106

108 7 4
                                    

Mi cabeza dolía, mi cuerpo sangraba, me sentía terriblemente, como si un auto me hubiera pasado por encima.

Y todo por un error.

Nos confiamos.

Apenas estábamos a las afueras de Meridian, fuimos emboscados y perdimos a algunos, también nos terminamos separando.

Bueno, así era, hace unas horas me había topado finalmente con Elijah y con Gabriel, pero parábamos cada tanto, pues incluso ellos estaban heridos.

- ¿Qué tienes, Vanessa? -me preguntó Elijah-. ¿También te hirieron?

-No, es solo dolor físico, un par de golpes, nada como a ustedes.

-No vamos a lograrlo, ¿verdad? Llegar a Meridian -dijo Gabriel.

-Solo ten fe.

-Tú eres atea y me lo pides.

-Creyente a mi manera -repuse sonriendo-. Elijah, ¿sabes dónde queda el refugio que mencionaba Maggie?

-Sí... Síganme.

Entre ambos nos llevamos a Gabriel y comenzamos a caminar.

Todos estábamos tensos, de verdad que no sabíamos a qué nos enfrentábamos, pero eran peligrosos.

-Vanessa... -me llamó Elijah.

- ¿Sí?

-Antes de todo esto, en el viejo mundo, ¿a qué te dedicabas?

- ¿Qué?

-Desde que te vi me resultaste familiar.

Reí levemente.

- ¿Te gustaban los deportes?

- ¿Cómo?

-Sí, los deportes... Como la arquería.

-A mi madre sí.

-Era campeona de tiro con arco en mi país... No eran tan famosa, pero participaba en torneos y algunos los televisaban.

-Ya decía yo... Eres la que podía con dos flechas a la vez, ¿no?

-En efecto... Lo hacía para ganar puntos extra en exhibición.

-Y lo hacías bien... Casi no has cambiado.

-Gracias. A mis, creo treinta o treinta y dos, me veo estupenda.

- ¿Y aún puedes hacerlo? -me cuestionó Gabriel.

-Sí, puedo... Ese truquito lo hice con los Salvadores.

- ¿Sí? No me enteré.

-Soy muy buena -respondí riendo-. ¿Falta mucho?

-No, ya estamos en el vecindario... Era una casa amarilla.

- ¿Cómo esa? -preguntó Gabriel señalando una.

-Es esa... andando -nos dijo Elijah y corrimos ahí.

Apenas entramos, nos topamos con Maggie y con Negan, nada más, habíamos perdido al resto y no sabían dónde estaba Daryl. Esto era lo peor que podía haber pasado.

-Saldré a buscarlo -les dije acomodando mis cosas.

-No, Vanessa, no puedes. Tú también los viste, es peligroso.

-Pero...

-No. Tendremos que hacer otro plan.

-Me niego, yo... -dije y oímos vehículos a lo lejos.

-Son ellos, debemos de escondernos.

-¿Dónde?

-En el almacén subterráneo -nos dijo Maggie y abrió la puerta.

Rápidamente nos metimos y esperamos, sabíamos que no se irían, pero no contábamos con que iba a registrar casa por casa.

Permanecimos callados por mucho tiempo, más aún cuando tres de ellos entraron, pero cuál fue mi sorpresa al oír y ver a través de una rendija a Daryl con ellos.

Sonreí al ver que estaba bien, pero de inmediato me preocupé al verlo con ellos. Estaba en problemas y debíamos de ayudarlo.

O por lo menos eso creía hasta que escuche la plática entre él, un hombre y una mujer.

"La única que me importa aquí eres tú"

No fui consciente de mis movimientos hasta que Negan me hizo quitar mi mano de la funda de mi cuchillo.

Lo miré con furia, no estaba enojada con Negan, por lo menos no ahora, porque me estaba poniendo completamente celosa en este momento.

Daryl Dixon, mi esposo, ¿me estaba haciendo esto?

