Capítulo 20

2.4K 212 110
                                    


Power - Little mix. One hour.

El tiempo siempre será nuestro peor enemigo, ejemplo de eso es que ahora ya estoy lista para retomar la cena que tenía pendiente con Oleg, dijo que pasaría por mí, pero me negué rotundamente, puedo hacerlo por si sola

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

El tiempo siempre será nuestro peor enemigo, ejemplo de eso es que ahora ya estoy lista para retomar la cena que tenía pendiente con Oleg, dijo que pasaría por mí, pero me negué rotundamente, puedo hacerlo por si sola.

—Buenas noches. —saluda al verme —Luce usted increíble Dra. Carvajal.

Se ve malditamente caliente, lleva unos jeans ajustados y un polo blanco, junto a esas botas negras que me encantan y en su hombro una chaqueta de cuero.

Tengo al Ruso para mí solita esta noche. Exquisito.

—Usted no se queda atrás Sr. Bogdánov.

Me invita a seguir y un mesero nos indica donde está nuestra mesa. Nos sentamos apartados del bullicio.

—¿Cómo te sientes? —cuestiona. Quiero pensar que tiene interés, pero su rostro no dice nada.

—Ya no tengo dolor y el hematoma ha bajado de color gracias al medicamento. —Evito decir que ayer encontré la sala destrozada y una Zule estérica.

Lo arregle por lo que no veo necesario mencionarlo, si por otro lado se entera no lo negare, pero no quiero arruinar está cena.

—Bien. —Es lo único que dice.

Por unos segundos nos quedamos en silencio, solo observándonos como si pudiéramos leer al otro. Tengo muchas cosas que decirle, aún más que preguntar porque me estoy cansando de ignorar lo evidente.

—¿No eres médico cierto? —Lo he pensado durante mucho tiempo y hay muchas dudas sobre eso.

Prometí que no iba a indagar lo que no me importa, pero es para confirma algunos cabos sueltos que me han dejado intrigada. Mi pregunta no parece tomarlo por sorpresa.

—No. —acepta. —Pero eso no tiene nadie porque saberlo.

Y con esas palabras confirma mis sospechas, pero no puedo pasar por alto las advertencias entre líneas que me dicen que no lo puedo divulgar.

—Estas consiente que es una de las pocas veces que tenemos una conversación normal. —Cambio tema.

—¿Quieres que te quite las bragas y te folle como te gusta? Por mí no hay problema. Aunque no me gustaría que vean lo que me como, no, si no lo permito.

No, si no lo permito. Anotado para preguntar después,

—No quise decir eso. —aclaro divertida.

—Bueno, ya que no podemos tener una conversación normal como tú le dices, iré al grano con lo que en realidad interesa.

—¿O sea que yo no te intereso? —finjo indignación.

—Veo que estás entera y sin ningún nuevo rasguño, así que deduzco que estás bien. — Ruedo los ojos.

Que graciosito me saliste, bestia.

Ambición.Where stories live. Discover now