Samuel estaba en su despacho, le había dado indicaciones a Rosa para que dejara entrar a Andrea tan pronto ella llegara y también que la pasara al estudio en donde estaba él, no tenia mucho que hacer por eso lo poco que podía avanzar le ayudaría pero justo cuando estaba en el punto más concentrado Andrea entro furiosa azotando la puerta y haciendo que él se sobresaltara.
Andrea: ¿¡Me puedes explicar que es esto?!-grito enseñándole el chaleco.
Samuel: Buenos días primero ¿no?
Andrea: No! Al diablo con los buenos días! Nadieee esta de buenos días en este momento!
Samuel: ¿Me puedes explicar lo que te pasa? Porque entras gritándome y mostrándome este chaleco.
Andrea: Sabes de quien es ese chaleco?!
Samuel: No.-dijo comenzando a reír.-Andrea no soy adivino, ¿de quien es?
Andrea: De NURIA! alias la golfaaa de mi hermana!.-grito histérica.-Se le olvido la noche que estuvo aquí!
Samuel: Ya entiendo todo.-dijo serio y levantándose.-Andrea lo que pasa es que...
Andrea: ¿Que? Que mi hermana vino y tu la dejaste quedarse así como si nada? Y más! Me lo ocultaste!!
Samuel: ¡Haber escúchame y deja de gritar! A tu hermana se le descompuso el auto y me pidió el favor de que si se podía quedar y yo le dije que si, eso es todo!
Andrea: Y no la pudiste llevar en uno de tus tantos automóviles? O prestárselos, No la pudo llevar unos de tus empleados, pedir un taxi, un burro, un caballo, lo que sea para irse bien lejos de aquí, de tuuu casa?!!
Samuel: ¡¡Andrea eran las 12 de la noche.!!
Andrea: Y que?! Ni que le saliera la llorona en plena carretera.
Samuel: ¡¡Andrea entiende que podía ser peligroso!!
Andrea: No! Entiende tu Samuel!! .-grito molesta.-Ósea ubícate, no te das cuenta que lo único que quiere mi hermana es violarte, para decir que se acostó contigo y fregarme la vida!-exclamo y el no pudo aguantar la risa.- Aparte te burlas? Todavía que pasas la noche con ella, y me mientes y me lo ocultas, todavía te burlas de mi. Eres un golfo tu también.
Samuel: Haber señorita, histérica, loca y celosísima.-dijo riendo y tomando su rostro con ambas manos y Andrea lo miró.-Yo a la única que amo es a ti, eres con la única con que compartiría cama, con la que amanecería todos los días agotado por hacerle el amor intensamente, una y otra ves.-susurro y la vio sonrojada por primera ves desde hace mucho tiempo.-Eres la única con la que quisiera estar el resto de mi vida, así que la que se tiene que ubicar es usted, ¿esta bien?
Andrea: ¿Me lo juras que soy la única?-dijo y el la beso asintiendo.
Samuel: Te lo juro. Aunque si me ofendiste con tu desconfianza eh, ¿Cómo crees que voy a tener algo con Nuria?
Andrea: Bueno este Rosa me dijo que paso la noche contigo y que tu le diste permiso así como si nada...ósea con esas palabras y cualquiera pensaría mal o no?-pregunto y Samuel la miro con el ceño fruncido.
Samuel: Rosa te dijo eso?
Andrea: Si.-dijo y el se aproximo a la sala para llamarla, viendo como la mujer obedecía.
Rosa: Aquí tienen las galletas y el café que me pidió la señorita.-dijo con burla y Samuel la miro serio.
Samuel: Porque le dijiste a Andrea cosas que no eran del todo ciertas, Nuria si paso la noche aquí, pero no conmigo, ni porque yo la deje, es más ustedes me insistieron y por eso yo cedi.-dijo y Rosa se puso pálida.
Rosa: No, seguro la señorita, me escucho mal, o me entendió mal.
Andrea: ¿Yo? Haber, Rosa, Rosita o Rosota, como quieras que te llame, ¿me crees tarada o estúpida, o ambas cosas? Yo se perfectamente lo que escuche y lo que comprendí de ti, y esas fueron tus palabras.
Rosa: Señorita...
