Capítulo catorce

10.8K 846 141
                                    

—Todas las películas que Tristan ha hecho, son de acción

Oups ! Cette image n'est pas conforme à nos directives de contenu. Afin de continuer la publication, veuillez la retirer ou télécharger une autre image.

—Todas las películas que Tristan ha hecho, son de acción. Así que lo verás constantemente sin polera mostrando sus perfectos cuadritos y esos brazos musculosos... —Irene se mordió el labio inferior. —. Así que hoy haremos noche de cine en tu habitación ¿vale? 

—Vale. Me encargaré de las palomitas —asentí. 

—Palomitas sin azúcar para mí —se apuntó. —. Debo seguir mi dieta. 

—Ajá —alcé una de mis cejas. Hace menos de un minuto se había comido una hamburguesa rebosante de queso y con bastante condimento. 

Mi celular comenzó a vibrar en ese momento con una llamada inesperada de Ash. 

—¿Aún no le cambias el nombre? —acusó Irene al detallar el contacto guardado en mi agenda como "mi amor".  —¿O tienes otro amor del que no me has hablado?

—Es Ash. No me ha dado tiempo de agendarlo con otro nombre...

—Claro —no me creyó en lo absoluto. 

Contesté la llamada, expectante a saber que quería estar vez de mí. 

—¿Diga? —hablé. 

—Seré breve —contestó con seriedad desde el otro lado. —. Mi hermano nos acaba de invitar a su cena de compromiso. Le pedirá matrimonio a Vivian mañana por la noche en su cumpleaños y quiere que estemos allí. Juntos —recalcó aquello último. 

—¿En dónde? —pregunté e Irene me obligó a poner la llamada en altavoz. 

—Será en Los Ángeles. Si viajamos hoy por la noche, podremos llegar mañana temprano y nos quedaríamos en casa de mis padres —declaró. 

Por supuesto, mis suegros no sabían nada de lo que estaban ocurriendo con nuestro matrimonio. 

Irene me miró preocupada. 

—¿Podrías hacerme este favor, Sky? —preguntó, cambiando el tono de su voz a uno más suave. —. Si llego solo, le quitaré el protagonismo a mi hermano. Y no quiero arruinar su noche...

—No te preocupes. Quiero mucho a tu familia, así que... —paseé mis dedos por mi sien. —, está bien, Ash. 

Lo oí suspirar con alivio. 

—Gracias. Compraré los boletos enseguida. 

No dije nada más al respecto y simplemente colgué la llamada. 

—Que incomodo —Irene tomó la palabra. —. Mientras unos se casan, otros se divorcian —murmuró.

La miré, quedándome en silencio. No había nadie más que sufriera por eso que yo. Lo único en lo que podía pensar ahora era en que tendría que prepararme para pasar tiempo en "familia" con mi esposo. 

El divorcio de mis sueños ✔️Où les histoires vivent. Découvrez maintenant