Capítulo 59: Puntos.

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En una relación siempre ocurren cosas, cosas buenas y malas, y si nombramos a esas cosas como puntos tenemos el punto y aparte -cuando continúas con la relación después de un suceso importante olvidando lo ocurrido-, el punto y seguido -cuando ese suceso sigue afectando a tu relación y a tu vida- y el punto y final -cuando ese suceso pone fin a tu relación-.
Que sea punto y aparte, punto y seguido o punto y final depende de nosotros, de nuestra pareja y del amor 💖.

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Adán despertó sobresaltado al notar una mano tocando su vientre. Casi salta de la cama. No lo hizo porque enseguida vio el pelo rubio dorado de Mat y se relajó. "Es mi gatito", pensó, y se abrazó a él soltando un suspiro. Miró su reloj y comprobó que era temprano. Como de costumbre se había despertado con tiempo para ir al gimnasio, pero sopesando las posibilidades de quedarse en la cama con Mat o hacer ejercicio le pareció mucho más apetecible la primera opción, así que se acurrucó en torno al cuerpo del rubio y se dejó llevar de nuevo por el sueño.

Otro sobresalto, esta vez por el sonido de la alarma. Normalmente se despertaba antes de que la canción "You think you know me" sonara desde su móvil. Así que despertarse con el sólo de batería le hizo darse un buen susto.

—Tengo que cambiar la canción —susurró restregándose la cara—. ¿Mat?  —llamó a su novio al comprobar que no estaba en la cama.

—Buenos días  —saludó el chico asomando la cabeza por la puerta del dormitorio—.  ¿Magdalenas o tostadas?

—Ahm, tostadas.

—Muy bien  —canturreó Mat con una sonrisa y salió.

Adán bostezó, salió de la cama y fue hacia el baño sin preocuparse de ponerse algo de ropa. Cuando salió del baño vio a Mat llevando dos bolsas de basura.

—¿Te importa sacar la basura mientras yo hago el desayuno?

—Vale. Voy a ponerme algo. Si salgo así la vecina llamará a la policía.

Mat se echó a reír.

—Sí, claro. Lo que haría es hacerte fotos para su disfrute personal. Esa mujer moja las bragas cada vez que te ve y eso que vas vestido, si salieras a la calle desnudo tendría orgasmos múltiples.

Adán sonrió de lado al notar un deje de celos en la voz del rubio.

Unos minutos después Adán caminaba hacia los contenedores de basura que estaban justo delante del 'Hostal arcoiris'. Levantó la tapa y tiró las bolsas. Al darse la vuelta, un escalofrío de miedo recorrió su columna vertebral al ver la figura de un hombre saliendo del hostal. Una figura que se le hizo desgraciadamente familiar. No pudo verle bien, su cerebro tenía una especie de sistema de defensa que en cuanto veía a alguien mínimamente parecido a 'él' giraba la cabeza y se marchaba rápidamente. Cerró la puerta de su casa en cuanto la cruzó y apoyó la espalda en ella una vez dentro. Respiraba de manera agitada, nervioso, asustado.

<No. No era él>  —pensó—.  <Seguro que sólo era alguien parecido.>

—¿Adán?  —le llamó Mat.

Adán se despegó de la puerta como si quemara y miró a su novio.

—¿Qué?

—Las tostadas están listas. Lávate las manos antes de comer.

—...Sí.

Mientras se lavaba las manos en el baño se miraba en el espejo, en realidad sin verse, sólo miraba su imagen sin prestar atención, pensando en la terrorífica posibilidad de que aquel hombre fuera 'él'. Si lo era, si esa figura que había visto era la suya, significaba que el desgraciado iba al hostal, y por lo tanto a contratar los servicios de algún chapero.

Línea recta (Homoerótica)Where stories live. Discover now