Samuel: Rosa, mira te lo voy a dejar pasar por esta ocasión, ya que son muchos años de servicio, pero a la próxima cosa que digas para perjudicarme a mi o a mi novia, no me tentare el corazón en correrte ¿Quedo claro? -pregunto mientras Andrea comía las galletas y bebía del café.
Rosa: Si.
Andrea: Ósea, a parte de intrigosa pésima cocinera estas galletas saben horribles, y el café no ayuda, tampoco, Petra mil veces mejor.-dijo agarrando otra galleta mientras la empleada salía y vio como se tenso al escucharla cerrando la puerta con fuerza.
Samuel: Andrea...ya no le eches más leña al fuego por favor.-dijo sentándose junto a ella, y sonrió al ver como ella devoraba las galletas.-No parece que estén pésimas.
Andrea: Bueno, me vine de mi casa sin desayunar...con hambre todo sabe delicioso.
Samuel: Mejor deja esto y dame un beso.-dijo quitándole la charola de galletas y se acerco a ella besándola dulcemente mientras ella sonreía.
Andrea: Me encantas rancherito.-susurro sobre sus labios cuando este se aparto ligeramente y sonrió.
Samuel: Tu también a mi.
Apreso su boca con pasión, devorando sus labios con intensidad, como si quisiera quedarse con todo de ella en ese mismo momento, con una mano el le rodio el cuello y la pego más a él, si es que eso podía ser posible, sentía un repentino deseo, y se dijo que eso era lo que había estado esperando por años, un beso que le provocara esa misma sensación, que encendiera su cuerpo, que le erizara la piel, un beso que le encogiera el corazón, pero se le fue el aire de los pulmones y muy a su pesar se tuvo que separar de ella, muy despacio.
Andrea: Cuando me besas así definitivamente si pierdo la cabeza.-dijo y el comenzó a reír.
Samuel: Andrea tu pierdes la cabeza hasta porque la mosca se te ponga enfrente.
Andrea: Eres un grosero ranchero!-dijo golpeándolo en el brazo.-Oye de verdad quiero comer, tengo hambre.
Samuel: Hmmm bueno, si me das otro beso como el de ahora, puedo pensarlo.
Andrea: Que chantajista. Pero claro que te beso.-dijo tomando su cara y lo beso.
Samuel: Bueno, vamos al comedor entonces.
Andrea: No...aquí no, como que hay cierta mala vibra, mejor vamos a un lugar alejado.-dijo y él asintió sonriendo y ambos se fueron de ahí.
Los dos se fueron a desayunar pasando un momento agradable entre risas y bromas, quedando de verse más tarde para continuar con lo que tenían planeado, Samuel fue a dejar hasta la puerta de su casa a Andrea y esta sonrió dándole un beso y mirando como se iba, para después tomar aire y entrar a la casa.
Andrea: Donde esta Nuria?-pregunto a Cayetana quien salía de la cocina.
Cayetana: En su recamara. ¿Por qué?
Andrea: Por nada, quería darle esto..-dijo enseñándole en chaleco y subió a toda prisa entrando a la recamara de Nuria sin tocar y encontrando a Bruno y ella en ropa interior.
Nuria: ¿Por qué demonios entras así?!-grito furiosa y Andrea estallo en carcajadas.
Andrea: Noo wooo, súper mojigata! Regañándome a mi por estar en mi habitación con Samuel y tu aquí haciendo lo mismo?-dijo y negó mientras reía.
Bruno: ¿Y que hacías con Samuel en tu habitación?
Andrea: ¿Cómo que? Entregándole lo que nunca te entregue a ti.-dijo con una sonrisa de oreja a oreja y después miro a Nuria.-Bueno mira, perdón por interrumpir solo venia a darte esto, te lo mando la chacha de Samuel.-dijo entrándole el chaleco.-Lo olvidaste en su casa el dia que te quedaste con él.
Bruno: ¿Como?-pregunto mirando enojado a Nuria, mientras esta palidecía.
Andrea: Upsss ósea como? No sabias que Nuria paso la noche con él, uuuy que mal, deberías contarle hermanita, para que no lo tome por sorpresa...bueno perdón por enfriarles el momento, espero que se sigan divirtiendo y practicando para su noche de bodas.-dijo y salió de ahí con una gran satisfacción...
