—Sabes que no había un rastro que seguir, ella está tratando de mantenerse ocupada, pero prácticamente sigue un fantasma, si de verdad hubiera algo yo...

     —Tu estarías arriesgándote allá a fuera también y a mi me tendrías muy preocupada, porque de seguro no me dejarías ir contigo —le recordé, no lo negó.

     —La última vez que estuviste frente a él casi mueres, no pienso permitir que siga con vida si eso significa ponerte en riesgo —dijo, le sonreí y me acerqué a su rostro, deposite un beso ligero en su mejilla.

     —Gracias por cuidarme tanto —susurre, él me miró.

     —Es lo que hacemos el uno por el otro, ¿no?

     —Siempre.

     —¿Le dirás a Rick? —pregunto, me encogí de hombros.

     —Últimamente ha abandonado su puesto como líder, no se que tanto sea de ayuda, pero me parece más prudente consultarlo con Hershel, aunque no deberíamos de preocuparnos mientras la infección no llegue hasta nosotros.

     —¿Y podría hacerlo?

     —Es probable, ayer les indique a algunos de los chicos en mi grupo que se cubrieron para evitar el contagio, unos si lo hicieron y otros pasaron de la petición, Karen incluída, cree que actuó paranoica —explique, me sonrió..

     —Es que a veces lo puedes parecer —concedió, me reí mientras me levantaba de su pecho.

     —Oye, muchas gracias —dije, él se enderezó y me abrazo por la cintura.

     —Solo haz lo que sea para mantenerte sana, es enserio lo que hablamos ayer... si tú llegarás a...

     —¿Que habrá de desayuno? —le interrumpí cambiando de tema, no quería volver a esa plática tan morbida.

     —Vanessa... —me reprendió, yo le sonreí con inocencia mientras me levantaba y comenzaba a vestirme.

     —Ya entendí todo ayer, no quiero repetirlo, pero sí quiero ir a comer, asi que vístete, por favor —pedí mientras le arrojaba su camisa—. Y quita esa expresión, hay que disfrutar del día, ¿no?

     —Tienes razón, vamos —concordo y comenzó a vestirse.

     Unos minutos más tarde íbamos caminando hacia el comedor, sin embargo una serie de disparos y gritos interrumpió nuestro recorrido, apenas compartimos una mirada fuimos corriendo hacia donde provenía los sonidos, pero antes de poder entrar, casi chocamos con Merle.

     —¿Donde rayos estaban? —demando, vi que llevaba nuestras armas, simplemente negó con la cabeza y nos las dió—, olvídenlo, necesitan una mano allá adentro.

     Sin más que decir, entramos al pabellón, fue sorprendente ver a una serie de caminantes atacando a las personas. Comencé a detener a unos cuantos, unos segundos más tarde Rick entró también, él empezó a evacuar a todas las personas de ese lugar, asegurándose de que no les hubieran mordido, yo por mi parte prosegui a limpiar la planta baja, cuando ya no hubo ningún caminante en pie, fue momento de hacer otra tarea, asegurarse de que no volvieran e hicieran algo similar, vi que Daryl subía a las celdas superiores junto con Rick, Merle comenzó a ayudarme en la parte de abajo, ya iba por la última celda cuando me sorprendí de ver a una de las chicas con las cuales había compartido una cerveza de contrabando, tenía una mordida en el cuello y estaba tirada en el piso, conservaba sus ojos abiertos, avance hacia ella y se los cerré.

     —Tal vez en otra vida podamos repetirlo —le dije para después enterrarle una cuchilla de mi arco.

     Cuando salí de su celda fui a la parte de arriba, podía ver un gran número de personas frente a una celda, en cuanto llegue vi que el motivo del alboroto era que había un cadáver que no tenia rastro de mordidas, ni siquiera una herida, cuando Rick, Bob, el Doc y Hershel salieron de la celda, yo me quede estática frente a la celda, pues ese cadáver claramente tenía los mismos síntomas que los caminantes de la valla.

El Arquero del Fin del MundoWhere stories live. Discover now