La Sombra de las Estrellas [Luke Hemmings]

37. Cita

ALLY

Una camiseta de manga corta, unos vaqueros y unas vans servirían para esta cita. Porque... ¿Era nuestra primera cita?

Sí, era nuestra primera cita y me había quedado embobada mirando mi póster gigante de Calvin Harris pensando en las posibles consecuencias que tendría esto si Diego se enterara. Me daba miedo su reacción, tenía a Luke para protegerme, pero aún así no quitaba el hecho de que su comportamiento me diera miedo.

No me había vuelto a llamar y eso era un alivio, pero sentía como cada vez que pensaba en él se me hacía un vacío en el estómago.

Rápidamente agité mi cabeza para despejarme y me levanté de la cama cuando acabé de meterme el zapato. No pensaría en él, hoy me centraría en Luke.

¿Era buena idea?

Mi subconsciente me iba a matar. No entendía como de odiarle había llegado a esto, quizá su personalidad era el toque que le faltaba a mi vida, no siempre el típico chico cliché que solo pensaba en conquistarme para llevarme a la cama.

Y de nuevo, volví a agitar mi cabeza y golpeé mi frente con la palma de la mano abierta. Ahora sí que estaba lista para irme con él.

Salí de casa como una bala, cerré con llave y me encontré a Luke toqueteando su teléfono sentado en la moto. Al acercarme a él guardó el aparato muy rápido y me sonrió mirándome de arriba a abajo.

- Con lo que tardabas pensé que te estabas poniendo de gala.

- Ya te gustaría que me arreglara para ti.- le piqué y me crucé de brazos.

- Qué más da lo que te pongas, de todas maneras te lo iba a arrancar mientras follábamos.- mi cara debió de ser un poema, porque la enorme carcajada en la que estalló era la más sonora que había oído proveniente de él en toda mi vida.-¡Es broma mujer! Deberías haber visto tu cara...

- Cállate y vámonos ya.- rodé los ojos y Luke miró algo preocupado a todos lados.-¿Qué ocurre?

- Esto... No tengo casco para ti, ayer salí corriendo y...

- Luke, he montado en moto mil veces sin casco, no tienes que preocuparte.- sonreí y me senté detrás suya cuando él subió.

-¿Ahora no tendrías que agarrarte tan fuerte a mí que tuviera que levantarme la sudadera para poder conducir bien como en las películas?- rió mientras arrancaba la moto.

- Eso sólo pasaría si hubieras invitado a una chica estúpida sin personalidad, pero siento decepcionarte, te ha tocado la chica motorista.

Nada más acabar de hablar Luke volvió a reír y arrancó la moto lo más rápido que pudo sorprendiéndome y haciendo que me agarrara a él para no caerme. No sé como lo hacía, pero al final acababa consiguiendo parte de lo que quería.

-0-

Pensaba que iba a estallar, había comido tanto que ni siquiera me entraba el postre. Los restaurantes chinos siempre fueron mis favoritos, desde muy pequeña me volvía loca cuando íbamos los tres juntos a uno. Lo que me impresionó fue que a Luke también le gustaran, no le veía comiendo en este tipo de sitios con la cantidad de dinero que tenía y menos esta calidad.

- Creo que voy a reventar...- me quejé echándome sobre el respaldo y sobando mi tripa hinchada.

- ¿Ya? Solo has comido un plato de arroz, un rollito, cerdo agridulce y pato al sésamo. ¿Cómo puedes estar ya llena?- dijo con ironía enarcando una ceja y llevándose una cucharada de helado a la boca.

- Muy gracioso, pero tú has comido más que yo.- saqué la lengua y él rió.- Siempre me han encantado estos sitios, todo es tan distinto... Y de donde vengo apenas hay estos restaurantes, me sorprendió la cantidad de ellos que hay aquí en Madrid.