Capítulo 17

2.1K 204 36
                                    

Titanium -David Guetta ft. Sia. One hour.

—Colombia —repite anonadado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Colombia —repite anonadado. —¿Oleg lo sabe? —Lo veo extrañada.

—No, ¿Y qué tiene que ver Oleg en esto?

—No creo que le agrade la idea que en estos momentos salgas del país. —No me gusta el rumbo de esta conversación.

—Sinceramente lo que le importe o no ha Oleg no es mi problema. —Me defiendo evitando verme a la defensiva.

—Yo no estaría tan seguro. —Se cruza de brazos. —Dejemos las formalidades Alessia. No nos conocimos de la mejor forma y... —Carraspea al ver mi cara. —A lo que quiero llegar es que ustedes no ven lo que nosotros sí.

—Y según tú ¿Qué es lo que Oleg y yo no vemos? —Sonríe

—Nada en especial, simplemente no quiero que salgas lastimada.

—¿Perdón? —me indigno.

Retomamos la caminata yendo a recepción

—Oleg es un hombre comprometido.

—Soy consciente de eso.

—¿No te incomoda?

—¿Tendría por qué? —Me ve como si me hubiera salido un tercer ojo. —El único motivo por el que nos seguimos encontrando es porque así lo deseo.

—Pero...

—No. —lo interrumpo. —Somos amantes porque así lo quiero, no busco nada más que placer. —aclaro. —Mis intenciones no son que Oleg termine su compromiso por mí.

—Alessia no es solo por eso. —Ve sobre mi hombro. —Después del nombre Oleg hay otro que dice problemas.

—Quien se encargará de esos problemas será Young Min, no yo. —A este hombre le gusta el drama

—Tú también. —Nos volvemos a detener.

—¿Tan difícil es entender mi punto? —Me cansa todo esto. —Que te importa que me acueste con Oleg. No me mantienes y estoy segura que a él menos.

Llega una enfermera a nosotros entregando documentos para que firme.

Los revisa por encima y pone su firma en ellos, nuevamente quedamos solos al menos a unos dos metros a la redonda. Suspira queriendo indagar en que estoy mintiendo.

Se quedará esperando porque no lo encontrará.

—No me importa que se revuelquen —Dice después de unos minutos. —Simplemente es difícil entender su relación.

—Se complican porque quieren. —Me encojo de hombros y observo mi reloj para saber que aún tengo tiempo.

—¿Por qué queremos? —Lo vuelvo a ver, es lindo pero tonto.

Ambición.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora