eso, ¿verdad?

Luego vino una cosa bastante rara en la que todos dijeron que yo era “la chica perfecta” para Louis Tomlinson, ¿de verdad? ¿Dice que ha cortado con su novia y luego lo abordan con eso? No entiendo nada… Lo desesperante de esto es que, con mi salida a Londres con la escuela, están circulando los rumores de que voy a visitar a One Direction. ¿De verdad? ¿No tiene la gente cosas más interesantes que hacer?

Los periodistas a veces vinieron a mi casa para hablar conmigo, eso me fastidiaba, ¿no pueden dejar a mi familia fuera de todo eso? No, al parecer.

En las redes sociales las chicas están divididas, unas piensan que soy buena para Louis, otras quieren que vuelva con Eleanor Calder, otras me insultan diciendo que Louis “es suyo”, eso me da ganas de decir algo como: “¿de verdad? No es un objeto, ¿os dais cuenta, no?”, y mi grupo favorita, las que piensan que intento aprovecharme de la fama de Louis y hacer que él deje su banda…

Exasperante.

Si los llegara a conocer, cosa que no espero, intentaría que el grupo no se disolviera y nunca me aprovecharía de la fama de otra persona, tengo dignidad. Con el tema de Eleanor no digo nada, si ellos contaron fue por algo.

Lo impresionante de eso, es que yo no he dicho nada, no he hablado con nadie y nadie ha hablado conmigo para solucionar el problema. Por eso, cuando estuviera en Londres, pensaba ir un día a Sico para ver a su representante y poder pedir que haga que la prensa me deje en paz.

Otro tema, Louis, el chico de twitter, no me volvió a hablar después de ese mensaje, pensaba hacerlo hoy, tenía ganas de hablar con él, era extraño salir de nuestra rutina, por eso decidí hablarle con unas normas básicas:

1.      Será todo como antes.

2.      Nos intercambiaremos los teléfonos para hablar (aunque le daría un número antiguo por si acaso).

3.      Nos conoceríamos pronto.

4.      Me contaría todo lo que me esconde.

Todavía no se lo había dicho, pero planeaba hacerlo al llegar a Londres.

-          ______, ya hemos llegado. –dijo mi padre, ya podíamos ver el autocar para la salida-. Te echaremos de menos, pequeñaja. –dijo abrazándome-.

-          Papá, me voy unos días, no para toda la vida. –dije sonriéndole de lado-.

-          Lo sé, pero igualmente ten cuidado, ¿ya llevas la tarjeta de crédito de emergencia? –dijo-.

-          ¿Emergencia? Ir de compras en Londres lo será. –le dije mientras le daba un beso en la mejilla y bajaba cogiendo mi equipaje, solo era una maleta mediana para la ropa y una mochila para la cámara, el ordenador y esas cosas-.

Llegué al autocar deprisa, no había mucha gente, pero sí estaba Rachel, por eso me senté con ella, me puse los cascos y, bueno, Morfeo me adoptó por un rato… Hasta que sentí que alguien me tocaba el hombro.

-          ______... Londres no espera, tenemos que ir al hotel. –escuché decir a Rachel-. Tenemos que ir de compras. –con eso fue suficiente para que me levantara, no muchas veces iba a Londres de compras-.

-          Vamos. –dije decidida-.

En el hotel nos asignaron habitaciones para seis personas, para que nadie se quedara solo y no tener que gastar mucho del dinero recaudado en el hotel que, por cierto, era bastante elegante y grande, como de tres estrellas más o menos. Nos agrupamos los de siempre: Cleo, Bethany, Rachel, Jude, Max y yo.

Los seis mosqueteros.

Nos repartimos las tres habitaciones que había, cada una con dos camas, yo me puse con Rachel y los otros son obvios. Pronto guardamos lo básico en los cajones y nos dispusimos a recorrer Londres, yo, por mi parte, fui un rato sola a hacer fotografías, tenía ganas de pensar un poco y admirar la belleza de la ciudad. Aunque, con lo que estaba viviendo, me era algo difícil pasar tan desapercibida como de costumbre, no pedía camuflarme con el entorno ni nada por el estilo.

Pasé un rato haciendo fotografía del palacio real, la bandera estaba alta, así que la reina estaba dentro, eso se me hacía extraño y a la vez impresionante. Incluso le pregunté a un guardia si podía entrar a ver a la reina, pero este solo se rió intentando mantener la compostura, me causaba a mí más gracia su atuendo, parecía un “soldadito de plomo”.

También fui al London Eye, pero solo me pude subir una vez por la fila que había. Sin duda, lo más impresionante fue el reloj, era como estar dentro de una postal de las vacaciones, las que encuentras en todos sitios, pero esto era real.

Tuve una idea, me conecté a twitter y me hice una foto sonriendo con el London Eye a mis espaldas y se lo envié a Louis con el mensaje: “____YouGirl: No more lies” (“No más mentiras”), eso sería suficiente como para que supiera que le estaba perdonando, aunque me costara admitirlo, me gustaba bastante ese chico.

Bueno, la verdad es que todo estuvo tranquilo hasta que, unos minutos después de subir esa imagen, una tromba de periodistas y cámaras se presentaron en el lugar, intentando atraparme y conseguir la exclusiva de la semana… no tardaron mucho en dar conmigo, no me quedé mucho tiempo a esperarles para aclarar la situación en la que estaba toda mi “relación inexistente” con Louis Tomlinson, no tenía ganas de hacer feliz a las prensa en estos momento, lo que tenía eran ganas de hacer un poco de ejercicio.

Fue la mejor carrera de mi vida.