𝕻𝖑𝖆𝖞𝖎𝖓𝖌 𝖂𝖎𝖙𝖍 𝕱𝖎𝖗𝖊 - 𝕵𝖊𝖓𝖑𝖎𝖘𝖆

98.

Entran a la casa sin mencionar ni una palabra. Los ánimos estaban por los suelos. Hace unas horas fueron a despedirse del mayor y verlo por última vez. Ahora, él estaba descansando en paz. Durante toda la trayectoria Lisa trato estar al lado de Jennie, que, de todos, es la que más le ha afectado. La mujer estaba demasiado triste, adolorida. La persona que consideraba como un segundo padre se acaba de ir, nunca lo volverá a ver, y él, nunca podrá conocer a su pequeño. Fue tan difícil ver como aquel cajón era llevado a ese lugar frío, solitario. A varios metros bajo tierra. Si no fuese por Lisa, se hubiera tirado al cajón para evitar que lo llevarán a ese lugar.

- Iré a hacer algo de comer – susurra Rosé. Le da un besito en la cabeza a la castaña y se dirige a la cocina.

Lisa mira a Jennie. Se va a acercar a ella, pero se detiene cuando rápidamente Jennie se da la vuelta y se dirige a su habitación.

- Lili – llama Jisoo. Lisa se detiene y la mira – dale tiempo – Lisa presiona sus labios y asiente. Mira hacia arriba y suspira.

Las chicas estaban sentadas en los sofás en silencio. Cada una estaba metida en sus pensamientos. Saber que el anciano ahora no está ahí, era algo demasiado difícil de ingerir. Aunque Lisa y Jisoo lo sabían, al final eran conscientes de que cierto modo esto iba a doler. El hombre era asombroso, el corazón más dulce del mundo. Ahora, sin él, las cosas serán difíciles para todos. Aunque eso no era lo único que ambas chicas piensan. Saber que la mayor anda por ahí detrás de toda la herencia del mayor, era algo que les daba miedo. Aunque ambas prometieron pelear contra ella, no iba a hacer fácil. Si la mayor fue capaz de hacerle esto al hombre que la cuido, la protegió, y que, a pesar de todas sus mierdas, siguió ahí. ¿Qué les hará a ellas?. Ahora esto era algo que están en sus cabezas, tienen miedo. En especial por Jennie. Lisa le preocupa que la mujer le haga algo a ella o a su bebé. A Jisoo le asusta que su madre sea capaz de matarla, o incluso, que le haga algo ahora a la chica que tiene al frente. La mira y moja sus labios.

- Lisa – la chica la mira - ¿podemos hablar de algo? – Lisa asiente. Diana suspira y se levanta del sofá.

- Iré ayudarle a Rosé – asienten. Diana se inclina un poco y le da un beso en la cabeza de Lisa. Jisoo suspira y se acomoda.

- Sé que no sabes muchas cosas. No has estado aquí desde hace tiempo, han pasado muchas cosas – se queda pensando – para empezar, ya sabes que Jennie no obtuvo el puesto – Lisa asiente levemente – fue algo difícil de hacerlo, porque sinceramente ella iba a obtenerlo, pero yo con Rosé averiguamos un par de cosas y no queríamos permitir que mi hermana se obligará a una vida que no deseaba. Que simplemente era influenciada por mi madre – Lisa asiente levemente.

- Lo entiendo – dice suavemente - ¿puedo saber que cosas averiguaste? – Jisoo asiente.

- La verdad. Tu verdad – Lisa se queda mirándola – fuimos con tu madre y ella nos demostró cada pequeña cosa de tu pasado – Lisa abre los ojos – Lisa, lamento que hayas tenido que pasar por todo eso, por todas las cosas que tuviste que soportar sola, por el dolor que te invadía. Fui una idiota – baja la mirada – el abuelo dijo que yo era de las más inteligentes, pero en eso está equivocado. Porque si fuese así, yo hubiera averiguado todo eso antes de permitir que mamá nos hundiera. Pero ella supo jugar con las cartas que tenía en la mesa. Aprovecho que precisamente yo viera algo cuando fui a ver a Rosé que me hiciera dudar – dice recordando ese beso – mamá supo atacarme en el punto débil y utilizarlo a su favor para que yo fuera por Jennie y también hiciera eso – suspira – es increíble como todo le salió tan bien, tan perfectamente calculado. Ella supo jugar con tu pasado y tenerlo a su lado – mira a Lisa – si hubiera sabido toda la mierda que tuviste que vivir, el infierno. Tal vez hubiera evitado tantas cosas – Lisa baja la mirada – lo siento – dice suavemente.