Samuel se había quedado en shock con todo lo que le había dicho Nuria, el castigo que le había impuesto sus padres para perdonarla por haber descompuesto su vida, jamás se podría haber imaginado que sus padres la obligaran a irse a Italia para perdonarla por el echo de que ella fuera drogadicta, en lugar de apoyarla, le obligaban a irse lejos? "No puedo creer que injustos son con ella" se dijo mientras bañaba a uno de los caballos.
Andrea: Que le dijiste?-pregunto sonriendo cuando Nuria entro a la casa y ella fue hasta la sala en donde se encontraba Andrea mirando por la ventana.
Nuria: Nada que te importe.
Andrea: ¿No le dijiste lo de tu relación con su mejor amigo y con el otro idiota verdad?-pregunto divertida y Nuria apretó la mandíbula.-No, no se lo dijiste, solo pregunto para ver que decirle si es que me llega a sacar platica, porque si no me dices puede que eche todo a perder.
Nuria: Le dije que nos íbamos, y que esa era la condición para que mis padres me perdonaran el haberme drogado y descomponer mi camino.- dijo sentándose junto a Andrea y ella la miro incrédula, pero después sonrió.
Andrea: Ósea que malvada hermanita, una bruja comparada contigo se queda corta, tu te ganas el premio mayor.-dijo divertida y Nuria la miraba seria.-Pero bueno, solo porque soy una buena hermana no diré nada.
Nuria: ¿Y eso?-pregunto cuando Andrea se levantaba.-Siempre te ha gustado hacerme la vida imposible.
Andrea: Bueno si, pero hoy no tengo tantas ganas. Además pensándolo bien, el rancherito se merece que le pongan los cuernos y aparte que le mientan, por taradito, así que por mi que siga pensando que esta con blanca nieves en lugar de la bruja malvada...-dijo levantándose.-Como es que dices? Así espejito espejito, ¿quien es la más bonita? Obvio...Nuria nooo.
Nuria: Estúpida...-susurro mientras miraba como se iba.
Después de la platica que tuvo con Nuria Samuel estaba terminando de revisar que todo estuviera en orden por los alrededores del rancho, pero no dejaba de pensar en Nuria, no quería que ella se fuera pero sabia que era decisión que ya había tomado y que eso le hacia bien, igual el cumpliría con su promesa y la esperaría a que ella regresara, aunque sabia muy bien que en Italia se podría encontrar a un hombre mejor que él.
Samuel: Maldición.-dijo entre dientes mientras se quitaba el sombrero y pasaba su mano por su cabello.
Andrea: Uuuy que sexy te ves así rancherito.-dijo mientras montaba su caballo y él volteo haciendo una mueca de desagrado. -¿Que te tiene tan de malas? Ahaaa ya se, te enteraste de que nos vamos verdad?
Samuel: Si, y ojala la única que se fuera es usted, así nos haría un favor a todos, pero no, desgraciadamente son las dos.-dijo y Andrea sintió que algo dentro de ella le dolía ante ese comentario.
Andrea: Si, ya se que a todos les daría gusto, y no eres tu el único que lo siente he, o los empleados, también yo, alejarme de este mugroso rancho, de la gente tan ordinaria que hay aquí, hubiera preferido irme sola, pero ya ves, Nuria también se viene conmigo...Bueno, pues en una de esas me encuentro un amor ahí en Italia y me quedo para siempre así que ruega para que me vaya bien Samu.-dijo bajando del caballo.
Samuel: Bueno si es para eso, por supuesto que si, ojala se quede ahí para siempre.-dijo serio mientras ella se acercaba a él.-Claro y que Nuria regrese.
Andrea: Ay por supuesto, va a regresar, y como esta tan súper-enamorada de ti espérala y cuando regrese, ojalá se casen y tenga muchos rancheritos y muchas rancheritas y vivan felices por siempre.-dijo y el comenzó a reír un poco irritado. -Pero si quieres un consejito, no esperes a mi hermana.
Samuel: Porque lo dice?-pregunto mientras ella sonreía.-Acaso sabe algo?
Andrea: No, pero Nuria va a conocer gente muy distinta a ti...y que cualquier hombrecito de aquí, con mucha más clase, más educación, porte, belleza, porque tu esteras muy hermoso, divino, sexy, pero ahí ay unos hombres de ojos azules, miel, verdes, hermosos que dices woo, cuales griegos...
Samuel: Su hermana no es así.-dijo y ella soltó una carcajada.-No se ría, además yo puedo tener muchas más cualidades que cualquiera de esos estirados.
Andrea: Ay eso si no creo he, solo mírate eres un pobre diablo, no tienes nada más que tus buenos sentimientos, pero de eso no se vive eheee y si mi hermanita no quiere morirse de hambre obvio no te escogerá a ti.
Samuel: Sabe que? Ya me tiene harto con sus prejuicios y sus complejos tontos, quiero que se retire de aquí ahora mismo, que estoy trabajando.-dijo sujetándole fuerte el brazo.
Andrea: ¡¿Que?! Me estas corriendo de mi propio espacio, de mi rancho?-dijo enojada mientras el seguía jalándola.-Oye suéltame!! Que me sueltes estúpido!.-Grito separándose y lo bofeteo.-A mi nunca me vuelvas a tocar y menos de esa forma.
Samuel: Es la única forma en la que la tocaría y eso porque ya me colmo la paciencia, yo a usted no la tocaría de otra forma ni por equivocación. Porque si yo soy un pobre diablo, un desamparado como usted dice, usted es una pobre mendiga del amor, porque ni el perro se interesaría por usted.-dijo y ella alzo la mano para golpearlo de nuevo pero el se la detuvo pegándola a él.
Andrea: Eres un estúpido, de verdad crees que alguien como nosotras nos fijaríamos en alguien como tu, solo para divertirnos, para eso andamos con los empleados para pasar el tiempo, porque tu no eres capaz de hacer sentir ni la más mínima cosa.
Samuel: Así, vamos a ver si es cierto.-dijo tomando la nuca de Andrea y unió sus labios a los de ella con violencia.
Andrea intento separase de él, un poco sorprendida y furiosa por lo que el se había atrevido a hacer, pero no lo logro, la fuerza de Samuel era mucho más que la suya, a pesar de que se removía simplemente no lograba soltarse, Samuel no sabia exactamente lo que quería conseguir con eso, solo quería callarla de alguna forma, pero después de que unió sus labios a los de ella no pudo separarse, sintió como ella al poco tiempo de luchar comenzó a aceptar el beso hasta que los dos comenzaron a besarse con intensidad y ¿Deseo?
Movían sus labios de forma apresurada, sintiendo como poco a poco el aire se les iba, Andrea deseo pasar sus dedos y hundirlos en el cabello de Samuel, pero el la tenia sujeta de sus brazos y cada ves que ella los movía él, los apresaba más pensando que ella quería separarse, Samuel por su parte quería recorrer esa carita tan frágil que se le veía Andrea, pero sabia que si le dejaba libre los brazos ella se iba a separar y aunque no entendía porque, no quería acabar ese beso. Hasta que a la mente le llego la imagen de Nuria y entonces se separo de ella, como si su tacto le quemara.
Samuel: Ahora si, le deseo un hermoso viaje señorita.-dijo con la respiración agitada y se monto en su caballo para después irse sin escuchar nada más.
Andrea: Infeliz!.-dijo tocando sus labios mirando como él se iba.-Solo lo hiciste para molestarme, para ofenderme y humillarme, pero esto no se quedara así Samuel, me las vas a pagar y yo se justo donde darte...
