35. El reencuentro

73 1 8
                                    

- Tu cuerpo aguanto bien todos los golpes que te han dado. Es fascinante - dijo Lavi viendo cada una de las heridas que tenía Samanta en su cuerpo. Estaban en la Aquila en el camarote de Samanta, Faulkner se alegró de ver a la chica bien hasta le reservo un licor para ella. Samanta amablemente lo rechazo diciendo que mejor se lo bebiera él. La nave estaba junto al barco de Tyki que les había dicho que debían irse a una isla que él conocía hasta entonces había que cuidar a Samanta y Larisa, que las dos estaban hechas una pena, Samanta estaba más hecha polvo, parecían unas vagabundas o esclavos.

- No se si sentirme alagada por eso. Han sido las semanas más largas.... ¡aaah! - dijo Samanta mientras Juana le estaba curando algunas de las heridas

- Perdona, chica. Es que menudo rapapolvo que te han hecho. Al menos podrás reposar tranquila y contarnos tú y Larisa que paso - dijo Juana

- Solo tengo una pregunta a todo esto ¿Cómo habéis hecho que Tyki y Connor trabajen juntos? - preguntó Samanta curiosa debido a la sorpresa que le dio ¿ellos trabajando juntos? Aún creía que el dolor le estaba haciendo delirar o estaba viendo una alucinación.

- Nosotros no hicimos nada, darle las gracias a Dave, los ha unido a los dos - dijo Lavi

- Sí, aunque intimidan bastante los dos mirando de forma fría. Connor casi llega a ahogar a Biddle. Lavi y Tyki acompañaron a un guardia con espada y pistola, eso si de forma cortes todo. Daban miedo mirarles por eso yo iba más adelante - dijo Juana mientras Lavi se acercó a ella

- Alguna broma les tengo que gastar a esos dos - dijo Lavi mientras las dos le miraban diciendo eso es lo más peligroso que podrías hacer.

- Tus heridas ya están más o menos curadas, no tienes que moverte mucho para que se sanen, en un par de meses ya estarás listas para dar las palizas que quieras - dijo Lavi

Samanta suspiró mientras Juana le dio suavemente en la cabeza - pat, pat Samanta. No te preocupes vas a tener una audiencia especial con tu querido capitán - dijo Juana mirándole de forma pícara a Samanta haciendo que está se pusiera roja

- Es cierto, quiere un momento a solas contigo. Nos lo ha dejado... No quiere que nadie le molesté. Te echaba tanto de menos, si lo vieras parecía un cachorro perdido... - dijo Lavi de forma divertida mientras Samanta se tapaba la cara de la vergüenza que tenía

- Deja de chincharla Lavi, encima que lo ha pasado mal la pobre. Tú, duerme mientras tanto nosotros nos iremos a preparar la cena para la tripulación - dijo Juana mientras Lavi cogió de la mano a Juana y Samanta miraba pícaramente a los dos.

- Ya os veo, ya pasarlo bien parejita - dijo Samanta guiñando un ojo haciendo que los dos se sonrojaran, los dos se fueron de allí.

La calma, calor y no sentir tanto dolor. Ella sentía un poco de dolor pero al menos no era una triste mazmorra en la que hacía mucho frío y olía a humedad. Samanta cerró los ojos.  

¿Donde estoy?

Samanta miro a su alrededor, era blanco con rastros conocidos para ella. Otra vez no pensó Samanta. Ella fue andando por la zona, había demasiado silencio y no se podía orientar bien por algo que no se veía ni norte, ni sur, ni este y ni oeste.

¿Hola? Hay alguien ahí dijo Samanta mientras que solo oía eco 

Si que hay alguien dijo alguien detrás de Samanta mientras esta se cayó al suelo de la impresión. Era Minerva que apareció. Veo que aún estás intacta, estoy aquí para decirte la manera de que... puedas... dijo Minerva su imagen se estaba distorsionando y en su lugar apareció Juno Debes... seguir... tu... misión... dijo Juno mientras Samanta estaba confusa de lo que estaba pasando

Breaking The Fourth DimensionOù les histoires vivent. Découvrez maintenant