Negan me hizo una señal de que me callara, yo negué y Maggie nos hizo empezar a movernos.

Estuvieron forcejeando conmigo un poco de tiempo hasta que decidí que ya era suficiente estar escuchando estas cosas, no pondría en peligro a mi familia por una estúpida idea de Daryl, porque de seguro de esto iba toda la cosa.

¿O no?

Salimos de la casa y nos adentramos en el bosque de nueva cuenta, solo que ahora sí llevábamos armas y comida, de cierto modo teníamos una ventaja mayor que la de antes.

-¿Estás bien? -me pregunto Maggie mientras nos alejábamos.

-¿Tú como te sentirías si Glenn al parecer tiene una amante?

-Vanessa, no lo sabes. Tal vez Daryl lo hace para sobrevivir.

-Él sabía que estabamos ahí y aun asi lo dijo, ¿por qué? -pregunte enojada-. De cualquier manera, ¿cuál es tu plan?

-Usar a los caminantes para entrar.

-Bien.

-Al estilo de los Susurradores -especifico.

La mire sonriendo, pero de pronto lo considere.

-El único que camino con ellos fue Negan, ¿sabes que le trndrás que pedir ayuda?

-Sí, lo sé y no me gusta la idea, pero es la única manera que tenemos para entrar sin que nos maten a todos.

-Bien... Necesitaremos pieles.

-Sí.

-O, bueno, necesitarán.

-¿No entrarás con nosotros?

-Tengo mi propia forma de entrar.

-Pero...

-Descuida. Es solo que no me hace ilusión ponerme en la cara la piel de un caminante.

-Te nececitaremos allá adentro.

-No estoy segura de que sea una buena opción ahora, Maggie.

-¿Por Daryl?

-Y porque quiero meterle una flecha en la cabeza a su "amiga" -dije seria.

Casi de inmediato reimos ambas.

-Vamos, ¿en la mano de quien él puso un anillo?

-En la mía.

-¿Y con quien se caso?

-Cpnmigo.

-¿Entonces? ¿Cuál es el problema?

-¿Por qué no ha escapado y regresado a mí? ¿Por qué tuvo que decir lo que dijo en voz alta si sabía que yo estaba ahí? ¿Por qué nunca me dijo nada de ella si es que forma parte de su pasado?

-¿Tú le has dicho algo sobre alguna ex pareja?

-Hace tiempo hablamos de esas cosas... Él sabía que antes de estar con él yo tenía una buena temporada sin pareja.

-¿Y si la conoció en este nuevo mundo?

-Mayor razón para haberlo mencionado, ¿no?

-Bueno, piensa en esto, mientras más rápido terminemos esto, más pronto se lo podrás preguntar.

-Sí, eso creo... Gracias, Maggie.

-Señoritas, lamento interrumpir su plática, pero... -empezó a hablar Negan-. Necesitamos caminantes.

-No se les tiene que herir la cara, ¿no?

-Con que le des a uno en el ojo es suficiente para trabajar -dijo, yo asentí.

-Bien, iremos -respondí y me preparé para ir a despellejar caminantes.

Debía de admitir que estaba lo suficientemente motivada ahora, después de todo, tenía la imagen mental de una mujer a la cual le quería clavar una flecha en la cabeza.




Y ya se vieron los celos de Vanessita, no la notan diferente? ;)

Y buenas noticias!!! Al fin terminé de ver TWD, entonces ya tengo el contexto necesario para terminar esta obra, al final le terminé cambiando muchas cosas a lo que esperaba, cuando acabe les diré qué cambié y por qué. Obviamente le deje a la tipa esta con la que Daryl disque tuvo una relación (le digo así porque ya se me olvidó el nombre jaja).

Prometo actualizar tanto como pueda, ahora ya volví a trabajar y tengo muchos pendientes, pero trataré de no ausentarme y tenerlo listo cuanto antes.

Gracias por seguir leyendo!

El Arquero del Fin del MundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora