Capítulo 33

1.7K 146 91
                                    

Animals - Maroon 5. One hour.

Cuando pienso que todo está en orden, aparece la loca a mover el rumbo del puto mundo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cuando pienso que todo está en orden, aparece la loca a mover el rumbo del puto mundo. 

Su piel está lleno de tantas heridas, que muy rápido se convierten en unas feas cicatrices. Me gusta saborearlas, pero me molesta que otro las haya probado antes y más cuando ellas sangraban.

—Sumasshedshiy. —susurro.

La odio y detesto en partes iguales, porque solo a una loca se lo ocurre que yo podría pensar mal de ella. Jamás haría algo que su maldita cabeza maquina, pero no puedo esperar menos de una demente insensata.

A estas alturas no se si seguir odiándola como lo he hecho siempre o retornar y empotrarla para que se le quite la puta idea de que me avergüenzo de tremenda mujer.

Aprieto la mandíbula al recordar sus insinuaciones. Sigo conduciendo para culminar lo que he empezado.

—Sigo creyendo que no es buena idea que la hayas dejado allí. —comentó Rustam a mi lado.

No respondo, yo sé lo que hago y no necesito sus sugerencias. Desde que el video se empezó a reproducir en el anfiteatro, mi mente solo tenía dos cosas en mente.

Matar  y torturar.

Fueron los malditos minutos más largos que había presenciado. Odio no haber podido quitar ese vídeo antes y con eso ahorrar que la loca se llenará de más mierdas, el equipo hizo todo lo que pudo, pero una vez más los farsantes de H.B. nos hicieron mierda.

Me la pagarán caro.

Pongo manos libres con la llamada que entra.

—¿Tienes los nombres? —soy directo

No hizo falta más que una mirada para que mis subordinados se pusieran en la tarea de indagar quienes fueron los malditos que estuvieron en ese video. Mientras yo llevaba a la doctora a una de las fortalezas Bogdánov, ellos trabajaban en buscar sus nombres.

Solamente uno de dos que estuvieron en el acto y el que grabó. —responde.

Su respuesta no me deja para nada satisfecho, pero por el momento eso me basta para descargar la furia que ordeno controlar.

—Dame su ubicación. —exijo.

Esos mal nacidos deben dejar de respirar, pero antes de mandarlos al infierno, se van a enterar de los motivos.

Tengo en mis manos al que grabo y está vivo. El otro murió de forma sospechosa en un accidente hace unas semanas. —mi mente empieza a maquinar. El único accidente que ocurrió de manera sospechosa hace unas semanas fue el que provoco la loca, solo espero que haya disfrutado lo que hacía mientras trataba de cortar los frenos, porque su muerte no me parece nada satisfactoria para lo que él se merecía.

Ambición.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora