Ti Shen Volumen 2 Interpretación Perfecta

CAPÍTULO 63: AMOR IMPETUOSO

　　le rodeó con sus brazos y le dio unas suaves palmaditas en la espalda: "Está bien, está bien... este hermano te ayudará a luchar contra los perros..."

　　An Mu aprovechó la situación para recoger algunas piedras pequeñas, y cuando levantó a An Chen, se las arrojó al cachorro, luego hizo un movimiento de flexión como si fuera a recoger más piedras.

　　El cachorro se sobresaltó, dio media vuelta y salió corriendo.

An Chen vio al perro huir, sus lágrimas se convirtieron en una sonrisa, luego abrazó a An Mu y se frotó la nariz y las lágrimas, y dijo con una mirada de admiración: "¡Hermano eres increíble!"

　　An Mu secó las lágrimas de las mejillas del pequeño An Chen, sonrió suavemente y le dijo: "¡No huyas cuando te encuentres con un perro la próxima vez!"

　　"¡Sí!", el pequeño An Chen asintió obedientemente, agarró la manga de An Mu y dijo: "Hermano, ¿quieres jugar conmigo..."

　　"Esto..." An Mu vaciló por un momento, luego miró los ojos anhelantes de An Chen, "Estamos jugando al fútbol, ​​temo que podríamos golpearte... ¿No sería mejor que te quedaras en casa?"

　　"No ..." An Chen negó con la cabeza, "Si el balón viene, lo evitaré y no me golpearán... ¡Puedo recoger el balón por ti incluso si lo patean lejos!"

　　An Mu estaba indefenso, así que tuvo que ir con él.

　　Efectivamente, An Chen se paró obedientemente a un lado y observó a los niños mayores jugar con el balón. A veces, la pelota era pateada fuera del área, y no dudó en correr detrás de él para recogerlo y una tras otra, estaba más cansado que su pateador, su carita estaba cubierta de sudor, y cuando recogía el balón sus manos se llenaban de polvo, y cuando se limpiaba el sudor le ensuciaba la carita... pareciendo un pequeño gato callejero.

　　Pero no se quejó en absoluto, corriendo con fuerza hacia el regazo de An Mu cada vez que sostenía el balón que no lograba rodearlo con sus cortos bracitos, levantó su carita sonriente para pasarle el balón: "¡Aquí tienes, hermano!".

　　Una hilera de pequeños dientes blancos asomaba, esa sonrisa era pura y deslumbrante...

　　Aunque solo por esta vez An Mu accedió a que lo siguiera, ya que más tarde, debido a que An Mu iba a tomar el examen de ingreso a la escuela secundaria y necesitaba estudiar más, An Chen y An Ya fueron enviados a la casa de su abuelo para ser cuidados, por lo que An Chen y An Mu no tuvieron la oportunidad de pasar tiempo juntos...

　　Sin embargo, An Chen todavía no podía olvidar al An Mu de aquella época, el An Mu que fue lo suficientemente sensato como para ayudarlo a ahuyentar al perro, el An Mu que se comprometió y lo llevó a jugar con él, aunque fue algo muy pequeño e insignificante, y ahora que pensaba en ello, se podría decir que eran cosas triviales que no valían la pena mencionarse en absoluto, pero en la pequeña mente de An Chen en aquel momento, todavía sentía que su hermano era lo mejor para él.

　　Más tarde, ..... se distanciaron más cuando An Mu fue al internado, An Chen también fue a la escuela y tenía su propio círculo de amigos, por lo que su contacto con An Mu se limitaba a cuando venía a casa de vacaciones; no lo vio ni siquiera unas pocas veces cuando estaba en la universidad, y no fue hasta que An Mu trabajó y se estableció que An Chen pudo volver a ponerse en contacto con su hermano.

　　Pero era como si mi hermano prefiriera a An Ya, An Luo y An Xin, y siempre he sentido un poco de rechazo hacía mi.

　　An Mu, por su parte, sentía que An Chen también había cambiado desde que era un niño, ya no era el pequeño frijolito que lo perseguía todo el tiempo gritando "hermano", "hermano", sino que se había vuelto independiente, encantador, maduro e introvertido.