Theo
-La recepción de alumnos no comienza sino a las ocho.
-Oh, mierda. Quiero instalarme ahora, ¿qué diferencia encuentra en una maldita hora y media?
-Que la encargada de esos asuntos es Helena y su horario de trabajo comienza a las ocho-insiste la incompetente muchacha de recepción.
-Tiene que haber alguna alternativa, demonios. Te he mostrado toda la documentación que querías, tengo una beca y ¿así es como respondes?
-Los becarios también son labor de Helena. Por favor, vuelva más tarde.
-¿Ah, sí? ¿Ah...sí? Perfecto-murmuro y me contengo para no darle un puñetazo al mostrador.
Tracy
-Yo...-murmuro.
Su nombre me trae recuerdos: el día que Carl me confesó la historia del extraño Bad Boy que abandonó el grupo para consumar su amor con una Glorious y, lamentablemente, rompieron las normas pertinentes, fueron capturados y obligados a desaparecer.
-¿Tú...?-se burla.
-Mejor vuelvo luego-insisto y me suelto de su mano.
Él interpone un hombro en mi paso y su pectoral derecho queda justo a la altura de mi rostro. ¿Sería muy imprudente la idea de morderle un pezo...?
Ni te atrevas a pensar en eso.
Es verdad, no sé qué me pasa.
Es el síndrome del Chico Malo. Te quedas embobada con el primero que te empieza a dar órdenes..., ¿te resulta familiar esa explicación?
No y no me interesa.
-¿Cómo te llamas?-me insiste.
-Tra...Tracy-le digo por fin.
-Mmmjj. Debo irme, dúchate y no te preocupes que no te espiraré-lo miro a los ojos y me dedica un guiño-. No te espiaré hoy.
Finalmente se va y quedo de pie, pensando en cuántas posibilidades tendré de volverlo a ver y cuántos chicos en el mundo han de haber con el nombre «Stefano».
Theo
Mi mano se cierra sobre una botella de whisky y miro el precio, tentado aún más.
No, idiota.
¿Tú qué?
A ella no le gustaría que llegaras borracho a tu primer día.
Las probabilidades de que la vea hoy en la misma residencia que me alojaré yo, son de una en un millón.
Si llegas ebrio, no van a recibirte.
Trago saliva pensando en lo difícil que es esta batalla interna. Vamos, ¿a qué monstruo desalmado se le ocurre poner una licorería frente a una universidad? ¿Qué opinaría Austin, mi hermano, de una situación así? Dondequiera que su alma esté, ha de estar soltando una carcajada con la idea de hacerse rico ante terrible negocio.
No, Theo...
Sí, por favor. Lo necesito.
Los ángeles lloran si un demonio cae.
Los ángeles no son compatibles con los demonios.
Pero igual los comprenden y sufren por ellos.
-Oh, mierda-digo por fin y suelto la botella devolviéndola a su estante para salir a toda prisa de la licorería con el fuerte deseo de que Tracy quiera verme.
¿Tengo alguna alternativa para ser capaz de superar esto?
Th: Estoy en la IVU. ✓✓
Tr: ¡OHH!! ¡NO ES CIERTO! ¿En qué edificio vas a vivir? ✓✓
Th: Me alojarán en una residencia. Es posible que luego entre a una fraternidad. ✓✓
Tr: ¿Una fraternidad, dices? ✓✓
Th: Sí, algo así... ✓✓
Tr: Déjame adivinar. ¿La fraternidad se llama Go Delta o parecido? ✓✓
Th: ¿Cómo lo sabes? ✓✓
Tr: Vi en una residencia un cartel pero no importa... ¿Quieres que vaya a buscarte y te presente el campus? ✓✓
Th: Yo creo. ¿Dónde estás? ✓✓
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