𝕻𝖑𝖆𝖞𝖎𝖓𝖌 𝖂𝖎𝖙𝖍 𝕱𝖎𝖗𝖊 - 𝕵𝖊𝖓𝖑𝖎𝖘𝖆

71.

El chico limpia tranquilamente el local mientras escucha música. Levanta la mirada cuando alguien entra jalando la puerta fuertemente. Se queda observando la chica que camina de un lado a otro con enojo. Deja a un lado el trapeador y se cruza de brazos.

- Primero que nada, buenos días - dice con la ceja levantada – segundo, ¿acaso no ves que estoy haciendo oficio?. Y, por último, ¿Qué haces aquí? - la chica lo mira.

- ¿Cómo es posible que desconfíe en mí? - dice señalándose - cuando todo lo que he hecho es demostrarle que la amo, que la adoro, que joder, que me muero por ella - bufé - pero claro, eso no es suficiente, nunca es suficiente – dice manoteando – no es justo, ¡ugh! - se sienta – tráeme un trago – el chico se queda mirándola con la boca abierta – para hoy – dice chasqueando sus dedos.

- Como mande, jefa – se dirige a la barra – ten – dice entregándole la botella. Se acomoda y suspira – vale, te he escuchado, y puedo notar que has despertado de malas pulgas – refiriéndose al mal humor de su amiga – pero no he entendido a qué te refieres y por qué estás bebiendo tan temprano – Lisa termina de darle un sorbo a su trago y lo mira.

- Jennie – el chico asiente – enfrento a su mamá, ya debes de saberlo – asiente – la cosa, es que estaba pensativa desde que salió de esa casa. Hoy quería hablarlo, quería que estuviera tranquila, que sacará lo que la tenía sufriendo.

- ¿Y? - Lisa deja la botella en la mesa.

- ¿Puedes creer que su madre le dijo que estoy por ella solo por dinero? - suelta una risita – menuda excusa – vuelve a bufar. Jung asiente.

- Primero que nada, era obvio que se iba a pegar a eso, y más si llego averiguar algo de ti – Lisa lo mira – recordemos que venías de acabar una relación casi en la misma situación – le recuerda – era más que obvio que ese iba a ser su manera de manipularla – dice sabio - recuerdo que con Tae, trato de hacer lo mismo, con la diferencia es que trataba de manipularlo con que le iba a ser daño solo porque solía "enamorarme cada fin de semana" - dice haciendo entrecomillas con los dedos – cosa que bueno, no era mentira. Pero, cuando empecé a estar con él, como pareja, dejé a un lado – Lisa suspira.

- Claro que yo era consciente que, si la señora Kim averiguaría de mi vida, se encontraría con aquella sorpresa, y entiendo que pueda ser dudable. Vamos, tío, ¿Qué tan suertudo debes de estar como para que por casualidad termines otra vez con alguien que pertenezca en la familia real?.

- Pues... — se queda mirándola.

- Lo sé, fui de ese cero coma un porciento, pero yo no lo hago por dinero, lo hago por amor – dice suavemente.

- Lisa, es obvio que ellos pensarán que estás con ella por dinero. Vamos, esa gente tiene dinero hasta para las próximas vidas que les queda. Era claro que su madre iba a pensar eso.

- Lo sé, pero no me duele tanto saber que esa iba a ser su plan, me duele saber que Nini lo dudo – dice bajando la mirada. Jung suspira y asiente.

- Creo que es normal – Lisa lo mira – Lisa, todos dudamos por miedo. ¿Acaso tú no lo hiciste?.

- Sí, pero yo...

- Huiste - dice sincero - ¿o me equivocó? - no contesta – es normal tener miedo, pero en vez de venir aquí a beber y quejarte, debiste hablar con ella, asegurarle que esa mierda es solo eso, mierda. A veces somos débiles, el miedo nos hace débiles. Necesitamos alguien para que nos recuerde por qué estamos aquí, y por qué hemos decidido esto. Sé que debió enojarte eso. Tae y yo peleamos mucho, por ello, créeme, fueron muchas. Pero a diferencia a ti, yo nunca hui, nunca le di la espalda, aunque me enojará mucho, me quedé y le demostré que todo eso no tiene sentido. Debes hacer eso. Es normal que dudemos, aún no sabemos qué sucederá, es claro. Pero, eso no es lo grave, lo grave es creerlo y caer en ello, eso sí, y ella no lo hizo, ella siguió y se mantuvo. Enfrento a su mamá, aunque tenía miedo. Dime, ¿no te parece que ella de verdad está dudando de ello?. Apuesto que ni siquiera dejaste que ella te explicará - Lisa no dice nada, solo baja la mirada – Dios – suspira – Lisa, tienes que empezar a ser más seria con esto. Esto, ya no es un juego, esto es ahora tu presente, y si lo quieres, tu futuro. Si no vas a saber llevar la situación, si te parece mejor huir que hablar, entonces no estás lista del todo – se levanta – te lo dejaré de tarea, por ahora, necesito que me ayudes a limpiar, ya que me quitaste diez minutos demasiado valiosos – Lisa lo mira.