6.-¿La extrañas?

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Los dos comenzaron a pelear, Samuel solo quería desquitar su coraje, había tantas cosas que quería decirle a Nuria y ella ya no estaba, así que se desquitaría con su amigo, vio que la sangre comenzaba a salir tanto de la nariz como de la boca de Jaime y sintió como los trabajadores lo separaban, sujetando a Jaime que estaba casi inconsciente.

Jaime: Perdón, perdóname Samuel, te juro que...

Samuel: No me jures nada!.-grito aun sostenido por los trabajadores.-Mejor aléjate de mi! ¡No quiero que me vuelvas a dirigir la palabra me escuchaste! Nunca en tu vida.-dijo y se separo del agarre para comenzar a caminar hacia su cuarto.

Se sentía miserable, el de verdad quería a Nuria, y ahora descubría que todo era falso, que ella no estaba enamorada de él, y que hasta pensaba regresar con él si es que no encontraba un amor en Italia, "Maldita sinvergüenza, resultaste peor que tu hermana, por lo menos ella no fije, y se muestra tal y como es" pensó mientras se sentaba en la cama y se limpio los ojos los cuales estaban llenos de lagrimas.

Lanzo un puñetazo a la puerta cerrada descargando un poco de toda la furia que sentía en ese momento y después miro la grabadora y la nota de Andrea, recodando la sonrisa de satisfacción y de burla que ella le había regalado antes de irse. "Al fin te burlaste de mi, por eso lo hiciste, para hacerme sufrir a pesar de que no estarás aquí, ¿porque me odias tanto Andrea?, yo no te hice nada para que te portaras así conmigo" pensó mientras recogía la tarjeta y la leía de nuevo.

"Espero que no te llegue a doler tanto, y que puedas recuperarte pronto, se que la querías, pero no vale la pena, creo que ninguna de nosotras vale la pena, sigue con tu vida...Suerte"

2 días después...

Andrea estaba llegando a Italia, ya había pasado dos días desde que se marcho, despidiéndose de sus padres y ahora el chofer que contrataron las estaba llevando al colegio en donde iba a estudiar, y acabar por fin sus estudios. Las recibió la encargada del colegio y comenzó un recorrido con ella mostrándoles todo el lugar, ellas ya lo conocían ya que lo habían visto por internet, pero el lugar se veía mucho mejor en vivo.

Directora: Y este será su dormitorio, el de ambas.-dijo cuando llegaron y tanto Andrea como Nuria rodaron los ojos.

Andrea: Bueno, pues ya que.-dijo entrando y escogiendo la cama junto a la ventana.

Nuria: Muchas gracias.-dijo sonriendo y la directora se marcho.-Por lo menos podrías ser amable no? Digo luego te quejas de que a las personas no les caes bien.

Andrea: Siii podría, pero uhuuu que lastima, la señora ya se fue.-dijo alzándose de hombros.-Y bueno yo no necesito de nadie, así que si les caigo mal, lo siento por ellas.

Nuria: Como quieras.-dijo con fastidio y comenzó a sacar la ropa de su maleta.-Tu no sacaras tu ropa y tus cosas?

Andrea: No, ahora quiero recorrer el lugar "Y de paso ver si encuentro a Bruno" pensó mirando por la ventana.-Bueno adiós.

Nuria: Espera yo te acompaño.-dijo sonriendo y Andrea la espero hasta que las dos salieron.

Comenzaron a recorrer el lugar, mientras iban sonriendo y platicando de como estarían sus padres, Andrea no recordaba una platica con Nuria de esa forma desde que se había marchado a Madrid, pero de pronto ella saco el tema de Samuel y Andrea como siempre se volvió a poner seria.

Andrea: Bueno voy a conocer los baños.-dijo mirándolos hasta el fondo y Nuria la miro desconcertada.-¿Que? Solo iré a lavarme las manos, las siento pegajosas.

Nuria: Esta bien.-dijo y ella comenzó a avanzar hacia los baños.

¡Todo estaba muy limpio! Demasiado para ser unos baños, pero le agrado, comenzó a lavarse las manos poniendo jabón liquito sobre ellas, hasta que las sintió frescas. Y después salió para ver como su hermana platicaba con un joven, "Claro, doña golfa al ataque, que novedad" pensó mientras se acercaba, estaba muuuy guapo, aunque le cayera mal debía aceptar que su hermana tenia buenos gustos.

Andrea: Hola, ya tan pronto consiguiendo amigos?-pregunto a su hermana que se puso seria.-No cabe duda hermanita, eres dinamita pura.

###: ¿Hermanita? Ósea que tu eres Andrea?-pregunto sonriendo mientras la veía de arriba abajo y Andrea frunció el ceño.

Andrea: ¿Te conozco?.

###: Acaso no me conoces? Que mala Andy, y yo que he soñado contigo día y noche desde que me vine a Italia.-dijo sonriendo y ella lo miro sorprendida, el único que le decía Andy era...

Andrea: Bruno?-pregunto y este asintió sonriendo.-Oh por Dios! Bruno! Bruno!.-grito saltando sobre él mientras comenzaba a llenar de besos toda su cara y este reía.- No lo puedo creer, estas guapísimo!

Bruno: Eso mismo digo de ti Andy, estas hermosa, irreconocible.-dijo mirándola con fascinación mientras Nuria los veía con enojo y desconcierto, y después vio como la volvió a abrazar. "Vamos a ver cuanto te dura el gusto cuando te lo gane como siempre lo hago" pensó mientras los miraba.

Samuel estaba concentrado en su trabajo, era lo único que lo hacia olvidar, aunque no del todo, el rancho se veía mucho más tranquilo sin Andrea y Nuria ahí, aunque a decir verdad el no extrañaba a Nuria, le dolia lo que le hizo ya que jugo con su orgullo, pero no tenia ganas de llorar y mucho menos le pesaba que ella no lo amara.

Cuando cabalgo por los lugares alejados del rancho, llego sin darse cuenta al lugar en donde se habían besando él y Andrea, como si el caballo lo hubiera llevado con intensión a ese lugar, y recordó el beso, mientras pasaba sus dedos por sus labios.

"Estas loco Samuel, hace unos días te acabas de enterar que te engañaron de la manera más baja y ahora piensas en Andrea? Al parecer esa señorita te pego toda su locura antes de irse" pensó con enfado y se regreso a la hacienda.

Petra: Hola hijo, terminando de trabajar? ¿Quieres algo de comer?-pregunto sonriendo mientras el se quitaba el sombrero.

Samuel: Un vaso de agua solamente por favor Petra.-dijo mientras se sentaba en la cocina y Petra se lo sirvió.-La casa se siente muy sola desde que las hijas de don Ignacio se fueron no?

Petra: La casa? Todo el rancho, pero la verdad a la que extraño es a mi niña Andrea, porque Nuria nunca estaba en la hacienda, esa muchacha era salir y salir.

Samuel: Si, eso si, quien diría que a la que se le iba a extrañar fuera a Andrea.-susurro casi para él mientras bebía de su vaso y Petra sonrió.

Petra: Extrañas a mi niña?

Samuel: No, bueno, como siempre me molestaba ahora esta demasiado tranquilo, solo lo decía por eso, pero a decir verdad, me gusta la paz que hay aquí. "Paz que durara 10 años pensó.

Ignacio: Samuel, necesito que vengas conmigo.-dijo y Samuel asintió mientras lo seguía.

Samuel: De que se trata señor?-pregunto cuando entraron al despacho.

Ignacio: Se trata sobre tu abuela muchacho.-dijo y el se tenso.

Samuel: No quiero saber nada de ella.

Ignacio: Ella quiere verte, Samuel se que le tienes rencor, pero ella se esta muriendo y necesita verte...

INDIFERENTESWhere stories live. Discover now