Capítulo 37

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Zombie - Bad Wolves. One hour. 

Narrador omnisciente.

La comunicación es lo más importante en nuestra retorcida relación.

Comentó la doctora Carvajal unos meses atrás a su amante, aunque ya no sabe si sigue siéndolo.

Odia y repudia las mentiras con todo su ser, pero es ella quien miente, ella guarda secretos, por lo mismo, ya no cree conveniente seguir teniendo encuentros con Oleg Bogdánov.

Ella sabe que mientras no haya mentiras todo se pueda arreglar, pero estar perteneciendo a OFR, sin que él lo sepa, es una de las tantas cosas que ella oculta.

Días atrás, en una de las conversaciones con él, no le importó la idea de ser un agente de OFR, sin embargo, con la llegada de Carsten las cosas han cambiado y no permitirá estar bajo su mandato machista y misógino.

Desde el primer momento que tuvo un encuentro con Carsten dejo las cosas claras, si él no creyó en su palabra, considera de que ya no es su problema.

Tampoco es su culpa de que el Gobernador le haya confesado tantas cosas, que ella no pidió saber.

Nada de las cosas que hizo el Gobernador tuvieron el efecto que quería, por el contrario, con cada golpe, cada humillación, cada parte de su cuerpo que sufrió las consecuencias de lo que él es provocó... será cobrado.

Alessia se ve una última vez frente al espejo, contemplando su belleza enmarcada en un conjunto negro formal, su rostro no muestra ninguna expresión, las grandes ojeras, consecuencia del insomnio y las constantes pesadillas, no son percibidas.

Sin embargo, por dentro siente demasiado que le asfixia, el peso de todo sigue en su espalda, pero eso no es sinónimo de debilidad ni derrota. Se admira, así misma, por todo el odio que puede albergar sin demostrar el dolor que le provoca.

Se da la vuelta y camina a la camioneta negra que la espera, Tyler se adelanta a abrir la puerta y por un segundo se permite admirar a la Dra. Carvajal.

Sin duda es una mujer con cojones, o demasiado estúpida, por muchas cosas una de ellas es, vestir esa ropa y no la que el Gobernador le entregó.

Porque recuerda muy claramente la orden del Gobernador, al obligar a la doctora a usar el traje especial para la ceremonia que se llevará a cabo, y más si en esta se presentara a los demás como un agente más.

A ella le parece estúpido, pues desde que indirectamente acepto la USB en Colombia lo es.

—Date prisa Tyler, y limpia tu baba. —el agente lleva su mano a la boca y cuando ve que la doctora rueda los ojos, se da cuenta de que es mentira.

Los otros tres agentes también encargados de su seguridad se hacen los sordos. Desde que trabajan con ella solo son estatuas, ya que no quieren arriesgarse a hablar y terminar en disputas como le pasa a su compañero Tyler.

—El Superior Bogdánov no sabe de su presencia, ¿Quiere que se lo informe? —inquiere el agente mientras pasan por las calles de la capital.

La doctora no desea hablar con su amante, no si él la está odiando por acusarlo de algo que ella sabe nunca haría, y se odia así misma por todo lo que le gritó y por todas las mentiras que aun guarda.

Las malditas pesadillas que la acompañan cada noche únicamente le recuerdan lo injusta que fue. Su amante no lo merecía, es por ello que quiso tomar somníferos, pero fue imposible, ya que afecta a un posible colapso.

Alessia no dice nada y el agente toma su silencio como una negativa, sin embargo, es su jefe y debe de advertir la situación de inmediato, se estresa cuando la llamada nunca es respondida y está rezando para no ser sancionado.

Ambición.Where stories live. Discover now