Capítulo 23

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Billie sujeta mis brazos mientras camina, yo retrocedo poco a poco viendo su rostro. Hace un mes ella a empezado a mejorar mucho, ahora estamos en el jardín caminando.

-¿Duele el talón o el tobillo cuando pisas?-le pregunto sosteniéndola por la cintura pues se quejó cuando dio otro paso.

-No lo se, solo duele-ella dice poniendo sus manos en mis hombros.

Baje mi mano tocando su cintura, presionando con mis dedos cada vez que avanzaba hasta llegar a su muslo, ella se quejó.

-Tranquila solo es un golpe-susurro volviendo a poner mi mano en su cintura-¿quieres descansar?-le pregunto.

Asintió y no tarde más de tres minutos en cargarla hasta llevarla al sofá del porche. Me quede de pie frente a ella-¿cuando nos iremos?-me pregunta.

-Cuando estes bien-murmuro sentándome en el escalón de madera.

Sus ojos se perdieron en el bosque, el día está algo nublado lo que hace que esté un poco oscuro. No es el mejor día pero es lo que tenemos, estamos a punto de entrar a verano y el verano en esta zona es húmedo. A estado algo pérdida estos últimos días, sus sonrisas son cada vez menos al igual que sus besos solo e sido yo tratando de hacerla sonreír.

Tome su mano-puedo traer una pomada para aliviar el dolor-murmuro.

-Andy quiero preguntarte algo-ella me dice con un tono de voz serio. Cuando vi su mano en su vientre supe de que se trataría-hace un mes que no siento nada-susurra.

Me acerqué a ella recargando mi cabeza en su pierna-Billie yo...-susurro pero me interrumpe.

-¿Está muerto?-me pregunta.

-Hice lo necesario para mantenerte con vida-murmuro dejándola de ver, ahora yo soy la ve hacia la nada. Intento soltar mi mano pero no la deje-eras tú o el bebé-volteo a verla.

-¡Esa no era tu decisión!, hubiera preferido-Billie me estaba diciendo con algunas lágrimas en sus ojos pero la interrumpí.

-Nunca me perdonaré haber matado un bebé...a tu bebé y no espero que tú también me perdones pero en ese momento todo pasó rápido-le digo volteándola a ver.

-Nunca te perdonaré-ella susurra.

-Perdóname por elegirte Billie-le digo levantándome. Entre a la casa ganándome la mirada de Víctor que está jugando con Ellie, el levantó sus cejas-cuídalas-murmuro saliendo de la casa.

. . .

Intenté moverme pero algo me sujeta, abrí los ojos viendo a una mujer recostada en mi pecho. Antes de alterarme observé la habitación desconocida, otra vez con cuidado me solté de la mujer y me levante dándome cuenta que estoy desnuda.

Encontré mi ropa en una esquina y me la puse en silencio, luego salí encontrando una casa vacía. Salí viendo la calle e intenté ubicarme hasta llegar a mi calle, suspire aliviada pero el dolor de cabeza no me dejaba caminar rápido por eso iba caminando demasiado lento.

Abrí la puerta y me recosté en el sofá sintiendo que el dolor de cabeza me dejó de doler. No sé cuánto pasó hasta que sentí que alguien me aventó un cojín. -¿Donde estabas?-me pregunta Víctor. Abrí mis ojos-¿por qué no estás con Billie? Ella a estado llorando desde que te fuiste-dice sentándose en el sofá de enfrente al mío.

-Fui a trabajar, necesito dormir-me doy la vuelta pero el volvió a pegarme con un cojín-¡¿qué?!-le pregunto.

-Te desapareces dos días y luego haces esto, ¿qué le hiciste a Billie?-me pregunta algo enojado.

Me levante y subí las escaleras, entre a la habitación de Billie, ella me vio y se dio la vuelta Ellie está jugando en su cuna con el oso.

-Billie-murmuro acercándome a ella.

-Hueles demasiado a cigarrillo, vete-ella me dice con un tono algo frío. Entre al baño a lavar mi cuerpo, me puse ropa limpia y volví a salir, sin esperar a que hablara me recosté.

Ella me da la espalda.

-Conseguí un auto, filtros, ropa...comida-empiezo hablar pero ella me interrumpe.

-Doctora Evans déjeme en paz-está vez dijo cubriéndose con la sabana.

Me acerqué a ella, pasando mi brazo por su cintura aunque Billie intentó soltarse pero me aferré mas a ella-perdón-susurro.

Después de unos segundos ella se dio la vuelta, puso sus manos en mis mejillas inspeccionando mi rostro-me duele haber perdido a mi hijo...es como si tú perdieras a Ellie-dice escondiendo su rostro en mi cuello.

-No debí irme-murmuro-tampoco debí a ver hecho todo lo que hice esa noche...si no quieres hablarme esta bien solo te pido que vengas conmigo-le digo acariciando su espalda.

Ella suspiró junto con sollozos, solo acaricie su espalda. Es lo único que puedo hacer dejarla llorar a su bebé, después de un rato me dio un beso en la mejilla.

-Solo te perdonaré porque te necesito-susurra. No esperaba nada más-y me gustan tus brazos-dice volviéndose a recostar sobre mi pecho.

Sus dedos acariciaron mi cuello-te acostaste con alguien-ella me dice.

-No-digo pero ella toca otra vez mi cuello.

-Tienes moretones aquí, una mordida acá y tu labio está mordido-ella dice tocando mi piel. Intente decir algo pero no supe que decir, solo me le quede viendo a la pared.

Intenté besarla pero ella giró su rostro, suspire recargando mi cabeza en su coronilla. Ella tomó mi rostro-perdón, no recuerdo nada ni siquiera se quien era la mujer...yo-me interrumpió juntando nuestros labios.

Me besó de una forma lenta, luego se alejó-no necesitas darme explicaciones, no somos nada Andy-susurra dándome un ultimo beso en la mejilla.

Creo que arruine lo que sea que teníamos, esa noche algo cambio entre nosotras. Solo me usaba para darme besos y dormir en mis brazos, cuando yo intentaba besarla me lo impedía y luego ella besaba.

Ya no me cuenta cosas como antes o me dice cosas sobre mi personalidad, por eso decidí regresar al consultorio, al menos tenía once horas de distracción.

Luego todo se volvió en una rutina, besos en las noches, Víctor contándome cosas que hicieron durante el día y Ellie es la única que se alegra cuando llego a casa.

No pensé que me afectaría tanto el rechazo de Billie, Clark notó esto y volvió a coquetearme durante el día. Volví a quedarme despierta toda la noche y mi cuerpo no exige comida regrese a ser yo pero con esa sensación en el pecho del inconfundible rechazo.

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