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Viernes 7 de Octubre

-¿Tracy?

Cuando Juliette abre la puerta, estoy deshecha al otro lado.

-Perdona-le pido.

-Oh, no. Santo Cielo, ven. Pasa.

Estoy cubierta con la manta de mi cama.

Necesito una amiga. Alguien con quien hablar. Pero no puedo contarle todo lo que se me cruza por la cabeza. Todo lo que me está ocurriendo.

La policía no puede quedar metida en esto.

Es más de medianoche y despertar a tu amiga para que te reciba luego de haberte desarmado en lágrimas todo el día, no es lo más sensato del mundo pero sí lo que tengo a mano para ayudarme a mí misma.

La primera persona que se me cruzó por la cabeza fue Carl aunque él ya está demasiado liado con sus cosas como para sumarle otro problema. Además, no puedo apartarle de él. No ahora.

Un equipo.

Pensé que éramos un maldito equipo.

-¿Tracy Smith?

Esta vez es la compañera de cuarto de Juliette, Ky (o Kyara, su nombre completo) quien se alarma desde su cama y se encuentra con esta piltrafa andante.

-¿Qué te ha...?-empieza la rubia.

Aunque no lo tolero más y mi llanto se desata como un bebé en desamparo. Las dos vienen para sostenerme de un salto y admito que esto no es algo que Phoebe hubiese hecho de haber estado en el cuarto mientras me devanaba los sesos para no pensar en hacer una locura mientras me pasaba todo el día a moco tendido en mi cama.

O en esa cama donde duermo.

Porque no es mía.

En este lugar estoy de paso. Nada más.

Será sólo una maldita etapa y me iré. Para siempre. Haré mi vida lejos de toda esta mierda en la que me he metido.

En la que estuve metida desde el minuto cero en que nací.


-Toma. Bebe esto.

Tengo la mirada perdida pero logro enfocarla cuando Juliette coloca una taza con un líquido humeante frente a mis ojos.

Estoy sentada en su cama, envuelta en mi propia frazada mientras los recuerdos de la madrugada de hoy mientras Theo se iba de la habitación, asaltan mi mente como intrusos indeseables.

Que no me quiten la frazada, por favor, que no me la quiten. Ella y la almohada son las únicas compañeras que he tenido mientras mi cabeza era atormentada por palabras horribles.

-¿Qué es?-pregunto y le recibo.

-Té de manzanilla. Va a relajarte un poco.

Cuando bebo el primer sorbo, siento el líquido dulce y cálido en mi interior como un paraíso caliente cual llevo tiempo sin acceder.

Quizás... Quizás esto necesitaba.

Un par de amigas. Algo rico y caliente en medio de un día, de una vida tan fría. Y hacer de cuenta que mi vida no es el Infierno que en verdad...es y no puedo huirle.

-¿Quieres hablar?-me pregunta Juliette sentándose al otro lado de la cama.

Sus ojos son dos gemas de compasión tras su enormes gafas de secretaria al estilo Barbie Girl.

-No lo sé-me hundo de hombros-. No... No sabría por dónde empezar.

No sabría cuánto puedo contar.

-Por el principio-me sugiere la otra chica.

-Bien-suspiro-. Pero tampoco deseo atormentarlas.

-Las historias de terror me fascinan-declara Juliette.

Admito que no conocía esa parte suya.

Finalmente doy un sorbo a su té y la sonrisa reconfortante de ambas me instan a empezar...


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#BADBITCH #BADBOYS #BOYTOYS #FINDEMARATON

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BAD BITCH #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora